Comienzo a abrir los ojos, bostezo y observo a mi alrededor, me doy cuenta que estoy en la enfermería del colegio, en un camilla.
— Despertaste. — mi mirada se dirige a Nathan, quien acaba de entrar y sentarse en una banca al lado de la cama.
— ¿Porque me salvaste? Hubieras dejado que me siga golpeando, para morir y acabar con esta agonía de vida. — digo y él suspira.
— No quiero que mueras tyler, me importas y mucho. — dice sonriendo.
Vi sus labios y supe que estaba jodida, porque no cualquiera te hace sentir tantas cosas con una sonrisa.
— No puedo importarte Blair, recién hemos comenzado hablar, ¿como puede importarte alguien que ni siquiera conoces? — le pregunto y el se acerca a mi rostro, nuestras respiraciones se mezclan y ambos nos miramos a los ojos.
— ______, se que recién nos estamos empezando a conocer, pero tú me estás haciendo demasiado feliz, el momento en que vi tus ojos supe que eras todo lo que buscaba. Porque cualquiera no te puede hacer sentir muchas cosas con una simple mirada. Estoy dispuesto a esperarte el tiempo que sea necesario para que me ames. — cuando termino, unió nuestros labios en un dulce beso, me dolía un poco por los golpes de Summer, pero ya no importa.
Rodee mis brazos en su cuello y sentí como sonrío contra mi labios, un beso lleno de sentimientos, juro que jamás me cansaría de besarlo por el resto de mi vida. Seguíamos besándonos hasta que el aire faltó y nos separamos.
— Eso fue...Guao. — digo sonriendo y él me besa la frente. — Nathan, ¿Creés que podrás soportarme? — el ríe y asiente.
— Lo haré, lo prometo. — entonces, yo esta vez, junte nuestros labios.
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