𝐀𝐡𝐞𝐠𝐚𝐨 𝐁𝐨𝐲♡ || [𝐂𝐡𝐚𝐧𝐁𝐚𝐞𝐤]

Capítulo Tres

Las suaves y armoniosas risas se esparcían por todo el departamento de los Kim. Siendo ambos menores los creadores de éstas melodías –para los mayores, eso eran–, distrayendo de vez en cuando a Chanyeol y Jongdae en su tarea de conversar.

Si hablamos concretamente de Kim Jongdae, estaba sosteniendo a Monggu contra su pecho, mientras hacia el intento de asimilar las palabras antes pronunciadas por Chanyeol. Se encontraba entre asombrado e intrigado hasta los huesos.

—¿Me dices que Baekhyun sabe hacer los gestos morbosos que hacen las protagonistas de los animes que ven Min y tú? —pregunta, pronunciando todo a alta velocidad. En un intento de grabarse la información en su cerebro.

Chanyeol entró en pánico al imaginarse que su novio le haya escuchado, ya que, el volumen que empleó Kim no fué muy sutil.

—Por favor baja la voz. —Pide Chanyeol, denotando sus ganas de acariciar con violencia la boca de Jongdae con la suela de sus botas.

Kim se encoge de hombros, mientras pronuncia un bajito “ni modo” y suelta al perro, que ha comenzado a morder su brazo por lo hastiante que se vuelve su dueño en ciertas ocasiones... Humano tonto.

—Volviendo al tema. No tengo idea de que decírte, porque realmente nunca me ha ocurrido, pero ¿tan excitante es, que te pones así? —Jongdae cuestiona inocentemente, sin ser conciente de que ha despertado los recuerdos de Chan. Y la imágen se muestra nítida en su mente.

Chanyeol estaba mal. Baekhyun lo tenía mal.

Él y su rostro precioso, muy tierno pero, a la vez muy caliente. Tal y como cuando perdía las inhibiciones, demostrando cuan seductor puede llegar a ser.

Chanyeol se declara devoto a Byun Baekhyun.

Se siente muy afortunado de tenerlo, y sobretodo compartir con él en la intimidad. Le encanta sentir que su Baek no se sentía tímido a la hora de pedir, estando en la cama.

—Ch-Chan, A-Ahm ahí~.

—Chan, por favor... Yeol, Yeol... Chanyeol.

—¿Chanyeol?... ¡Yeollie! —el tacto de Baekhyun en su brazo lo trajo a la realidad.

Se sintió culpable al ver la preocupación en los ojos de su bebé, cuando él, segundos antes, estaba fantaseando despierto. Y para terminar; se había puesto duro.

Jongdae ya había desaparecido del sofá de en frente, ahora Baek estaba cerca de sí, con su rostro ahora más sucio de harina y leche condensada. Mientras sus ojos de cachorro lo miraban con anhelo a una respuesta, él se vió entrando en un estado de admiración total.

—¿Estás bien? —Pronunció Byun un poco preocupado por su novio.

Chanyeol asintió un par de veces, y con un beso en su frente pronunció : —Vamos a casa, príncipe. 

[🦋]

Ya había pasado una hora desde que llegaron a su casa, y siendo su rutina habitual de las diez y nueve horas, procedieron a acostarse en el sofá a ver televisión.

O simular verla de vez en cuando, porque ellos no pueden mantener sus labios lejos del otro.

—No me beses el cuello que me da cosquillas. —Demanda Baekhyun, empleando un tono "amenazador" contra Yeol.

Park comenzó a revolcarse como gusano, porque Baekhyun era demasiado tierno para su bien.

Pero, por la mente de Baekhyun rondaba una pregunta que no sabía cómo expresar a su novio, y él realmente tenía curiosidad de saber.

Por lo que comenzó tanteando terreno.

—Yeollie, ¿puedo preguntar algo?

—Ya lo hiciste, príncipe —sonríe, mientras hace que Baekhyun trepe, y se repose en su regazo.

Inmediatamente el menor envuelve sus brazos en su cuello.

Baekhyun apoya su cabeza en el pecho de Yeol. —Deja de reírte, y préstame atención —musitó, relajado por el constante tacto de Chan en sus cabellos negros.

—Está bien Baekki, sabes que puedes preguntar y hacer lo que quieras conmigo.

Byun se sonroja por las palabras dichas, y como consecuencia, esconde aún más su rostro en el pecho de Chanyeol, casi ahogándose con el olor de su colonia masculina.

—S-Sabes yo leí algo, ¡pero no era mi intención hacerlo! Solo fue un accidente. —Comienza posando su rostro a centímetros del de Chan, quien por lo pronunciado tenía una mueca extrañada llena de curiosidad. —Estaba usando tu laptop para ver videos de cachorritos jugando con gatitos, y llegó un correo de MinMin preguntándote si tenías... ¿Cómo era que se llamaba? Eh, creo que comenzaba por h.

Baekhyun se da unos momentos para recordar el nombre, y cuando lo hace su rostro se ilumina con emoción, por el simple hecho de que logró recordar. Y con esa sola palabra, Chanyeol siente una corriente que recorre su cuerpo.

—¡Hentai! —menciona emocionado por haberlo recordado.

El maldito sentimiento de querer corromper la inocencia que albergaba su novio, lo agolpeo aún más fuerte que nunca.

De esta no te salvas, Baekhyun.

—Hmmm, ¿Quieres saber qué es? —repentinamente, la polla semidura de Chanyeol despertó anhelante de afecto.

Baek asiente repetidas veces, una sonrisa de lo más pura plasmada en su rostro de delicadas facciones.

—¿Y si mejor te lo enseñó? —pronunció hacia Baekhyun emocionado.

–🦋.