𝐴𝑠𝑡𝑟𝑜𝑛𝑎𝑢𝑡𝑎 - 𝐴.𝐺. {𝑨𝒅𝒂𝒑𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏} - 𝐓𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚𝐝𝐚 - ✔️

🌠Capítulo 3🌠

Aidan...🌠

Un mes, un mes junto a T/n y me sentía en la maldita gloria, cada vez me enamoraba aún más de ella, cada minuto a su lado era pura felicidad, siempre andábamos haciendo bromas, molestándonos, era muy feliz desde que ella llegó, y al parecer ella también lo era.

La miré una vez más y sonreí, ella se aferraba con fuerza a mi cuerpo y apretaba mi mano, dejé un beso en su cabello y acaricié su pequeña cintura.

—Aidan, ya no quiero —Susurró—. Tengo miedo.

—Tranquila bonita, lo haremos juntos, yo voy a estar junto a ti y no voy a dejar que te pase nada —Ella me miró fijamente y se mordió el labio, joder, amaba que hiciera eso—. Será divertido, luego querrás subirte otra vez.

—¿Y si quedamos atrapados allá arriba? —Habló temerosa.—

—No pasará nada, es divertido —Insistí, ella volvió a mirar la enorme rueda de la fortuna mientras la fila para subir avanzaba.—

—¿Y si subes tú y yo te espero abajo? —Hice un puchero, y ella volvió a mirar la rueda de la fortuna.—

—¡Por favor, sube conmigo! ¿¡Sí!? —Tiré de su mano y hice un puchero, ella sonrió y puso los ojos en blanco.—

—Bien, lo haré, subiré contigo —Sonreí ampliamente y la cargué dándole vueltas, mientras ella reía y pataleaba.—

—¿Sabes que te amo mucho? —Ella negó divertida.—

—Hoy no me lo has dicho —Soltó una risa.—

—Te amo mucho —Aseguré, ella sonrió, la miré a los ojos y me acerqué más a ella, pasando uno de mis brazos por su cintura—. Más de lo que podrías imaginarte.

Miré sus labios rojos, se veían tan suaves y apetitosos, quería besarla, llevaba deseando besarla desde la primera vez que la vi.

Me humedecí los labios y comencé a acercarme a ella, hasta el punto que nuestras narices chocaban y nuestras respiraciones se mezclaban, nuestros labios se rozaban y sentía como si todo a nuestro al rededor había desaparecido.

Cerré los ojos y pegué mis labios a los suyos, solté un jadeo al darme cuenta de lo que estaba haciendo pero, ella no ponía resistencia, y sus labios sabían exquisitos, sabían a cereza con una mezcla de miel, sus labios eran tan suaves, y que decir de sus besos.

Sabía que ella nunca había dado un beso, pues nunca había tenido novio o algo cercano a eso, pero besaba tan bien, como si fuera una experta, y no quería separarme de ella.

Tiré levemente de su labio y ella abrió ligeramente los labios, introduje lentamente mi lengua en su boca y ambos jadeamos, besarla era como estar en el mismísimo cielo, y no quería bajar de el, ella hundió sus dedos en mi cabello, mientras yo me aferraba más a su cintura, me sentía de una manera tan inexplicable, me sentía totalmente feliz.

Me separé lentamente de ella y pegué mi frente a la suya, mi pecho subía y bajaba rápidamente, una sonrisa estúpida había aparecido en mi rostro, por fin la había besado, y había sido perfecto, sin duda, el mejor beso que he dado en toda mi vida, abrí los ojos y ella me miraba con timidez, tenía las mejillas totalmente rojas y respiraba agitadamente.

—Yo...

—¡Siguiente! —Ambos nos sobresaltamos, la tomé de la mano y la jalé hasta donde estaba el vendedor, pagué ambos boletos y nos llevaron hasta nuestro lugar.—

Ella apretó mi mano y soltó un grito cuando la rueda de la fortuna comenzó a girar, tomé su mano y le sonreí, tratando de calmarla un poco, ella tragó saliva y miró abajo, se puso totalmente pálida, como si fuera a desmayarse.

—A... Aidan... —Tartamudeó sin despegar la mirada del suelo.—

—¡Hey, hey, tranquila bonita! —Acaricié sus nudillos—. Estoy contigo, todo estará bien.

—Me voy a desmayar —Susurró, comenzó a respirar pesadamente y a removerse en el asiento.—

—Mírame —Hablé suavemente tratando de tranquilizarla, ella me miró y se lanzó sobre mi, ocultando su rostro en mi pecho, podía sentir como todo su cuerpo temblaba—. Tranquila, todo está bien, yo te estoy cuidando, cariño.

—No te voy a perdonar esto jamás —Amenazó mientras se tomaba con fuerza de mi camiseta, solté una risa y besé su frente.—

—Claro que lo harás —Sonreí—. Haré lo que sea con tal de que me perdones.

—Vas a ser mi esclavo.

—Con gusto lo seré, pequeña —Reí ante sus ocurrencias, la tomé del cuello suavemente y dejé un pequeño beso sobre sus labios, ella me miró incómoda y luego apartó la mirada.—

Estaba claro que desde que nos besamos algo había cambiado por completo, como si hubiéramos acabado con toda la confianza que nos teníamos, ahora éramos como dos personas extrañas que no pueden ni mirarse a los ojos, como dos personas que se odian, y exactamente eso era lo que temía desde el momento en el que me ofrecí a ser su amigo, porque yo sabía claramente lo que sentía por ella desde que la vi, sabía que mis intensiones con ella eran diferentes, no quería ser simplemente su amigo.

Tenía miedo de lo que podría pasar ahora, que rayos iba a hacer ahora, no podía seguir ocultando mis sentimientos después de haberla besado, los amigos no se besan, o bueno, los amigos como nosotros, pero rompí una ley, un código de amistad, ambos la rompimos, pero yo la induje a hacerlo, tengo miedo de perderla, de que las cosas entre nosotros ya no sean las mismas, pero ya no me voy a seguir ocultando, tengo que dejarle claro todo, tengo que asumir las consecuencias, así la consecuencia sea perderla a ella.

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🌠Aquí les traigo el capitulo del día de hoy, espero les guste mucho y le den mucho apoyo, disculpen si hay alguna falta de ortografía, comenten mucho por favor, me gusta leer cada uno de sus comentarios y sin más hasta el próximo capitulo🌠