🍬Cap. 2

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Tal y como aquel español había ordenado, el pequeño alfa salía cada mañana junto al omega, caminando por las calles en busca de algún lugar para poder empezar con sus trabajos.

Un nuevo día, una nueva oportunidad para ganar más dinero.

El mexicano necesitaba hacerlo, no le quedaba de otra si quería al menos cenar esa noche, así que, teniendo a un menor de 6 años agarrando su maltratada remera mientras caminaba, sólo podía pensar y rezar por que ese día al menos fuera algo tranquilo a comparación de los otros.

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Y ahí se encontraban, un pequeño alfa de 9 años llenando un balde con agua dejandolo a un lado para asi, llenar otro, llegando a limpiarse un poco el sudor que tenía en su rostro ya que, era verano, el calor en las calles era bastante fuerte.








—Mu-muchas gracias...Don Portugal








Dijo aquel pequeño omega apenas asomándose por unas rejas del negocio de aquel hombre mayor, quién, al ver a ese lindo y tierno albiceleste sonrió con dulzura.

En la riqueza y pobreza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora