Capitulo 5: Vivir o Morir

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"¡no moriré!"

El fuerte grito del joven sonó lleno de vida como un grito de batalla que reiteraba su voluntad por seguir viviendo, el guardou noto que su presa aún estaba viva así que retiro su cara y alzo sus brazos para golpearlo de nuevo.

*shk*

El leve sonido del corte tomo por sorpresa a la bestia quien enseguida chillo "¡u u u!" mientras brincaba.

La daga de Atlas se había clavado por completo en la costilla derecha de la bestia, un golpe inesperado para el monstruo quien no pudo hacer más que rodar molesto antes de usar su mano para sacarse el arma de costado.

El pulmón del guardou estaba perforado y la sangre empezaba a fluir hacia el haciendo que fuera difícil respirar, aun así, esta era una bestia furiosa.

"¡uoooooo!"

Grito furioso la bestia dispuesta a cargar violentamente contra esta estúpida presa que le había hecho daño.

Pero Atlas ya no estaba dispuesto a jugar a la defensiva así que de un salto se puso de pie aun con su cuerpo relleno de una energía extraña que desvanecía por completo todo el dolor de sus heridas.

Su daga ahora estaba muy lejos, pero había otra arma a su alcance, la jabalina con la que hace unos momentos el guardou le había perforado el muslo se encontraba en el suelo a unos metros de él.

Atlas no lo pensó dos veces antes de correr hacia la jabalina, pero el guardou tampoco estaba dispuesto a esperar hacía que corrió furioso hacia Atlas.

En este momento la supervivencia de uno o del otro se limitó a quien alcanzaba a su objetivo primero si Atlas alcanzara la jabalina tendría una probabilidad de ganar, pero si el guardou alcanzaba a Atlas antes de que tomara la jabalina seria su final.

Después de todo, estas bestias tenían músculos muy fuertes como los de un culturista y era imposible que le ganara solo con sus manos.

El muslo de Atlas tenía una herida bastante fea y la sangre brotaba como si fuera una fuente, una persona normal en este estado no podría dar tres pasos antes de caer y no levantarse más, pero Atlas estaba corriendo a toda velocidad como si estuviera totalmente sano.

"¡uooooo!"

Chillo cuando alcanzo a su presa y de un brinco lo derribo y su puso sobre él, todo pintaba como la victoria del guardou, pero por alguna razón la bestia no logro alzar sus brazos para finiquitar esta lucha, aunque lo quiso.

"uhg"

El simio intento chillar, pero solo profirió un pequeño gemido ahogado después de todo la jabalina que había atravesado su cuello no le dejaba chillar a libertad.

Así es Atlas había alcanzado la jabalina justo a tiempo y no sabiendo que más hacer el joven subió la punta de la jabalina y sin que lo esperara el guardou salto hacia él y por sí mismo se ensartó la rústica arma en el cuello.

Atlas estaba muy sorprendido, pero no planeaba quedarse más congelado así que retrajo la jabalina haciendo que la sangre de la bestia fluyera como un rio, el guardou alzo sus manos en un intento de tapar su herida, pero Atlas no planeaba detenerse y siguió apuñalando el cuerpo de la bestia una y otra vez con la jabalina.

Con sus últimas fuerzas la bestia se levantó y arrastro su cuerpo lo más lejos que pudo de Atlas, pero ya era muy tarde, tenía un sin número de heridas y la sangre en su cuerpo era muy escasa al final el guardou cayó muerto en el suelo con la mala suerte de haberse topado con un cazador y no con una presa como pensaba.

"¡fiuuu!"

Suspiro con fuerza Atlas mientras relajaba su cuerpo en el suelo, el calor en su cuerpo se hacía cada vez más intenso y su mente empezaba a nublarse al punto de que no pudo pensar en más que en destrozar el cuerpo de la bestia.

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