EPÍLOGO

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UN AÑO DESPUÉS.

Era una noche estupenda, la brisa nocturna era agradable, un poco fría pero nada que no se pudiera soportar con un abrigo, unos calcetines calentitos y una tasa de chocolate caliente. Kelly había salido al jardín a tomar un poco de aire. Después de saber que su condición no había empeorado como creía se permitía salir al exterior en las noches.

Se sentía feliz, pero no del todo, porque lo extrañaba a él, a Marcus, ya se había acostumbrado tanto a su compañía en este último año, que este mes y medio que llevaba sin él la esta volviendo loca.

Tomó asiento en el banco próximo al estante y suspiró, era increíble lo mucho que lo extrañaba.

Se colocó los auriculares y comenzó a escuchar música para así dejar de pensar un poco en él, pero le era imposible.

Su móvil comenzó a sonar, y una sonrisa se dibujó en sus finos labios, definitivamente esta llamada a estas horas de la noche se trababa de él, el lector de voz se lo confirmó.

De forma olímpica oprimió el botón para tomar la llamada, no podía estar más ansiosa por escucharlo.

—Hola amor —saludó ella, los ojos le brillaban y el corazón le latía muy rápido.

—Buenas noches bonita, te he extrañado demasiado hoy, bueno, todos los días lo hago— su voz sonó tierna y reconfortante, aunque contiene un ápice de nostalgia por la distancia que los separa.

—Yo también, muchísimo.

—¿Qué haces? —preguntó el chico.

—Estoy en nuestro banco, escuchando nuestra canción, ¿y tú?

—Estoy en el hospital de Beijing y bueno, también estoy pensado en ti, pero eso no es novedad.

Ella sonrió.

—¿Cuándo vienes amor? Dime que me tienes buenas noticias —habló entusiasmada, más por el hecho de que él pudiera regresar que por el beneficio que conllevaría la buena noticia.

—Pues sí bonita, encontramos al donante, por fin después de todo este tiempo dimos con él aquí en China, si todo sale bien dentro de una semana estaremos de vuelta.

Kelly ahogó un grito de emoción, se mordió el dedo pulgar para contenerse un poco, por fin el vendría, le ha parecido a ambos una eternidad este tiempo separados.

Marcus y Michael partieron a China para encontrar un posible donante de córnea, si todo resultaba como lo habían planeado dentro de muy poco tiempo ella recuperaría la vista, la operación iba a ser costosa, pero eso no era problemas para su familia, sus abuelos paternos tenían el dinero suficiente para ello y le aseguraron que se encargarían de todos los pagos para el tratamiento de su nieta.

—¡OH DIOS MÍO! Por fin vas a estar aquí, por fin voy a poder ver, no puedo estar más feliz.

—Así es Kell, yo tampoco puedo estar más feliz, pero ahora tengo que colgar amor, hablamos después, el donante nos está esperando.

Se hizo un silencio entre ambos, pero no era incómodo, entre ellos nada lo era.

—Te amo bonita.

Era algo a lo que la chica no se acostumbraba a escuchar a pesar de que su novio se lo repetía a cada rato desde hace ya unos meses. Seguía sintiéndose de la misma manera que la primera vez que se lo dijo, igual de emocionada.

—Te amo —respondió Kelly con una sonrisa, luego soltó una risita de felicidad.

—¿De qué te ríes Kell? —curioseó su chico.

—De nada, solo pensaba. Supongo que al final de todo no me quedaré con las ganas de mirar el reflejo de tus ojos.

***

Nota de la autora: Bueno, en fin, ahora si hemos concluido con esta historia.

Dios mío, la amé, espero que ustedes hayan disfrutado de ella al igual que yo.

Solo recuerden, a veces la vida puede ser dura, arrebatarte muchas cosas, pero luego te las devolverá el doble de buenas, te regalará cosas mejores, solo es cuestión de ser pacientes, de conservar la fe y la esperanza. Claro, siempre hay cosas que pierdes en el camino que jamás podrás olvidar, que siempre sentirás su ausencia, pero sí se puede salir de ese hueco que es la depresión, solo hay que créerlo, y pensar que sí se puede, solamente tienes que observar tu reflejo en el espejo, mirar a través de tus ojos y decirte a ti mism@: eres únic@, eres especial, y de esa forma todo lo que te propongas lo vas a conseguir.

Muchas gracias por haber leído esta historia y haber llegado hasta el final.

Los amo.

El Reflejo de tus ojos © [COMPLETADA✓] Borrador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora