Watson 2: La Era de Gokzu

En Tiempos Mejores

Es increíble, pero uno nunca sabe cuanto puede cambiarte la vida de un momento a otro y con una simple decisión.

James se encontraba realizando la carrera de historiador. Los años anteriores que pasó reconstruyendo y uniendo a las diversas civilizaciones de la tierra Mística, le dieron el empuje para elegir cual sería su próximo paso en la vida.

Cursar la carrera de historiador fue todo un cambio para él. Fue dejar a un lado su lugar de mediador de conflictos, para comenzar una vida normal. Quizás la vida que hubiese tenido si no hubiera perseguido sus sueños más allá de lo conocido.

Las cosas en la tierra mística habían cambiado mucho. Algunos místicos decidieron mudarse a Sargarena para conocer más de esa nueva y novedosa cultura, del mismo modo que los habitantes de Sargarena salían a explorar la tierra mística en busca de aventuras extraordinarias y paisajes únicos, además de sus culturas claro. No había restricciones ni prohibiciones, aunque claro que había conflictos y desacuerdos.

James junto a Lucinda debieron intervenir en varios de ellos. La mayoría eran débiles intentos de quebrar la paz y armonía de las dos tierras.

Sam Brunner, amigo de James desde la infancia, era parte del ejército místico. Sam se esforzaba mucho por encajar en el grupo, y Lucinda se ofreció a entrenarlo con la condición de que no seria muy flexible con él por ser amigo de su hermano.

El joven, en poco tiempo, había aprendido a manejar las lanzas y tener buenos combates cuerpo a cuerpo, estaba lejos de ser un experto, pero se manejaba bastante bien.

Otras modificaciones hubo en la tierra mística. Para un mejor manejo de los conflictos y tomar decisiones en base al diálogo y el consenso se creo un consejo con los líderes de cada región de la tierra.

El Consejo estaba formado por siete miembros que respondían a las regiones más cuantiosas de la tierra Mística: Parius (en representación de los duendes), Firgus (como líder de los Gáshukos), Bruthan (que recientemente había sido asignado como nuevo líder de los ogros), Alamys (por ser quien dirigía a las criaturas árbol), Gunthal (como el representante de las criaturas de la tierra), Noria (la líder de la región de las brujas, que llegaron a obtener su lugar debido al gran aporte dado en pos de la unificación de las civilizaciones) y James, como el último de los líderes, ocupando su lugar por ser considerado héroe de la tierra Mística y en representación de los humanos de Sargarena.

Los asuntos a tratar por el Consejo no eran nada del otro mundo: Se encargaban de la toma de decisiones que involucre a las distintas regiones, así como de la pacificación de los conflictos que surgieran entre los místicos y los sargarenos. También podían discutir sobre formas de frenar las inseguridades, los delitos y cualquier otro conflicto que ocurra dentro de la tierra mística. En algunas de esas intervenciones, Sam acompañaba a James y Lucinda que formaban parte de la delegación de moderadores.

En eso consistieron los años desde la caída de Emerión hasta la actualidad, y la actividad de James se había tornado más diplomática y discursiva, no había batallas, ni rivales a enfrentar que requirieran de la intervención por la fuerza de parte del joven Watson. Por esa razón había decidido cambiar de aires y enfocarse en sus estudios. Las cosas no podían marchar mejor para él.

- ... Es fantástico y no te das una idea de lo que voy a mejorar en poco tiempo más. - era de lo poco que había escuchado de la conversación con Sam. - ¿Y qué te parece? - le preguntó finalmente su amigo.

- ¿De qué? ¿A qué te refieres? - respondía James a modo de pregunta.

- ¿A caso no escuchaste nada de lo que te conté? - preguntaba Sam indignado.