XII

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La burbuja de mecanografía pareció durar una eternidad, y Ochako siente que se le cae el estómago. ¿Había sido demasiado atrevida? ¿Demasiado ansioso? ¿Estaba interpretando mal esto?

No, Bakugou había dicho algo peor, ¿tal vez solo estaba sorprendido de que ella lo hubiera alentado abiertamente esta vez?

Oh Dios. Ella había arruinado esto, fuera lo que fuera, antes de que pudiera comenzar.

Oh, carajo.

Ella tuvo que disculparse. Ella tenía que-

Su teléfono vibró.

| Ground Zero: Apuesto a que te sentirías tan apretado alrededor de mi polla.

Bueno, joder.

| Zona cero: Tendría que quitarte ese mono para que pudieras probarlo. Apuesto a que estarías tan apretado y mojado para mí.

Ochako sintió un escalofrío de excitación atravesarla cuando sus palabras se dispararon directamente a su centro. Sabía que Bakugou tenía la boca sucia, se había dado cuenta después de diez minutos de enviarle mensajes de texto, pero no esperaba que al leer esas palabras groseras y sucias, su coño se apretara como estaba.

No sabía que las palabras podrían hacerla mojar tan rápido.

| Zona cero: ¿Qué pasa con el silencio? ¿Te sientes tímido?

| Zona cero: Háblame.

Ella debería terminarlo aquí.

En cambio, se mudó a su habitación apoyada contra la cabecera de su tabla mientras escribía su mensaje.

| Uravity: Tendría que verlo para estar seguro ...

| Zona cero: maldita descarada

| Zona cero: [1 imagen]

Ochako tocó el icono, jadeando suavemente mientras lo asimilaba todo.

Su rostro estaba en él.

Bakugou Katsuki, un diseñador de lencería de renombre internacional, tiene el labio inferior atrapado entre los dientes (perfectamente recto y blanco, señala). Había una mirada de suficiencia en su rostro, dándole una confianza que hizo que el calor se extendiera por sus miembros. Su pecho estaba desnudo, atrayendo sus ojos hacia sus pectorales y abdominales y luego hacia el ligero rastro de cabello que bajaba hasta su entrepierna.

Lo sostenía en su mano.

Bueno, joder.

Dedos largos y gruesos se envolvieron alrededor de la base de su longitud mientras se sentaba, erectos, atractivos y gruesos .

| Zona cero: ¿Pensamientos?

¿Pensamientos?

Quería que ella tuviera pensamientos coherentes reales y los escribiera cuando lo único en lo que podía pensar era en lo satisfactorio que se sentiría el estiramiento una vez que él se hundiera en ella centímetro a centímetro. Cómo se sentiría cuando tocara fondo y sus caderas se encontraran con las de ella.

Su coño palpitaba, las paredes se apretaban patéticamente contra la nada y él quería que ella le enviara un mensaje de texto.

Él estaba en lo correcto. Sería un ajuste perfecto, pero estaba bien.

Ella lo aceptaría.

| Uravity: Eres tan grande.

| Uravity: Pero me mojas tanto que apuesto a que podría soportarlo.

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