Lies of Love | Wangxian Omegaverse

Capitulo 5

Dos años después...

-Me alegra que estes aquí... conmigo. – Dos años, dos años han pasado desde que llegue a este pueblo, dos años mintiéndole a mi alfa. Lan Zhan se ha convertido en la razón para poder salir de mi casa, de escapar de una vez por todas de este hombre, pero el no lo sabe, todavía no se como es que he podido guardar el secreto todo este tiempo, pero me alegra haberlo hecho, después de todo lan zhan no se merece estar involucrado en mis problemas.

-Mmm, a mí también – digo en un susurro mientras juego con los dedos de sus manos, en lo que él me abraza por la cintura, estamos recostados en un árbol del parque, en lo que llevamos de novios cada que podemos venimos a este lugar, es un lugar seguro para los dos... para mí, estar en sus brazos es seguridad, es calma, es amor.... Es vida.

-Amor, se esta haciendo tarde, ¿quieres que te lleve a tu casa? – adoro cuando me llama de esa forma.

-Sabes que no. – respondo suavemente, hemos tenido esta conversación un centenar de veces, nunca le he dejado acompañarme, no me puedo arriesgar a que mi padre lo vea y me separe de él.

-Pero...

-Nada – lo interrumpo dándome la vuelta para dejar un suave beso en sus labios. -Estaré bien no tienes de que preocuparte. -Mentirle a lan Zhan era una de las cosas que más se me dificultaba hacer, sin mencionar que duele mas que una herida infectada con maquillaje. Esa es otra de las cosas que me siento en parte orgulloso y a la vez culpable de ocultar tan bien.

-¿Qué ocurre en ese lugar? ¿Por qué nunca me dejas llevarte? – pregunta afianzando su agarre sobre mi cintura para mantenerme cerca, y cierro los ojos suspirando mientras entierro mi cabeza en su cuello... también tiene algunas semanas que me pregunta eso.

-Nada, solo no creo que sea buena idea.

-No mientas... hay una razón. – vuelvo a suspirar sin ser capaz de levantar mi rostro.

-No es nada, confía en mí.

-Bien. – suspira – al menos déjame acercarte, no quiero que vallas solo, es tarde y puede pasarte algo.

-No te preocupes, estaré bien. Te envío un mensaje a penas llegue a casa ¿de acuerdo?

-Bien, solo si me das un beso. – rio ante la petición y me acerco a sus labios para besarlos tiernamente, en lo que el ahueca mi mejilla con una de sus manos.

-Te veo mañana – digo en un susurro antes de levantarme y caminar hacia mi casa, no quería, no quería salir de sus brazos, pero ahora que estoy próximo a cumplir los 18 años mi padre esta un poco mas estricto de lo normal, supongo que tiene miedo de que su chivo expiatorio se quiera ir. Pero seamos honestos no me dejara ir a ningún lado. La única forma de que yo salga de este lugar será en un ataúd.

Cuando llego a mi casa, el sentimiento de nervios y ansiedad se posa en mi pecho como es de costumbre, me quedo parado al frente de la puerta intentando escuchar algún ruido del otro lado que me indique si es seguro entrar sin tener que perder la conciencia por los golpes.

Intento respirar profundo, siento ganas de llorar, estoy cansado de sentir pánico cada vez que llego a esta casa... cansado de mentir, cansado de no poder ser libre, cansado de recibir golpes.

La misma rutina se repite diariamente cada vez que llego a ese lugar, unos días con mas suerte que otros. Hoy no era uno bueno.

Al día siguiente despierto adolorido por los golpes, mi espalda baja duele como un demonio gracias a los latigazos, mi ojo esta morado y mi labio partido. Suspiro con dolor y medito la idea de ir a clases hoy, seria muy evidente si tengo la mitad de mi rostro inflamado.

El timbre del celular me saca de mis pensamientos y es en ese momento que maldigo, olvide por completo escribirle a lan zhan que había llegado.

A-zhan

Amor ¿estas bien?

¿ya estás en casa?

Wei ying

Contéstame, estoy preocupado

Debería ir... tal ves si digo que me robaron pueda justificar el golpe y el hecho de que no conteste los mensajes.

Mierda odio mentir.

-Todo sería tan fácil si tan solo me hubieras llevado contigo antes.

Antes de levantarme de la cama noto que hay más mensajes de A-cheng. Todavía recuerdo cuando lan zhan descubrió su apodo en mi celular, hizo un drama completo por las jarras de vinagre que bebió, y solo después de cambiar el apodo me perdono.

A-cheng

Te tengo una sorpresa, no faltes hoy a la escuela.

Y ahora que esta tramando, que sorpresa puede darme en el colegio, suspiro derrotado, parece que estoy destinado a ir al colegio el día de hoy, pero... y si no me creen lo del robo... de solo pensar en que lan zhan descubra todo siento como me falta el aire, ¿se enojara conmigo si sabe que le mentí? ¿me dejaría? Si lo hace después de enterarse no lo culparía después de todo son un desastre.

Con pesades me levanto de la cama para bañarme, el agua caliente cayendo sobre las heridas sin cicatrizar logra arrancarme un gemido agudo, principalmente en las heridas de mis muñecas, a pesar de que ese dolor no me importa, me lo merezco, soy débil para buscar refugio en esa técnica, pero no soy lo suficiente para poder terminar el cometido. No me sorprende fracasado hasta para morir. ¿Cómo reaccionaria lan zhan al ver estas heridas? No lo sé, no quiero averiguarlo, no hemos llegado a ese punto de nuestra relación tal vez algunos roses y manoseos por encima de la ropa, pero nunca mas allá, no le quitaría eso a lan zhan, su primera vez debería ser con alguien digno de él.

Una vez vestido y maquillado, al menos intenté que no se viera tan notorio la gravedad de mi ojo, salí de la casa con la misma rutina, intentando no hacer ruido.

Cuando llegue al colegio lo primero que veo es a Lan zhan parado en la entrada buscando algo con la mirada, pero apenas fija sus ojos en mi, suelta un suspiro de alivio mientras empieza a caminar hacia mí, parece que a la distancia no se nota tanto el hecho de mi cara esta inflamada.

-A-ying... ¿Qué paso? – a medida que se va acercando su rostro palidece al verme, levanta su mano para acariciarme la mejilla, esta vez no logro evitar que mi rostro se contraiga en dolor.

-No es nada solo... intentaron robarme anoche cuando iba camino a casa. – el dolor en mi pecho al mentirle se intensifica.

-A la enfermería – dice con un tono de voz demasiado serio para mi gusto.

-¿Qué? ¡no! – no voy a ir, si voy van a ver la gravedad que oculte, no puede ser que pensara que querría llevarme a la enfermería.

-A-zhan, enserio no es necesario solo es un pequeño golpe – noto como suspira.

-Baobei no es solo un golpe tu ojo esta muy rojo, necesito saber si estas bien. – dice esta vez tomando mi rostro con su manos, sus ojos dorados llenos de preocupación me parten el alma, es por esto que no puedo permitir que se entere de la verdad, no soportaría verlo así. Suspiro derrotado y asiento, dejando que me rodee la cintura con su brazo y me lleve a la enfermería.