━━CHAPTER FOUR

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❝ ᴏꜰ ᴛɪᴍᴇ ᴡᴇʟʟ ꜱᴘᴇɴᴛ ❞

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El sol estaba a solo unas horas de salir en el cielo, pronto comenzaría un nuevo día y con él seguiría el día a día de muchos.

Liu Qingge no fue uno de ellos.

Todavía estaba acostado en la cama como el día anterior, por primera vez para él, Liu Qingge estuvo despierto solo un par de horas, pero aún no se movió de su lugar en la cama. Cuando se despertó, notó que Shen Qingqiu había aflojado su agarre, sus brazos simplemente descansaban sobre él ahora y su cabeza estaba profundamente enterrada dentro de la túnica de Liu Qingge, como si se estuviera escondiendo de cualquier tipo de luz que pudiera despertarlo.

Si quisiera, fácilmente podría apartar los brazos de Shen Qingqiu y levantarse de la cama como había planeado el día anterior, pero aún no lo hizo.

Solo unos minutos más.

Un pensamiento que se repitió una y otra vez desde que se despertó y, sin embargo, no lo hizo.

Pero tiene que hacerlo.

El viaje sería difícil y la región donde se desarrollaría su misión estaba muy lejos. Llevaría bastante tiempo llegar al destino, ya que la bestia que perseguía tenía algunos contratiempos que no podía ignorar fácilmente, un movimiento en falso y todo podía salir terriblemente mal.

Tenía que prepararse, por eso tenía que irse, por eso necesitaba moverse, pero aún así no quería.

Solo unos minutos más.

Sostuvo al otro hombre en sus brazos un poco más fuerte, una de sus manos jugando con un mechón de cabello que se había desviado, su barbilla descansando en la parte superior de la cabeza del otro. Quería quedarse.

Fue solo cuando Liu Qingge escuchó los pasos de los ocupados trabajadores de la posada que iban de un lado a otro que reforzó su determinación una vez más. No tenía más tiempo que perder.

Liu Qingge sostuvo suavemente el brazo que lo rodeaba y lo alejó lentamente, con movimientos sordos, trató de alcanzarlo nuevamente, solo para fallar el objetivo y agarrar un puñado de mantas. Reprimió una risa, pudo sentir a Shen Qingqiu murmurar algo en voz baja a través de su túnica, dejó escapar un suspiro molesto y se quedó quieto de nuevo.

Incluso más lentamente, retrocedió tanto como pudo, desalojando la cara de Shen Qingqiu de su escondite en su pecho. El hombre hizo una mueca visible y trató de ocultar su rostro nuevamente, los brazos una vez más lo alcanzaron, esta vez agarraron una almohada, una vez que la agarraron, la almohada fue jalada hacia el otro hombre, de la misma manera que lo habían hecho. con Liu Qingge. Shen Qingqiu lo sostuvo firmemente, acariciando su superficie como si sintiera que algo era diferente, luego, después de unos momentos, enterró su rostro en él y se quedó quieto nuevamente.

Liu Qingge no sabía si se sentía aliviado o angustiado, tal vez ambos, ahora que la almohada había ocupado su lugar.

Con cuidado, se movió sobre Shen Qingqiu y se levantó de la cama, alejándose unos pasos de ella y yendo a su rutina para ajustar su túnica y apariencia.

Una vez que consideró que había terminado, se volvió para mirar la cama nuevamente, Shen Qingqiu se había dado la vuelta, con la almohada y todo, y ahora se acostó a su otro lado, frente a la habitación en lugar de a la pared. Liu Qingge se acercó a la cama, ajustó las mantas alrededor del otro hombre para mantenerlo caliente, su acción hizo que el otro se agitara, lo alcanzó de nuevo y su mano aterrizó en el lado izquierdo de su rostro, un poco debajo de su ojo.

El Deber de un Maestro | TRADUCCIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora