Los hijos de Oshún son simpáticos y alegres, tienen un gran deseo de ascensión social, les gusta mandar, son de llevar los chismes, curiosos, son sensuales, les encantan las joyas, la ropa y los buenos perfumes. Muchas veces temen chocar con la opinión pública a la que le prestan demasiada importancia. Aman los dulces por eso tienden a ser gorditos o de cara rellena.