𝑍𝑖𝑡𝑡𝑖 𝑒 𝑏𝑜𝑢𝑛𝑖

7

—Draken, cariño. ¿¡Que mierda hacemos acá desde el amanecer!?—grito Acalia al lado del rubio que miraba fijamente el local de videojuegos que aún no abría, mientras que aún en el horizonte se veía el amanecer

—Pronto será el cumpleaños de Emma— dijo él sin despegar su mirada de algún punto fijo en la pared del local

—Lo dices como si eso explicara el por qué estoy acá congelándome los ovarios— dijo amargamente la azabache mientras se fundia mas en la chaqueta de la ToMan que le pertenecía a Keisuke

—Ya lo veras, deja de quejarte— dijo este con indiferencia mientras la azabache lo pateaba sin mucha fuerza. Los minutos pasaron y llegó el señor de edad avanzada que era el dueño del almacén, les regalo una dulce sonrisa a ambos jóvenes y abrió el local, Draken en el momento en que las puertas se abrieron caminó rápidamente en a una máquina de gancho donde había varios peluches rosados e insertó la moneda para darle inicio al primer intento

—¿Ya desayunaron jóvenes? ¿Gustan un poco de café?—Preguntó el señor a ambos chicos

—No, gracias viejo— dijo Draken sin prestar mucha atención a su alrededor concentrado en el juego

—Yo si le tomo la palabra señor, ese imbécil me saco a patadas de mi casa y sin desayunar— dijo Acalia para irse tras el señor de edad avanzada tras el mostrador

Las horas pasaban y los innumerables intentos seguían uno tras otro sin éxito, Acalia se encontraba detrás del mostrador junto con el propietario bebiendo una sopa instantánea mientras ambos veían a Draken frustrado e insistente en sacar el dichoso peluche

—Ha venido durante toda la semana por el mismo peluche sin éxito, debe ser una persona muy especial para que haga esto todos los días — dijo el anciano al lado de la chica también observando al desesperado chico

—Si... se una chica muy especial— dijo Acalia dando inconscientemente una sonrisa hacia el rubio, ya en el atardecer Draken hastiado rompió el vidrio de la máquina y agarró el peluche, corrió en dirección a Acalia sujeto su mano y dejó unos billetes encima del mostrador

—¡Lo lamento viejo!, ¡Mañana es su cumpleaños!— dijo Draken mientras corría con el peluche en una junto con la otra agarraba a Acalia hasta que el celular de la azabache comenzó a sonar mostrando una foto de Baji y ella en donde el azabache estaba mirando a otra parte mientras besaba el cabello de la chica y ella sonreía a la cámara, la chica sonrió hasta que vio que el nombre del azabache había sido reemplazado por Daddy, la chica sonrió y contestó

—¿Cuando te cambiaste el nombre?— dijo ella aun con Draken jalando de ella

—Mientras dormías, ¿lista para hoy en la noche?— dijo él con la voz ronca

—¿Esta noche?— cuestiono confundida

—Mira el mensaje de Mikey — dijo el azabache, Acalia aprovechó que Draken ya se había detenido para ver la bandeja de mensajes en donde se veía el nombre Mikey resaltado

—"Peda destructiva hoy en la noche en mi casa por el cumpleaños de Emma, paliza para el que no venga— decía el mensaje que había sido enviado a los amigos cercanos de el líder de la Toman y su hermana

—Vaya, nos espera una larga noche— dice Draken viendo el mensaje a detrás de la azabache ya caminado y dirigiéndose a su moto junto con Acalia

—¡Vamos a loquear...!—grito Baji ahora en altavoz

—¡Si señor...!— gritó en respuesta Draken poniendo en marcha la moto

—Bueno, pero no voy a tomar— dijo al azabache a su novio y amigo