𝐆𝐑𝐀𝐕𝐈𝐓𝐘 | 𝐒𝐓𝐄𝐅𝐀𝐍 𝐒𝐀𝐋𝐕𝐀𝐓𝐎𝐑𝐄 [1]

𝐒𝐈𝐗

CAPITULO SEIS | KATHERINA

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Desde que el padre de Klara se había quemado vivo por fuera, Klara no le había dicho ninguna palabra a nadie. Es comprensible, independientemente de la relación que tuviera con su padre, no lo quería muerto . Ella nunca lo querría muerto. Ella lo odiaba, eso era evidente, pero seguía siendo su padre a pesar de todos sus defectos.

Klara salió de la ducha con una toalla blanca mullida que cubría su cuerpo mientras se secaba con una toalla sus mechones rubios. Por lo que podía oír, Elena ya se había dirigido a la escuela, pero en no tenia ganas de ir sola, así que tomo la decisión de evitar el lugar a toda costa.

"Oye Klara, así que ..." Stefan entró tranquilamente en la habitación sin siquiera darse cuenta de que su amiga estaba de pie nada mas con una toalla. Una vez que lo supo, inmediatamente se aclaro la garganta y aparto los ojos. "Wow. Lo siento, pensé que estabas vestida".

"Hay una cosa que se llama tocar la puerta. Deberías intentarlo". Klara comentó una vez que se había trasladado a su cajón que contenía sus blusas. "Lo siento. Estoy siendo sarcástica. ¿Qué pasa?"

"Así que la mujer que secuestró a Elena, Rose, está abajo y está dispuesta a darnos información sobre Klaus", descrito Stefan. Klaus era el hombre que estaba detrás de Elena, y Rose había secuestrado a Elena para dársela a Elijah, quien presumiblemente estaba trabajando para Klaus. "Dijo que tiene respuestas sobre ... sobre tu padre".

"Bueno." Fue lo primero que dijo Klara después de ponerse una camiseta blanca corta por la cabeza. Agarró un par de jeans rotos de lavado claro y se los puso también. "Si ella tiene respuestas, quiero saber. Solo quiero entender lo que le sucedió porque la última vez que lo vi, era humano. Claro, era un idiota, pero no merecía convertirse en vampiro y luego ser usado".

"¿Estás segura?" Stefan se detuvo por un momento. Se dio la vuelta para ver a Klara vestida, aunque su cabello todavía estaba ligeramente húmedo sobre su hombro. "Es solo que no quiero verte molesta".

"Preferiría saberlo. Porque honestamente, el no saber es peor". Ella se encogió de hombros. "Claro, lo odiaba por dejarme, y todos los días deseaba que sintiera una pizca del dolor que yo sentía. Pero nadie merece sufrir. Yo nunca querría eso para nadie".

La compasión de Klara fue la razón por la que ella y Stefan se llevaban tan bien. Le encantaba eso de ella. La forma en que era tan cálida y comprensiva, incluso cuando la gente no merecía su perdón en primer lugar. Ella era muy compasiva y él lo adoraba.

Una vez que ella y Stefan bajaron las escaleras, los ojos de Rose se encontraron con los de Klara con simpatía. La rubia luego giró su cabeza hacia Damon, quien inclinó la cabeza cuando notó lo entumecida que parecía. "Entonces, ¿este me dice que tienes respuestas a mis preguntas?" Los ojos de Klara parpadearon entre Stefan y Rose. "Estoy lista para escuchar".

"Entonces, sólo sé lo que pude averiguar". Rose aclaró una vez que tomó asiento frente a la rubia, quien había elegido sentarse al lado de Stefan. "Trevor y yo conocimos a tu padre hace dos años. Estaba recién convertido, libre de humanidad y sediento de sangre. Le ofrecimos nuestra ayuda, que él negó".

"Siempre fue terco." Confirmó Klara con un leve asentimiento mientras un destello de sonrisa apareció en sus labios mientras recordaba. "Nunca fue del tipo que acepta ayuda".

"Está bien. Pero, ¿por qué vino a buscar a Klara?" Damon dijo inexpresivamente mientras sus ojos estaban fijos en el vampiro de pelo de duendecillo que le ofreció la información. "¿Y cómo supo de Elena?"