.04.| El príncipe Kim Taehyung está extraño.

12 2 0
                                    

-¡Buenos y no tan buenos días para todo ser que respire dentro del palacio! Espero hayan amanecido bien, ¿ya comieron? En realidad no me importa pero creo que es un acto amable.—Se hace escuchar en voz alta en al menos una parte de todo el castillo. Algo que sinceramente daba miedo. Y no por el hecho de que se haya levantado de buen humor y haya saludado, ese en realidad era el problema, Taehyung en sus 17 años de vida jamás había dado alguna señal de bienvenida, porque todos los días se la mantenía callado o quejándose. Así que literalmente pensaron que algo lo estaba poseyendo.—Hey, ¿pero ni siquiera me saludan de vuelta? No los vuelvo a saludar en mi vida. En fin, ¿Cuál es mi desayuno el día de hoy?—Sigue diciendo en un tono mucho más alegre de lo normal.

Era extraño definitivamente.

Desde que Taehyung se despertó se comportaba más amable y simpático de lo acostumbrado. Claramente todos supusieron que algo le pasaba y con más razón les dio motivos para mantenerlo vigilado. No se sabía que era lo que tenía preparado aquel joven, el castaño siempre resultaba ser una caja de sorpresas. Con el pasar de la mañana, el príncipe no hacía algo más que mirar por la ventana y estar en su teléfono sin hacer ruido alguno. Ni siquiera se tomó una ducha. Conociendo lo escrupuloso y organizado que es con sus cosas, decidieron llamar a la reina ya que la actitud de Taehyung no era normal.

Y claro que no era normal, el chico no tendría nunca dentro de sus pensamientos tratar bien a aquellas personas que le tornaron amarga toda su infancia. Era de cierta manera un poco rencoroso en ese aspecto, pero de clara forma se entendía por todos esos tipos de traumas. Inclusive por más que un miembro del palacio le simpatizara en lo más mínimo, no daría demostración afectiva; en su momento le quitaron personas demasiado importantes y no quería encariñarse de nuevo. Sin embargo, contaba con una buena actuación y eso le favorecía en varias situaciones. Pero en este caso fue demasiado obvio con su intento de ella.

-Taehyung, me han comunicado que te han notado raro desde que despertaste. ¿Podrías contarme la causa de tu peculiar felicidad el día de hoy?—Aparece la reina en la habitación del moreno con intriga.

-¿De qué hablas? Solo amanecí contento, es todo.—Dice confiado.

-Taehyung, tú nunca estás feliz. 

-Desperté con una nueva vibra, estoy renovado. 

-Una persona no cambia de parecer de la noche a la mañana. 

-¡Deja de contradecir todo lo que digo! 

-Te conozco lo suficiente como para saber que te pasa algo.

-No, no me conoces, solo te importa lo que yo le contribuya a tu propio bienestar, cállate.—Aporta cambiando el semblante totalmente al recuerdo del poco interés de su madre con él.

-Lo que sea, si no me quieres decir entonces no me digas.—Rueda los ojos con incredulidad.—Hijo, hace aproximadamente unas tres semanas te hemos ordenado que no puedes salir de tu cuarto. Pienso que al menos reflexionaste sobre tu comportamiento.

Con la sola mención de la palabra "hijo" dejó de tomarle relevancia a lo que fuera que iba a decir. Detesta que le diga así, por lo general lo llama por ese apodo cuando va a intentar convencerlo sobre algo de lo que seguramente no iba a estar de acuerdo.

-Ve al grano.—Ordena con una clara falta de interés.

-Bien. No voy a posponer más tu puesto en el trono. 

Lo sabía. 

-Ok.

-... ¿"Ok"? ¿Sólo vas a decir eso?—Pregunta algo sorprendida por su respuesta.

-¿Qué más quieres que diga? De todas formas, me vas a decir algo como "is ti dibir sir riy" o "ni mi impirti li qui piincis, iguil ilguin dii li ibis i sir." ¿No? 

Sweet Night | KookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora