"Amistad y paseo en el Tren"

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Astigmatismo – hablo un experto en visión óptica mientras colocaba pequeños lentes en unos anteojos que llevaba puesto el pelinaranja mientras veía hacia una pared en el cual había letras y números de distintos tamaños. – no está bien que andes así sin por lo menos tener unas gafas de descanso, forzarás más tu vista – menciono quitándole los anteojos al pequeño quien lo escuchaba atentamente - hablare con tu mamá bien?, no tienes que preocuparte solo llevarás puesto gafas de ahora en adelante hasta que dejes de necesitarlo, pero para eso no debes forzar tu vista ¿bien? – sugirió acompañando al pequeño hacia la puerta de salida este solo permanecía en silencio asintiendo a las palabras que le decían -

Había ido solo... ahora paseaba por la plaza antes de tomar un bus y regresar a su casa, antes de despedirse el joven que lo acababa de atender le sugirió que hasta no tener las gafas no realice actividades en su visión que puedan dificultar su vista misma y esto incluía que ya no debía andar en bicicleta hasta ese momento.

¿Ah? enano eres tú? – una voz apagada y neutra se escuchó a espaldas del pequeño quien giro a su dirección topándose con la figura del rubio alto – valla que casualidad, estuve reunido hace un momento con Yamaguchi – menciono con una sonrisa - ¿vienes de algún lugar?

Mhm ya veo Tsukishima podría ... podrías hacerme un favor – pidió sin contestar las preguntas –

Depende de que se trate – respondió el contrario – si me beneficia en algo lo hare y quedara entre nosotros – guiño un ojo molestando, al contrario, Hinata por otro lado inflo de manera tierna sus mejillas –

So-solo quería saber si me podrías dar un abrazo – murmuro bajando su mirada al suelo tratando de encontrar algo interesante –

El cuerpo de Hinata se vio rodeado de calidez y delicadeza los largos brazos del rubio rodeaban sus caderas abrazándolo con fuerza, las manos del pequeño quedaron aprisionadas contra el pecho de Tsukishima.

Gra-gracias – hablo Hinata correspondiendo al abrazo de igual forma – lamento hacerte pasar por esto – se disculpó – pero realmente lo necesitaba

Mhm supongo que está bien, pensé que me pedirías algo estúpido como un helado o que te ayude con colocaciones – bromeo – no debes preocuparte estaré aquí para ti – menciono cerca al oído de este –

Te-tengo astigmatismo – comento repentinamente el pequeño acurrucándose más en el pecho del contrario – debo usar lentes como tu – menciono con voz afligida - ¿Cómo se siente usarlos? ¿te estorban en la cancha? – pregunto con temor - ¿s-son frágiles?

Tsukishima se sobresaltó al escuchar lo anterior por Hinata, negó levemente ante las preguntas del pequeño jugador.

Ciertamente son algo molestos pero necesarios – respondió separándose del abrazo – lo demás depende de ti, del trato que le des – añadió con una sonrisa -

Lo dices porque llevas años usándolos – se quejó Hinata con un puchero – ¿Qué pasa si se me caen?

Te ayudare, estaré junto a ti – respondió casi de inmediato – di-digo si quieres, si no puedes pedirle ayuda a alguien más no me importa, pero nadie más que yo a usado lentes por tanto tiempo – advirtió esquivando la mirada –

a-acepto tu ayuda, gracias – respondió con un leve sonrojo en las mejillas de este – tam-tam bien.. – agrego para después negar y quedarse callado –

también qué? – pregunto el alto volviendo a poner la atención en el – habla enano sucede algo más?

Quería saber si podías... bueno no creo que sea conveniente – hablo rápidamente – es decir seria molesto para ti, además seguro acompañas a Yamaguchi – agrego, confundiendo al mayor –

¿Qué tanto hablas? no te entiendo se claro – pidió cruzándose de brazos el rubio –

Quería saber si podrías recogerme y acompañarme para ir a clases y a mi casa – respondió rápidamente cerrando los ojos como impulso al sentir vergüenza – lo siento ¿fue demasiado no?

Ambos jóvenes se encontraban subiendo una colina iban escuchando música gracias a los audífonos que llevaba el rubio si bien antes, Tsukishima escuchaba música desde los audífonos blancos los cuales solo le permitían oír música a él solo ahora llevaba los de tapones y que fácilmente podían escuchar uno cada uno.

Hinata no pensó que la petición funcionaria de hecho, no pensó en ampliar y mejorar la relación que tenía con Tsukishima, anteriormente este solo le hacía bromas y le hablaba sarcásticamente ahora sus bromas y molestias por parte de este habían disminuido gradualmente, si bien no fue un cambio grotesco era muy evidente incluso para los amigos de estos que empezaron a notar su extraña cercanía y el cambio de Tsukishima.

Viernes por la mañana Hinata debía ir a recoger las pequeñas gafas que él mismo se había elegido gracias a los gustos de su ahora amigo Tsuki, él iba junto con el estaban parados en la estación del tren esperando a que el tren apareciera esta era la primera vez que Hinata tomaba uno, ya que la anterior vez fue en bus, pero demoraba mucho más que el tren, ahora él tenía un permiso para irse y llegar a la preparatoria en una hora determinada por lo que no podían darse el lujo de ir en bus.

¡Oh! ¡Mira Tsukishima! ¡Allí viene!! – exclamo el pequeño levantándose de un salto del asiente donde ambos jóvenes se encontraban sentados – es tan largo y enorme!! – expreso con emoción viendo como este se estacionaba frente a ellos –

Quieres bajarle el volumen a tu voz – murmuro el rubio mirando al sonriente Hinata – disimula tu emoción o la gente pensará que estamos loc.. – apenas las puertas del tren abrieron el pequeño ingreso seguido del alto quien solo lo observaba con sus ojos entrecerrados colocándose a un lado de la ventana – más te vale no decir nada estúpido o te bajare en la mitad de los rieles – advirtió –

¡Está bien – respondió disculpándose con una sonrisa avergonzada – ah! mira la vista por la ventana también es genial – comento girando su cuerpo en dirección a la ventana mirando el sol y las casa que pasaban –

Mhm si lo es – respondió casi en susurro Tsukishima quien iba a un lado de este contemplando su rostro –

Los ojos de Hinata parecían cobrar vida nuevamente al ver como su rostro alegre se reflejaba en la ventana del tren, tsukishima al verlo sonrió satisfactoriamente ante la expresión alegre y vivaz de siempre del pequeño.

[ Desearía nunca poder llegar a esa parada] – pensó internamente el rubio conteniendo su mano que moría por acariciar las mejillas del muchacho contrario,

[ me alegra ser amigo de Tsuki, pensaba que no le caía bien es un alivio, él es realmente muy bueno conmigo, me asegurare de portarme bien con Tsuki y definitivamente no lo decepcionare] – pensaba Hinata contemplando el paisaje –

La mayor parte del recorrido en tren Hinata se la paso comentando de lo rápido que iba el tren y la cantidad de personas que en ese momento se encontraban casi aplastándolos, en una parada la mayor parte de personas que iba seguramente de camino al trabajo se bajaron dejando casi despejada del todo el espacio donde se encontraban ambos jóvenes.

Tsukishima giro su mirada tratando de visualizar algún sitio donde ambos pudieran sentarse, aunque ciertamente la parada en la que bajarían ya estaba cerca, sus ojos se detuvieron en un pelinegro quien sostenía por la cintura a una joven de cabellos castaño oscuro.

¿Sucede algo tsuki? – pregunto el bajito tratando de ver a la misma dirección en la que veía el rubio, este de inmediato cubrió la vista con su cuerpo –

Mira de aquí también se puede ver algo del centro comercial – menciono mirando la ventana – escuche que en esos lugares venden buenos balones y ropas deportivas – sonrió leve al distraer exitosamente a Shoyo quien había empezado a realizarle en la mente del rubio se preguntó "¿Ese bastardo se escapó de clases con una chica?, mirando de reojo a la pareja vio como Kageyama beso de improviso a la joven quien con un gran sonrojo correspondió –Tsk maldición ..

" Lo Planeado " [ TsukiHina]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora