Volkwayweek ｢ Volkway Oneshots 」〃

՞ 𖥻 Day Three ˎˊ˗

Volkway padres 

Volkov era conocido por ser alguien que le gustaba muy poco los niños y bueno Conway no se le quedaba atrás después de todo lo sucedido con su familia hace unos años pues no era como que le llamara mucho la atención tener otro pequeño en su vida.

Aunque ese pensamiento por parte de ambos cambiaría, cuando un día cualquiera el ruso aprovechando que era su día libre, iría a comprar algunas figuras de anime que tenía días queriendo, hace unos días mientras patrullaba vio en una linda jugueteria algunas figuras de anime que le llamaron bastante la atención.

Condujo tranquilamente hasta la jugueteria, al llegar entró al lugar y miró los pasillos en busca de aquellas figuras que tanto anhelaba, mientras pasaba por uno de los pasillos sintió un suave jalón en su camisa, se dio vuelta y miró con una ceja alzada a un pequeño niño rubio que le miraba con ojitos llorosos.

-Señol ¿ute sabe onde ta mi mamá?- sollozo, haciendo que el frío corazón del ruso se encogiera.

-No lo sé, pequeño, pero podemos ir a buscarle- sonrió mientra le extendía la mano para que el pequeño la tomara, cosa que el menor hizo sin pensarlo, caminaron por la tienda hasta llegar a la caja-Buenas tardes, señorita, verá este pequeño está perdido, ¿usted tiene alguna forma de- antes de poder terminar de hablar una mujer se acercó rápidamente a ellos y abrazó al pequeño

-Mamiiii- gritó el pequeño mientras sollozaba- el señor me cuidó y me ayudó a encontrarte- la madre del pequeño miró a Volkov y se acercó a él rápidamente.

-Muchísimas gracias, comisario no tengo forma de agradecerle el haber cuidado y ayudado a mi pequeño, le aseguro que usted sería un excelente padre- sonrió la señora, Volkov no negaría que todo lo ocurrido y las últimas palabras le hicieron empezar a cambiar de opinión sobre los niños- bueno nosotros nos retiramos, muchas gracias de nuevo, comisario. (...)

Los días habían pasado y Volkov no podía dejar de tener la pequeña necesidad de decirle sus sentimientos a su pareja, pero tenía mucho miedo, sabía todo lo que había sucedido en el pasado con la familia del americano, por lo tanto temía que el mayor reaccionara de mala manera cuando el le mencionara que quería que adoptaran a un niño.

Por otro lado estaba Conway que había notado a su novio bastante distraído tanto en el trabajo como fuera, le preocupaba un poco la actitud del menor ya que este nunca se veía tan distraído en su trabajo, al contrario era alguien sumamente competente, por eso le preocupaba la actitud que estaba teniendo su pareja.

Aún se encontraban en comisaría por lo tanto el ruso aprovechó para hablar con su mejor amigo Ivanov, luego de una larga charla con él decidió decirle lo que sentía a Conway, subió algo nervioso al despacho de su jefe y pareja, abrió la puerta sin tocar sabiendo que el americano no le diría nada, el mayor se encontraba entretenido firmando uno que otro papel, miró hacia delante y se encontró con el ruso que le miraba fijamente.

-Sucede algo, Vik?- murmuró algo preocupado, el mayor, era extraño que Volkov entrara a su despacho si no era para informarle de algo.

-Verá, quiero comentarle algo que me ha tenido pensando los últimos días ¿tiene tiempo? Si no podemos hablarlo en el departamento-habló bastante rápido debido al nerviosismo.

-para ti tengo todo el tiempo del mundo, cielo- sonrió acomodándose mejor en la silla- venga cuéntame sobre eso que te ha tenido tan distraído estos últimos días.

-Vale- se sentó al frente de su pareja y lo miró- hace unos días sucedió algo en una jugueteria, eso que sucedió me dejó pensando y me hizo recapacitar sobre mi pensamiento de tener un niño, sé todo lo que sucedió en su pasado pero creo que podríamos darle la oportunidad a un niño, sé que no sucederá lo mismo que en el pasado y le aseguro que seremos los mejores padre y que cuidaremos muy bien de esa criatura, también leí que hay un orfanato cerca del observatorio, tal vez podríamos ir a echarle un vistazo y ver si tenemos la oportunidad de adoptar- todo esto lo había dicho sin ver el rostro del mayor, al momento de mirarlo pudo apreciar una expresión de sorpresa, miedo o hasta disgusto, esa simple expresión le dio todas las respuestas que necesitaba.

-Viktor, mira será mejor que hablemos de esto, no creo que hablar sobre este tema estando de servicio sea lo mejor, anda a patrullar- lo miró seriamente, sabía que estaba siendo demasiado borde pero no sabía de qué otra forma reaccionar, ya que los recuerdos de lo sucedido con su familia llegaron a su cabeza como fuegos artificiales.

El ruso simplemente asintió y se retiró del lugar sin decir ni una sola palabra, caminó hasta la recepción y salió de servicio, la verdad es que no le apetecía para nada estar de servicio, se despidió de sus compañeros que se encontraban atendiendo denuncias y salió al garaje para conducir hasta su hogar, una vez llegó se tiró en su cama y miró al techo, no mentiría al decir que se esperaba una buena respuesta pero jamás pensó que el mayor se comportara de esa forma al mencionarle ese tema, esperaría a escuchar una negación de parte del mayor cuando llegara pero por el momento solo quería dormir y no pensar en lo que sucedió.

Conway se enteró de que el ruso había salido de servicio apenas bajó de su despacho y se sintió aún peor, la verdad es que sabía que debía de darse la oportunidad de formar una familia con Viktor pero tenía miedo, pero eso no era una negación, iría con el menor a ese orfanato que le mencionó y verían si era posible adoptar a un pequeño. Luego de un largo día de trabajo llegó a su casa que se encontraba en total silencio, ingresó a su habitación donde encontró al ruso durmiendo plácidamente.

Volkov al sentir una suave presión en el colchón abrió lentamente los ojos, encontrándose con su pareja que le miraba con una linda sonrisa dibujada en su rostro.

-Vik, no quería despertarte, lo siento- murmuró mientras acariciaba su mejilla dulcemente.

-No te preocupes, cielo-sonrió-¿sucede algo? Te noto extraño

-Hm, sobre lo que me dijiste en comisaría, creo que deberíamos de darnos la oportunidad de formar una familia, es hora de comenzar a soltar el pasado y darme la oportunidad de ser feliz. (...)

Habían pasado ya una semana desde que tuvieron la conversación sobre adoptar a un niño, hoy irían por segunda vez al orfanato a ver a un pequeño niño de cabello azabache que se había robado el corazón del mayor, ya que el primer día que vinieron a visitar el lugar el pequeño le tomó la mano.

Pasaron todo el día al lado del niño mientras jugaban tranquilamente con él, en el pequeño patio que tenían al lado atrás del orfanato, Volkov y Conway no podían esperar con más ansias el día de la adopción. (...)

Tres meses pasaron desde la primera vez que fueron a ver al pequeño que ahora era oficialmente el hijo de aquellos dos policías, un pequeño azabache de ojos azules llamado Lucas, el niño que les robó el corazón desde el día uno, hoy por fin, gracias a la influencia del superintendente lograron acelerar el proceso de adopción y ahora el pequeño se encontraba con ellos en el auto con destino al departamento.

Una vez llegaron al nuevo hogar del pequeño Viktor le enseñó lo que sería su habitación, Lucas no podía estar más encantado de lo que era su habitación, estaba demasiado feliz de ahora tener una familia.

Pasó toda la noche jugando con sus padres y un lindo oso con traje que le regaló el mayor, los dos policías no podían estar más felices, al fin podían decir que la familia estaba completa y sabían que ese pequeño azabache no le faltaría ni amor ni cuidados.