OBEDIENTE.

Capitulo 1: SIN INTRODUCCIÓN.

Narra Rodrigo:

Básicamente ya me conocen, ya leyeron las historias de mis queridos amigos, y aunque yo me integre después también tengo una historia de amor para contar, aunque mas bien parece algo cómico, porque suelo meter la pata.

Erik y Derek siempre estan acaramelados en todos lados, dándose besos y esas cosas en cada oportunidad que tienen, a pesar de que ya había pasado un año de que nos confesaron que salían juntos.

Dante y minkus decidieron tomar su relación más enserio, por lo que minkus renunció al trabajo con su suegra y decidió aprender gastronomía en un restaurante, si algo extraño pues puede ser mantenido por Dante, el amor suele hacer cambios raros en la gente.

Y yo, seguía con mi amor no correspondido, y sabía muy bien que no era correspondido.

Porque veía a Patrick mirar a Lulu, la chica de teatro que tenía un magnífico cabello rizado.

Suspiré, parecía un mal chiste, Patrick miraba con ternura a Lulu quien se encontraba a mi lado, mientras yo lo veía a él, y si, Era de esperarce Lulu quería mi atención, pero solo Patrick la tenía desde que lo conozco. Conocimos a Lulú en una colecta de ropa para personas sin hogar, y desde ahí nos hicimos amigos.

- Rodrigo - me codeo - te estoy hablando - se quejo Lulu mirándome con una sonrisa.

- perdón, la clase de hoy me dejó agitado - dije mirándola a la cara con una sonrisa apenada.

- Es de esperarse, la señora Tina habla mas de como nos comportamos que de la clase en sí - dijo en casi un murmuró patrick mientras cerraba el libro que jamás leyó por mirar a Lulu.

- así es, sólo habla de lo magnífico que es erik - me queje estirandome y fulminando fugazmente a Erik quien estaba del otro lado de la cafetería mientras leía un libro, Dante estaba a su lado quejándose de algo como siempre.

- Bueno, y cambiando de tema ¿me ayudaras con la obra? - pregunto lulú con cara de cachorra abandonada.

- nunca e echo algo como eso - confesé rascando mi nuca, aparentemente según mi madre y Félix, me había puesto más apuesto el verano pasado, mis pectorales se incharon al entrar a natación, y solo lo hice porque mis amigos ya estaban ocupados cogiendose unos a otros.

Posiblemente yo era el único virgen que quedaba en toda la escuela, y tal vez Patrick, o eso sería genial.

- Deberías intentarlo, hay muchas chicas bonitas - me animo Patrick con una sonrisa tierna.
Suspiré mentalmente embobado por su inocencia, solamente me gustas tu pequeñín.

- Tal vez si te ayude, pero no por las chicas, necesito un favor tuyo también - confesé mordiendo mi labio juguetón.

- ¿otra vez? Deberías simplemente decirles que no quiero - se quejo ella tomando su sandwich - pero si participas lo haré - dijo entredientes.

Ella era popular en natación, era alguien muy atractiva y amigable, además de no ser porque fue a buscarme en el club nadie de ahí la hubiera conocido.

Ahora gracias a ella puedo tener días libres.

- de acuerdo. - sonreí triunfador.

- Rodrígo vámonos - la voz de erick me hizo levantar la vista.

- Me tengo que ir, nos vemos mañana chicos - me despedí levantándome, al mismo tiempo Erick y dante se levantaron de sus lugares.

- vayamos a mi casa, mamá está en crisis porque Minkus se fue - anunció Dante sin ganas mientras caminabamos a la salida de la facultad.

- Tu mamá debió ofrecerle otro empleo - confesó erick.

- Yo creo que basta con que se case conmigo - dijo Dante cruzandoce de brazos con un puchero, seguía siendo el mismo de siempre.

- Sigues pensando como un niño - dijo erick sin expresión en su rostro, estábamos en varias clases juntos, debido a que nuestras carreras estaban cursando los mismos temas, pero dante lo veía solo en clases de inglés.

- Deberías cortar esa melena, pareces idiota - se quejo erik mirando mal a Dante.

- No, solo Minkus puede cortarlo - se negó divertido.

Me sentía un poco fuera de lugar, como si hablar de eso no me correspondiera.

- deberías Decirle lo que sientes - dijo Erik al verme cabizbajo.

- No creo que sea correcto - sonreí sin ganas rascando mi nuca - evidentemente a él le gusta alguien más - confesé volviendo a bajar la mirada.

- rodrigo, ninguno de nosotros fue correspondido al principio en nuestra relación, fue porque luchamos por ello que conseguimos el amor - confeso, mire a dante quien estaba rojo de pies a cabeza, pero el me miraba de reojo firme en lo que había dicho.

- tal vez debería pensar en ello - murmire pensativo, si eso era verdad, si estuviera la posibilidad de que el me correspondíera, podría correr el riesgo.

Pero ¿que hacía si le daba repulsión?

Yo no sabría que hacer si el no quiere volver a verme, debería actuar de forma cautelosa con el.

El chófer de Dante nos recogió en la parte trasera como le pide Dante, porque no le gusta llamar la atención.

- Sienro que no me corresponderá - confesé rompiendo el silencio dentro del coche.

- ¿y? Yo creo que es aún peor que no se lo digas y lo mires de la forma que lo haces - dijo erik, la verdad eso sonaba aun más repulsivo..

- Lo que erik trata de decir es, que si tu estuvieras en su situación, y si alguien está enamorado de ti y haces o dices algo que pudiera herirlo, te gustaría saberlo para evitar eso, aunque tuvieras que ser sincero con el - explico dante más calmado viéndome a los ojos - aunque no me hagas caso jaja, rechace muchas veces a Minkus.

¿Que clase de relación tenían? Siempre pensé que Minkus era un pedo filo.

Al hablar con ellos me sentía más motivado, y probablemente podría empezar el plan para enamorar a Patrick.

- Minkus me pidió que les dijera que mañana vendrá por nosotros, quiere confesar algo - anunció dante algo pensativo - ¿creen que sea padre? - preguntó el algo preocupado.

- No lo creo, tal vez tenga que ver con que tu mamá lo contratará - respondió erik, convincente.

- Tal vez - dijo pensativo.

- de todas maneras mañana lo sabremos, no lo sobrepienses - le dije animandolo, aunque a decir verdad, Félix cada vez hacia algo más sorprendente.