Capítulo tres.

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01 de Noviembre de 2021.
1:30 AM.

En menos de un octosegundo, su espalda reposa sobre el colchón de la habitación, aquel hombre le besa apasionadamente el cuello, bajando hasta llegar a sus clavículas que ahora se muestran a su merced, pues su acompañante se ha tomando el tiempo de retirar el crop top con delicadeza, y si Taehyung era honesto, no se lo imaginó así, creyó que poniendo un pie en la habitación dejarían relucir sus instintos más primitivos, sin embargo eso no pasó. El hombre fue tranquilo, suave, le cuestionó qué deseaba hacer primero y él claramente le indicó que lo quería sobre su cuerpo, que lo hiciera gemir hasta ambos saciarse, el hombre solo asintió y lo llevó al fondo de la casa donde se hallaba una sola habitación, en la que ahora ambos se encontraban.

Y si su excitación y deseo de tener entre sus piernas a aquel atractivo desconocido no estuviese presente en cada fibra de su ser, se daría cuenta de que la vivienda en la cual se encontraba no contaba con nada más que aquella habitación amueblada. Pues la sala de estar lucía desolada y cubierta con sábanas blancas; y aquel jardín frontal, yacía con sus flores marchitas y arbustos secos como si nadie se tomara el tiempo de rociar agua sobre la tierra, como si nadie estuviese ahí para hacerlo.

Lo funesto de la situación es que si Taehyung se percató de ello, poco le importó, pues se dejó llevar por las caricias que el hombre le brindó en su cadera por vez que lo abrazaba por la espalda, repartiendo besos en su cuello mientras juntos caminaban hacia la habitación en la cual, ahora mismo, se hallaban semidesnudos, embriagados en caricias que les llevaban al límite. Taehyung gime cuando la camisa del hombre desaparece de su torso, y algunos tatuajes esparcidos por sus pectorales y torso hacen aparición, por lo que con lujuria lo vislumbra al saberse el afortunado de poder besar aquella piel tatuada que deseaba marcar con su propia boca.

El hombre se coloca sobre sus rodillas, encuadra sus hombros y observa bajo él la preciosa figura de su acompañante semidesnudo, solo una pequeña y delicada lencería de encaje cubre su pelvis, y su piel erizada a simple vista luce suave, por lo que se dice a sí mismo que pronto lo descubrirá una vez que sus manos marquen esa piel, la sola idea lo vuelve completamente loco y excitado, aunque no quiere lastimarlo, no desea ver ese bello rostro contraerse por el dolor, no desea dañar a su musa eterna.

─ ¿JK? ─ cuestiona de pronto Taehyung vislumbrado y palpando uno de los tatuajes. ─ ¿Qué significa?

Deja de lamer el cuello de Taehyung y le mira profundamente a los ojos, percibe bajo él un ligero temblor de la anatomía contraría y una tenue sonrisa aparece en su rostro, así pues decide que esta vez rompería su propia regla y revelaría su nombre, de todos modos, ese chico no viviría para contarlo...

─ Las iniciales de mi nombre, el cual es Jungkook. ─ se acerca una vez más al cuerpo contrario, posicionando sus brazos a los costados para depositar un suave beso en su frente.

─ Es bonito, aunque... ─ Taehyung lleva sus labios hacía el lóbulo para tomarlo entre estos y succionar un poco para finalmente concluir con voz seductora... ─ ... Sonaría mejor si te llamo así entre gemidos, ¿no lo crees?

Jungkook se remoja los labios con complicidad, su Taehyung seguía siendo el mismo de siempre, se sintió orgulloso.

─ Me encantaría escucharlos, tal vez me fascine.

─ Estoy seguro de que te gustará, lo haré bien.

Taehyung se acerca al rostro de Jungkook para unir sus labios, pues en lo que lleva de la noche, ambos no habían compartido un ósculo, solo toques y besos en partes erógenas de la piel, y deseaba probar el sabor de ellos, así como lamer la argolla que adorna su labio inferior. Sin embargo, cuando sus labios rozaron, Jungkook tomó distancia dejando a Taehyung confundido.

Devilish | kvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora