Razón #25
Cuando estás enfadada conmigo, me convierto en un depresivo llorón que no puede parar de escuchar esa mierda de música pop.Mi habitación es un desastre de nuevo. Fui a la fiesta, volví a casa y me tiré en la cama hasta que mamá y papá regresaron. Es increíble cómo en el transcurso de veinticuatro horas, mi cuarto se encuentra repleto de ropa sucia y cajas de pizza.
Y no me importa una mierda.
Durante toda la fiesta, se lo quise contar a Quynn. Quise ser sincero con ella.
Estoy con ____. Lamento si te di una idea equivocada. Pero las palabras nunca salieron. Porque no estoy con ____. Ya no. ¿Lo estuve alguna vez?
Por lo que bebí hasta quedar casi inconsciente, y me pasé todo el día comiendo pizza y pan de ajo, escuchando repetidamente a Katy Perry.
—Nunca te voy a dejar solo de nuevo—Mamá entra y abre la ventana. Gimo y lanzo una almohada sobre mi cabeza—. ¿Has salido de esta habitación hoy?
—Sólo para hacer pis—mascullo contra el edredón. Ellos tuvieron que tomar un taxi para llegar a casa porque yo no levanté el culo de la cama al momento de recogerlos como prometí. Iba a hacer que ____ fuera conmigo, pero eso era antes de que las cosas se fueran a la mierda.
La almohada es quitada de mi cabeza.
—Oh, oh—Mamá va a sentarse en mi cama, pero cambia de opinión cuando ve un trozo de pizza pegado a las sábanas—. Em…—Traga cualquier cosa que ha subido por su garganta—. ¿Qué ha pasado, cariño?
No voy a hablar de esto con mi madre. Así que le digo—: Nada—Y me giro de regreso al edredón.
—No te atrevas a mentirme. Te tiraría un tomate en la cara, pero ahora mismo dudo que eso sirva para algo.
Tiene razón. Podría vomitar, pero vomité toda la mañana, por lo que no me importa una mierda.
—¿Pasó algo con Gabe?
Sacudo la cabeza, pero duele, así que me detengo.
—¿Quynn?
—Ma, no quiero hablar de ello.
—Así que sí se trata de Quynn.
Intento presionar aún más mi cara contra la cama. Pero no está logrando nada, sin embargo. Sólo hace que me duela la cabeza. Aunque no tanto como lo que está experimentando mi pecho.
—Volverá a ti. Siempre le has gustado.
—No es eso, mamá. Por favor, sólo déjame solo.
—Sabes que no lo haré.
¿Por qué es tan difícil? ¿Por qué es tan difícil hablar de ____ en un modo “más que sólo amigos”?
Conozco la razón. Sólo que no quiero admitírmelo a mí mismo. Porque me haría un imbécil. Un imbécil hipócrita.
No quiero encontrarme con la mirada de la gente cuando les diga que estoy enamorado de la… DAF.
Pero ésta es mamá. Ella seguirá presionando y presionando hasta que le haya soltado todo.
—No es Quynn—Me doy la vuelta para quedar hablándole al techo—. Es ____.
—¡Oh!
La sorpresa cada vez que digo el nombre de ____ está dejando de ser novedad. Y no la voy a mirar. No quiero ver su expresión.
—Vamos, mamá. Tienes que haberte dado cuenta que me gustaba.
—En realidad, cariño, no es así. Nunca has hablado de ella. Sólo la mencionas como una amiga, una compañera de tareas. Ni siquiera la he conocido oficialmente, todavía. Sólo la vi a la distancia, y no parecía tu tipo de chica.
Mi frente se arruga, y la miro.
—¿Qué quieres decir con eso?—Estoy siendo irritable. Esto es por lo que no quería decir nada.
Ella se encoje de hombros y mueve su mano en el aire.
—Ah, nada. Sólo la primera impresión.
Después de observarla por unos segundos, tratando de ver si me está mintiendo, me doy por vencido y pongo la cabeza de nuevo sobre la almohada
—Es asombrosa. Ha pasado por bastante mierda, pero sigue logrando ser… increíble. Es divertida, graciosa y nunca es incómodo estar con ella. Toda la mierda con Gabe, con mis notas, con otras cosas que están pasando y apestan… simplemente desaparecen. Soy mejor persona cuando estoy con ella. Alguien más tranquilo.
La habitación se queda en silencio, excepto por la respiración de mamá y mi intento de no derramar más lágrimas.
—Lo arruiné. Tenía demasiado miedo de decirle a Quynn sobre ella. Demasiado miedo de decirle a cualquiera. No entiendo por qué—Me siento, apoyando los codos sobre las piernas—. La amo, mamá. ¿Cómo arreglo esto?
Ella me da una gran sonrisa. Una de esas sonrisas, del tipo que dicen “chico tonto, la respuesta está frente a tus narices”. Una sonrisa de madre.
—Eso es sencillo, cariño.
—¿Lo es?
Asiente.
—Ya has hecho lo que ella necesita de ti.
—¿Lo he hecho?
—Me has dicho a mí sobre ella—Mamá viene a un lado de mi cama y me acaricia el brazo. No la aparto—. Todo lo que quiere es saber que estás metido en esto un cien por ciento antes de dejarse llevar completamente. Las chicas son muy protectoras con sus corazones. Quieren estar seguras de que su chico no se sentirá avergonzado de mostrarlas, de besarlas en público, y por supuesto, necesita saber que has superado cualquier... fugo viejo.
Pellizca mi codo. Lo retiro y la miro mal.
—Si no puedes decirle a Quynn sobre ____, entonces quizás no la quieras tanto como piensas.
Auch, mamá. Pero, mierda, tiene razón.
Asiento, arranco el trozo de pizza pegado a mis sábanas y lo tiro a la caja vacía del suelo. Mamá hace una mueca antes de agarrar la basura y marcharse hacia la salida.
—Oh, y, ¿cariño?
—¿Sí?
—No te tenía por fan de Katy Perry—Se escabulle por la puerta cuando mi almohada va volando por la habitación hacia ella.__________________________________________________________________________
este capitulo va dedicado a @iioviis que tierna que sos *le apretaba los cachetes* ☺
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Divertida Amiga Gorda (Harry styles y Tu) Terminada
RomanceEs una historia de facebook que me encantó, No es de mi autoría 💕