Mala influencia [Bakudeku/Katsudeku]

Brillantes

Simplemente un par de meses habían pasado desde que el pecoso había iniciado clases y dejar de llamar a Katsuki

Claro que, ahora era Katsuki quien llamaba a Izuku preguntándole  con insultos incluidos como estuvo su día, y, que tal estaba

Y ahora, se encontraba en el parque, esperando a Katsuki quien le dijo que quería verlo y decirle algo importante, Izuku sabía que no debía ilusionarse, claro que le gustaba ese chico, pero no sabía si a él siquiera le gustaban los chicos, vio llegar a Katsuki a lo lejos y sonrió mientras lo saludaba con la mano

No se habían visto en meses más que por videollamadas por lo que el pecoso estaba nervioso, en efecto, Katsuki era más atractivo en persona.

Y Katsuki pues... digamos que en este momento le tenía más miedo al abandono del pecoso que a un arma en su cabeza, ser cursi nunca fue lo suyo, pero joder, lo intentaría por él.

— ¿De que querías hablarme Kacchan?— Izuku trataba de sonar natural pero su voz temblorosa delataba su nerviosismo mientras comía el helado que el cenizo le compró

Casi se pelea con una señora por el último helado que parecía arcoíris y tenía una pequeña decoración del héroe ficticio All Might, no tenía ni puta idea del nombre del puto helado pero se veía tan malditamente colorido que le recordó a su pecoso, porque así mismo fue su mundo desde que lo conoció, lleno de colores, además que tenía un toque infantil y el héroe que tanto le gustaba al chico, ganó la pelea al igual que una hermosa sonrisa del peliverde al ver tan lindo detalle.

— Pues... — Katsuki se puso maldecir su nerviosismo en sus adentros, por dios era un puto mafioso que trataba con personas peligrosas cada puto segundo e iba a dejar que un chico pecoso peliverde venga a asustarlo con sus sentimientos? la respuesta era sí — Agh, puta madre...

— Kacchan — regaño el pecoso porque habían niños cerca, aunque le parecía extraño ver como las personas parecían verlos con miedo

El cenizo suspiró, tenía que hacerlo

— verás Izuku— el chico mencionado se puso más nervioso, ya se había acostumbrado a ser llamado Deku— tú... pu- — detuvo su insulto, no quería que el pecosos se enojara aunque se viera malditamente hermoso enojado— recorcholis — minimizo su insulto en uno mucho más ligero pero a su vez algo bobo pensó, pero agradeció por eso al escuchar la risa de su acompañante

— puedes decirme lo que sea Kacchan — dijo con una sonrisa

— No quiero ponerte en peligro... ni que te alejes de mi— dijo lo más honesto que pudo para luego sentir como el calor subía hasta sus mejillas lo mismo que le pasaba a Izuku

— Kacchan yo... nunca me alejaría de ti

esa frase, esa maldita frase hizo que el cenizo tuviera más confianza y comenzara a narrarle al pecoso lo peligroso que podía llegar a ser y como era su vida diaria como lider de una organización criminal, Izuku quedó en shock 

— No quiero que te alejes por esto... mierda, me enamoré okey?, me enamoré de ti, Izuku, entendería que ya no quieras hablarme ni acercarte a mi, entendería si justo ahora sales corriendo y jamás te vuelva a ver, pero quería decírtelo, te amo, por la mierda enserio que te amo— Katsuki esperaba que el pecoso salga corriendo o incluso que lo abofetee pero para su sorpresa, nada de eso pasó, por segunda vez escucho la hermosa risa del chico peliverde

Lo miro incrédulo, ¿acaso creía que era una broma?

— Kacchan — Habló después de haber reído— no creas que no me tomó por sorpresa... no sabía nada de eso, ahora entiendo por qué nos veían con miedo... — rió ahora con nerviosismo— pero... agradezco no haberlo sabido, no digo que no te hubiera hablado si lo supiera pero supongo que eso te hubiera hecho actuar distinto conmigo, no es así? — el silencio de Katsuki fue una afirmación para Izuku ya que en definitiva las cosas hubieran sido muy distintas— pero supongo que el hecho de no saberlo hizo que conociera al verdadero Kacchan, porque sé que Kacchan no es malo, tiene un gran corazón y me protegerá, así que puedo estar tranquilo junto a Kacchan, seas lo que seas, no te tengo miedo, conocí al verdadero tú y no me arrepiento de nada, quiero estar contigo, quiero seguir conociéndote, porque también me enamoré, me enamoré de Kacchan

El pecoso concluyó lo que decía al mismo tiempo que le sonreía al cenizo mientras tenía un fuerte sonrojo, los dos estaban sonrojados y con el corazón a mil, Katsuki no negó que tenía razón, nunca le haría daño al pecoso y ah estado actuando como es realmente junto a él, con delicadeza como si tuviera miedo de romperlo, lo tomó de las mejillas y le sonrió dulcemente

— mierda, como te amo, maldito Deku— dijo para luego unir sus labios a los del chico, era algo tarde por lo que nadie estaba cerca, disfruto saborear la boca del contrario mientras en los momentos para tomar aire, le decía que lo amaba, claro que de vez en cuando, con alguna grosería de por medio al mismo tiempo que se perdía en esos ojos, esos hermosos ojos brillantes que lo veían a él con tanto amor, solamente a él.

Continuará