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Sunghoon descansaba sobre la cama, la cuál compartía con su esposo y Omega, Kim Sunoo.

—Alfa perezoso, despiértate, tienes que ir a la reunión. —Dijo el Omega de cabello rosa lanzándole una almohada en la cara

—Cinco minutos más. —Dijo el Alfa removiendose en la cama con una sonrisa

Sunghoon sabía que su Omega solía despertarlo de las mejores formas posibles, dándole pequeños besitos en su pancita.

—No seas un Alfa perezoso. —Dijo el Omega acercándose al Alfa

Sunghoon sonrió cuando sintió que su playera era levantada, dejando expuesto su bien trabajado abdomen marcado. Pero eso no le interesaba al Omega.

Sunoo comenzó a darle pequeños besitos en el abdomen a su Alfa, el cual comenzó a soltar pequeñas carcajadas al sentir los dulces labios de su Omega.

El Omega no solo daba pequeños besitos, también comenzaba a mover rápidamente sus dedos sobre el abdomen del Alfa, haciendo que éste comience a reír.

—Ya despiértate Alfa tonto, tienes que ir a tu entrevista de trabajo. —Dijo el Omega abrazando a su Alfa al sentir como éste se levantaba

—Eres un Omega muy tontito. —Dijo Sunghoon dejando que el Omega lo abrazara

Sunghoon amaba los abrazos del Omega, dejaban su aroma impregnado en él, el dulce aroma de su Omega se combinaba perfectamente con el de él.

Además el aroma de su Omega solía darle paz y tranquilidad, también una mezcla de confianza y amor. Un aroma único entre todos los que existían.

Estaba enamorado de Kim sunoo, mejor dicho, Park Sunoo, su esposo y su Omega.

Ambos se dieron un beso en los labios y luego cada uno tomó su camino, Sunghoon desnudándose para meterse a la bañera a darse una ducha rápida.

Mientras que Sunoo bajaba a la cocina para servir su desayuno y el de su esposo. Le hizo el mejor desayuno de todos, después de todo había conseguido una entrevista en uno de los mejores sitios para trabajar.

Y más en un cargo alto como el de asistente del jefe de la empresa.

꒰ ・ ・ ・ ꒱

—Estás muy guapo, Hoon. —Dijo el Omega acomodando la corbata de su Alfa

—Lo sé, debo estar bien para la entrevista, debo causar una buena imagen. —Dijo Sunghoon mirando a su Omega

—Eso espero Alfa, también espero que te quedes con el puesto, aunque eso es muy lógico, eres Park Sunghoon, el Alfa que todo lo puede. —Dijo Sunoo terminando de hacer el nudo de la corbata y poniéndose de puntitas para besar la mejilla de su Alfa.

Sunghoon sonrió ante la acción de su Omega, ya estaba preparado, había practicado su discurso varios días previos antes de la entrevista, tuvo el mejor desayuno de todos y siempre se levantó como le gustaba al Alfa, siendo despertado por su Omega.

—Cariño, debo irme, prometo que más tarde llegaré para decirte cómo me fue. —Dijo el Alfa abrazando la cintura del Omega

—Está bien Alfa, lo entiendo. Debe irse o sino vas a llegar tarde. —Dijo Sunoo abrazando al Alfa

Antes de separarse, ambos comenzaron a frotar sus cabezas el uno contra el otro, dejando impregnado -nuevamente- su aroma en el otro.

Para Sunoo, era lindo cargar con el aroma, la marca y el anillo que el Alfa le había entregado.

Y para Sunghoon, era lo más hermoso del mundo el tener el aroma de su Omega impregnado en él, dejando en claro que él ya tenía un Omega esperándolo en casa.

Ambos tenían trabajo, o bueno, Sunghoon estaba en busca de uno ya que su Omega por el momento no podía asistir a su empleo.

Sunoo se dedicaba a la danza, siendo un bailarín profesional y también un maestro de esa misma categoría.

Pero por una pequeña lesión en el tobillo tuvo que descansar de su trabajo, siendo cuidado por el Alfa y manteniéndose hasta el momento con los ahorros de ambos.

Y Sunghoon solía trabajar en un pequeño local, siendo un mesero, pero Sunghoon quería darle una mejor vida a su Omega.

Así que simplemente renunció y se dedicó a buscar un empleo acordé a sus estudios. Y vaya que encontró una buena oferta en Shim's company.

Ambos se habían ido a vivir juntos hace poco tiempo, exactamente hace dos meses atrás, pero el amor jamás fallaría entre ellos.

Los mimos, las caricias, los besitos y las horas en las que hacían el amor era todo para ellos. Después de todo ambos eran almas gemelas, se necesitaban mutuamente.

Sunghoon salió de su hogar y paró un taxi. Necesitaba llegar lo más rápido posible, aún quedaban cuarenta minutos, pero quería dar una imagen de puntualidad.

Sunghoon era un Alfa que todos los omegas deseaban, amoroso, trabajador y muy guapo. Y Kim Sunoo corrió con la suerte de haber capturado a ese Alfa con sus encantos.

O bueno, desde pequeños se conocían, y desde pequeños había iniciado su pequeña historia de amor que sigue en pie hasta el día de hoy.

Un Alfa y un Omega dándose amor y apoyo mutuo. ¿Nada mejor que eso?

꒰ ・ ・ ・ ꒱

Comenzamos con un libro muy bonito cómo primera adaptación de ésta cuenta.

Agradezco a dollyminnie por dejarme adaptar ésta historia. <33

Sin nada más que decir, disfruten mucho la lectura.

Mimos. ‹𝟹 Sungsun Donde viven las historias. Descúbrelo ahora