𝐂𝐥𝐨𝐬𝐞 𝐭𝐡𝐞 𝐝𝐨𝐨𝐫 ╰─►𝐓𝐚𝐞𝐆𝐢

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Se sentía demasiado avergonzado al ver como su vecino lloraba por ser precoz y no poder conseguir un buen polvo, que mierda más vergonzosa.

No lo culpaba, estaba totalmente ebrio.

—Bien, Min. —habló con firmeza viéndolo fijamente. —ya fue suficiente de beber, vete a dormir.

El más bajo hizo sonar su nariz debido al llanto, viendo lo tan desordenada que se encontraba la mesa y recién recuperando su conciencia.

—¿Quién eres tú?

—Te ofrecí vino y vodka, y me dejaste entrar. —dijo mirando sus uñas para luego tomar otro sorbo de vodka. —también apenas llegaste te regalé galletas.

—¿Eres mi vecino?

—Así es.

—Mierda, estás guapo.

A Tae le dió algo de risa oír aquel halago salir de la boca de un homofóbico, cualquier homofóbico que esté sobrio y haga eso, se ponen a llorar.

—Ósea estoy muy claro de mi sexualidad, no malinterpretes. —rascó su nuca para luego volver a tomar un poco de su copa.

Sin antes que el de piel canela le arrebatara la copa y ponerse cerca de su cara y así intimidarlo.

—Ve a dormir, vas a vomitar si sigues.

El ajeno solo frunció el ceño. —¿Quién mierda te crees? aléjate, estás demasiado cerca.

Este no quiso hacer caso, de hecho hizo lo contrario, se acercó más para provocar lo que sea.

—¿Acaso no me oíste? —estaba tartamudeando.

Quedando a unos centímetros de los labios rosados y esponjosos del chico pálido sonrió con satisfacción al notar como le comenzaban a temblar las piernas.

Con su dedo índice tocó los labios de Min haciendo que sus mejillas se tornen aún más rojas.

—¿Creías que te iba a besar? vaya que te gusto. —este se levantó y tomó ambas botellas sonriendo de lado dirigiéndose a la puerta de la casa. —si necesitas algo para la resaca, solo toca la puerta.

Abrió la puerta aún con la sonrisa en sus labios, se sentía victorioso. —Duerme bien, buena noche.

El chico pálido se encontraba ahí sentado aún tratando de entender que acababa de suceder, y el porqué sentía que su estómago quemó cuándo su vecino se encontraba tan cerca de sus labios.

—Vecino de mierda. —bufó apagando las luces y subiendo a su habitación maldiciendo todo incluso estando ebrio.