Estaba sentada en el borde la cama en silencio, con la vista clavada al suelo en medio de la oscuridad. Podrían ser un poco más de media noche, el amanecer aún estaba a unas 6 horas más como mínimo.
Sus leves ronquidos me hacen ser consiente que no estoy sola y a diferencia mía, el si esta profundamente dormido. Lo miró y tiene la cara completamente relajada, la boca entre abierta y el cabello un poco alborotado de cada vez que se mueve. Me pongo de pie despacio sin mover mucho la cama y me aseguro de no haberlo despertado. Camino hacía la ventana para echar un vistazo a las calmadas calles de Alexandría, las cuales están un poco iluminadas por la luz de la luna. Desde mi habitación puedo ver una de las torres de vigilancia y veo su silueta en la oscuridad. Esta de pie observando hacia fuera de los muros, como si se percatara de mi presencia su mirada se clava en la ventana de mi habitación como un misil dirigido, estoy completamente a oscuras y no estoy segura de si podrá verme.
***Flashback***
-Entonces esto es todo? Le suelto de golpe mientras siento como mis ojos escocen y luchan por no llorar. -Después de todo lo que hemos pasado? Todo lo que hemos sobrevivido? Ni siquiera tienes el coraje para verme a los ojos.. Le digo mientras este solo tiene la mirada clavada al suelo. -Que más podría hacer? Que más podrías necesitar? Lo he dado todo por este grupo y..
-Todo eh? Me responde de manera seca.
-No. Le digo sintiendo como toda esa tristeza que me invadía se va convirtiendo en enojo. -No tienes el derecho de echarme nada en cara. Tu te fuiste primero, tu me dejaste primero, la elegiste a ella. En medio del fin del mundo la elegiste a ella. Así que no, no tienes el derecho de echarme en cara como intente reparar lo que tu rompiste primero. Me dejaste sola y el siempre estuvo ahí, siempre creí que solo era un error, que estábamos cometiendo ambos un gran error y que volveríamos que nada podría separarnos.. Le termino de decir mientras lo miro fijamente.
Los segundos que pasan parecen una eternidad. El sigue sin decir nada, pero está inquieto, cambia de peso de una pierna a otra mientras veo como mueve sus dedos con nerviosismo, gesto tan típico de el.
Escucho como suelta un suspiro;
-Te amo. Es lo único que me dice antes de salir por la puerta de la habitación en medio de la noche.
Siento como un escalofrío me recorre toda la espalda y las lágrimas que luche tanto por controlar se abren paso sin ningún impedimento..
-Te amo. Siempre. Digo en un susurro al aire.
***Ahora***
Escucho como la cama se mueve y me volteo. Profundamente dormido esta buscando una posición cómoda, cuando la encuentra suelta un suspiro y su respiración retoma el mismo ritmo pesado. Una pequeña sonrisa se forma en mis labios al verlo en aquella situación. Bajo mi mirada y la dirijo hacia la torre de vigilancia. Su silueta me indica que esta de espaldas otra vez y no esta solo. Identifico rápidamente la figura que lo acompaña.
Trago grueso y me volteo para entrar en la cama otra vez. Me quedo congelada cuando lo veo viéndome, sosteniendo su cabeza con su mano, pacientemente.
-Problemas para dormir? Me pregunta.
-Creí que estabas dormido. Le respondo mientras decido caminar hacia la cama, alzo la sabana y me meto en mi lado de la cama.
-No respondiste. Me recuerda.
Me armo de valor y lo veo. - Solo un poco, lo normal.. Le respondo con una leve sonrisa tratando de disimular mi nerviosismo.
-Sabes que te amo cierto? Me dice en un susurro mientras pone una de sus manos sobre mi mejilla.
Cierro los ojos ante su tacto, tomo su mano entre las mías y la llevo a mi labios. Deposito un cálido beso mientras lo veo a lo ojos. -Lo sé. Le respondo conociendo con total seguridad sus sentimientos hacía mi. -También te amo Negan.
YOU ARE READING
One Shots: Rick/Negan.
Ciencia FicciónHistorias adaptadas a capítulos de la serie, donde sí, la protagonista nunca va tener nombre pero siempre se va enredar con este par.