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Lo dicho por el Omega retumbó en el cuerpo del morocho, la manera en que lo dijo hizo simplemente enloquecer a su lobo, sumando el embriagador olor que emanaba era muy exquisito

- oh Lix, por qué hueles tan bien? - dijo Hyunjin, este rodeo la cintura del menor con sus brazos y escondió su nariz en su cuello, sus sentidos se estaban alterando mucho

- j-jinnie~ - Félix comenzó a menear sus caderas, necesitaba roze

Hyunjin no se resistió, este comenzó a pasar su lengua por el cuello del menor, sus pulmones se llenaban tanto como podían, apretaba el pequeño cuerpo contra él, hasta que sus entrepiernas se encontraron

- ah~ - jadeo el menor, ambos cachorros se encontraban envueltos en una mezcla de excitación y necesidad, el cual era seguro que no saldría bien

- oh bokiie - dijo Hyunjin, este se levantó de la cama, volviendo a esta para recostar a Félix y quedar entre sus piernas, el morocho se paseaba por el pecho del menor, le encantaba el olor, pero sobre todo lo volvía algo necesitado

- h-hyunjin~ yo...ah~ te necesito~ - dijo el rubio elevando su pelvis, el mayor recorrió a Félix con su vista hasta sus pantalones, en ellos se podía notar como una erección estaba presente, Jin mordió su labio y volvió su vista a Lix, observó su rostro, sus mejillas y labios rojo, un poco de sudor, sus pelos alborotados, sus ojos cerrados, y sus pecas que brillaban, Hyunjin en ese momento pensaba en como nunca lo había visto así, se veía tan hermoso, tan perfecto, y sobre todo, tan deseable, esos labios rojos y abultados parecían ser demasiado sabrosos, con un gusto jugoso y dulce.

- Lix - lo llamó, este lento abrió sus ojos - eres hermoso - dijo, y sin pensarlo se largó sobre esas fresas, sus sentidos explotaron, era mucho más de lo que pensaba, tenía una esencia empalagosa, se sentían tan suaves, era como comer algodón de azúcar. El menor rápido reaccionó, paso sus brazos por su cuello y elevo sus piernas a las caderas ajenas

- jinnie duele~ - suspiro el rubio, en sus pantalones todavía estaba atrapada su erección

- tranquilo - dijo Hyunjin, este recorrió la pequeña cintura hasta llegar al botón del pantalón, lo desprendió al igual que su cierre, elevo un poco sus caderas y bajo la tela, Félix solo se quejaba sintiéndose más necesitado de las manos y cuerpo del Alfa sobre el. El morocho dibujo el elástico de los boxers negros, sujeto su orilla y se deshizo de ellos, Lix mordió su labio - espero que sea de tu agrado - dijo el morocho, Félix iba a preguntar pero sus ojos se cerraron y su pecho se elevó al sentir semejante placer, Hyunjin se encontraba acariciando su glande

- o-oh jin~ - jadeo el menor, el alto apretaba su punta, después de lanzar una sonrisa ladeada sujeto el miembro ajeno, Félix abrió aún más su boca, las manos del mayor recorrían con lentitud el largo de la entrepierna, disfrutaba cada una de las expresiones hechas por Lix, eran simplemente encantadoras

Las jaladas comenzaron a subir de ritmo al notar al pequeño muy necesitado, necesitaba acabar

- ah~ jin~ - jadeo sonriente el rubio, la velocidad le gustaba

- que lindo Omega - dijo Hyunjin acercándose a lamer el cuello del menor, a este se le erizo la piel

- h-hyunjin n-no~ - Felix apenas pudo hablar

El que el morocho hiciera sus cosas en su cuello no ayudaba, sentía que se estaba cegando, ya estaba por llegar a su éxtasis. Jin notó eso por lo que subió la velocidad y subió hasta su oreja

- vamos lixie, quiero que termines, te ves tan lindo así - dijo en su oreja para después pasar su lengua por ella

- y-yo ah~ - Félix estaba reteniendo, quería tener más tiempo a Hyunjin jugando con él, pero no por mucho

- que lindo eres - dijo Hyunjin, sin pensarlo saco sus dientes, se acercó lento a la piel del menor, despacio rasgo está, un mínimo rasguño quedó en ella, apenas salia sangre

- AHH~ - gimió Félix, eso había rebalsado el vaso, se vino manchando la mano del morocho y un poco las sábanas - dios~ - suspiro pesado, tenía sus ojos cerrados y su respiración agitada. Hyunjin solo sonreía, no sabía por qué, el solo lamía la poca y nula sangre que salía, una vez que no salió más lamió sus dedos, su estómago cosquilleo al lamer ese delicioso semen, era muy dulce y embriagador - h-hyunjin? - hablo el menor, este lo miro tranquilo - m-me....ma-marcaste? - pregunto el rubio

- solo...es algo temporal - dijo el morocho viendo el cuello

- oh...ok - dijo Félix, este ya respiraba tranquilo

- bokkie - llamo el mayor, el otro lo miro - eres muy hermoso - dijo, definitivamente Hyunjin había quedado mucho más que enamorado de su amigo de la infancia, sabía que las cosas habían cambiado cuando se habia enterado que era Omega pero no que terminaría queriéndolo hacerlo SU omega. El morocho sonrió y se acercó al rostro ajeno, y gustoso volvió a probar sus labios, solo que lo hizo más lento, disfrutaba cada milímetro de esa suavidad, era como recostarse en una nube de algodón con un olor dulce y delicioso, era simplemente el cielo

Hyunjin recorrió la cintura del pequeño, bajo hasta sus caderas, este acomodo su boxer metiendo su miembro dentro, no quería lastimarlo con su ropa al tirarse sobre él, cuando iba a soltar el elástico la puerta fue bruscamente abierta.












𝐀𝐥𝐟𝐚 ʰʸᵘⁿˡⁱˣDonde viven las historias. Descúbrelo ahora