Hannah.
Me duché, al salir de la ducha me sequé el pelo, hoy quería hacerme coleta, me eché 80 kilos de gomina, no soporto los pelitos que se sueltan.
Decidí ponerme un top negro y una falda blanca, me puse unos zapatos negros con algo de tacón y mis pendientes favoritos.
Me puse algo de base, nunca me pongo demasiada, ya que tengo la piel algo morena y casi nunca uso, tampoco me gusta ponerme, porque la verdad no me siento del todo cómoda. Me hago la sombra de los ojos, oscura como siempre, me hice el eyeliner, y me puse rímel, lo de siempre.
Le escribí a Dylan para que pasase a recogerme, avisé a Annet, a Nick no porque supuse que iría con Dylan. Salí de casa y fui hacia el coche de Dylan.
Abrí la puerta del coche y me quedé boquiabierta, Dylan, con una maldita camisa blanca ajustada, y unos vaqueros negros.
¿Me ha leído la mente o le he dicho yo alguna vez mi debilidad por las camisas ajustadas?
- Tengo los ojos aquí arriba, Hannah.
- Capullo - rodé los ojos, saludé a Nick, que estaba en la parte de atrás del coche, y me puse las gafas nuevas de sol que me llegaron hoy de shein-.
Me pasé todo el viaje hacia la fiesta mirando por la ventana, y revisando mi Instagram, Dylan aparcó en un callejón por lo que supuse que ya habíamos llegado a la fiesta.
Dylan, como en todas las fiestas, desapareció de un momento a otro, no le dí importancia, ya me empezaba a acostumbrar a no verle el pelo en las fiestas.
Entramos y me sorprende la cantidad de gente que hay, bueno, no es muy normal cuando hay instituto, busco a Dylan con la mirada, como es de esperar, no lo encuentro, nos dirijimos hacia donde está la mayoría de la gente, ya que hay un dj y una barra gigante con demasiados camareros, creo que he perdido la cuenta.
Reviso un poco el lugar con la mirada y lo veo, apoyado en el marco de una ventana, con una chica, como no, es raro, nunca lo veo con chicas, solo en las fiestas.
Él se percata de que lo estoy asesinando con la mirada, entonces, me mira y le mete la lengua hasta la capanilla a la chica, seguido de lametones en el cuello.
Iugh, asco.
Caminamos cerca de la zona de Dylan, yo llevo unos cuantos cubatas encima, la verdad, no sé cuantos llevo, siempre pierdo la cuenta, por lo que ya no tengo consciencia para saber si lo que digo o hago está bien.
Me acerco a él y lo aparto de la chica.
- Entiendo perfectamente que estés necesitado de amor, de sexo, y de lo que quieras, ¿Pero podrías dejar de pensar con la polla y venir con tus amigos en cambio de estar con una cualquiera? Me alegrarías la fiesta, ¿Sabes?
- Si estás celosa no hace falta que me lo digas así indirectamente, no tengo 2 años Hannah, si tu no estás tan buena, ni tienes a nadie a quien follarte, lo siento, pero no la pagues conmigo, corazón.
Oh, dios mío.
Que empiece la fiesta, capullo.
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Corazón de hielo
RomanceTodo está oscuro, desde ese día todo está oscuro. Nunca supe que les pasó, solo se que murieron, no sé de qué forma, ni dónde ocurrió, solo se que ya no están conmigo, ni lo estarán jamás. No sé nada de lo que pasó, desde aquello, no tengo muchos am...