Siendo simplemente casi las nueve del anochecer Hyunjin esperaba que la noche cayera rápido, quería ver cuanto antes a su omega. Mientras estaba recostado en la oscuridad de su habitación su teléfono vibro, con pereza lo tomo, vio que era un mensaje de su omega, sin más lo abrió, sin duda fue una pequeña sorpresa, una que le gustó mucho
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alfa - venga rápido - lo necesito - papa no me quiere dar mis juguetes como castigo - ven que quiero saltar sobre ti - lo necesito dentro -
El ver a su Omega vestido así y llamándolo necesitado lo aceleraba mucho, quería estar con él, haciéndolo saltar como él quería, haciéndolo jadear cuánto quisiera, simplemente saciandolo, como buen alfa. Sin hacer esperar a su omega se paró de su cama y de dirigió a su espejo, subió su remera y tomo una fotografía
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- estaré ahí en cuanto menos lo esperes - no te toques - espérame
oh alfa - lo esperaré - pero dese prisa -
Sin pensarlo Hyunjin tomo su mochila, en ella metió un abrigo, condones y lubricante, si su omega lo necesitaba no lo dejaría con las ganas, se puso sus zapatillas y como de costumbre salto por la ventana, camino hacia la escalera que tiene la orilla de la casa y bajo al suelo, rápido comenzó a correr, su bokkie lo esperaba necesitado
Una cuadra antes dejo de correr, debía recuperar el aliento, camino hasta la casa del rubio, sin hacer mucho escándalo busco la ventana del omega, esta estaba abierta como él le había dicho que dejara, subió la escalera, el olor a excitación ya podía olerse y su lobo se emocionó
Una vez en la ventana entro con sumo cuidado y sin hacer ruido, vio como Félix estaba con un pequeño pantalón que apenas bajaba su cachete y una blanca remera grande, sus hermosas medias, sus muslos quedaban a plena vista, era hermoso verlo. Con cuidado subió a su cama y se acercó a él