-Vengo de paso mamá recuerda que voy con los señores Santoro-dije saludando a mi madre- por cierto ¿conoces a los nietos?
- No, ni sabía que tenía nietos, en los años que llevamos trabajando en esa casa siempre fueron solo ellos dos, el señor y señora Santoro nada más.
-Bueno me voy antes de que se me haga tarde y me despidan.
-Cuídate mi niña y recuerda, si son muy groseros contigo no dudes en decirle a los señores seguro ellos entenderán. -me dijo dándome un beso en la frente
Me despedí de mi familia y horas después estaba enfrente de la casa Santoro, me sorprende que no sientan soledad, su casa es muy grande y ellos solo son dos personas, bueno 4 próximamente.
Toque el timbre y salió una sirvienta que me miró de abajo hacia arriba juzgando descaradamente mi vestimenta y lo admito no tuve mucho tiempo para arreglarme, pero no era motivo para mirarme de esa manera.
-buenas tardes soy Lucia Torres la señora Juliana me citó hoy. -dije con una sonrisa bastante fingida
- Claro ahorita le digo- dijo dándome un último vistazo
La señora Juliana salió muy efusiva a recibirme, nada comparado con su sirvienta.
-Hola querida ya llegaron están en sus cuartos podrías ayudarlos a desempacar?
Yo asentí resignada.
- Están en las habitaciones pasando las escaleras principales. - me señalo para después retirarse
Me dirigía hacia las escaleras mientras iba pensando en mil y un formas de tirarme de ellas como excusa para no cuidarlos.
-quizás sean amables- dije entre dientes para tranquilizarme.
-Puedo pasar? Soy Lucia su niñera. -dije tocando la puerta
Una voz en el interior sonó.
-Claro pasa está abierto.
Pase a la habitación muy dudosa y me sorprendió ver a una mujer muy sonriente.
-Oh disculpa no sabía que vendrían más personas con los niños. –
Dije mirando a la chica rubia que se encontraba desempacando en esa habitación.
- ¿Niños? ¿Qué niños? O no esto debe ser una confusión. Soy Lucían y ya no soy una niña como ya te habrás dado cuenta. -dijo con una risa al final
"Es muy bonita". Esa frase se repetía en mi cabeza una y otra vez tanto que me quede helada.
- ¿Y tú eres?
En mi cabeza había una confusión enorme hasta que ella misma me saco de mis pensamientos.
- Ah claro mucho gusto soy Lucia Fernanda Torres y seré tu turista por estos tres días.
No pensaría tal humillación aceptando ser su niñera cuando estaba claro que ella no quería una niñera.
Una voz muy varonil me asustó en la ventana, en ese instante recordé que había otro niño en la fotografía y si ella ya no era una niña, él menos.
Trague saliva cuando mire al chico que se encontraba bajo el marco de la puerta recargado, y al igual que su hermana era un jodido modelo ambos eran altos y delgados y unos característicos ojos azules, un azul muy claro casi gris.
-Lucifer, ¿a quien le jodiste la vida como para que te pusieran ese nombre de mierda? -dijo en tono burlón finalizando con una pequeña risa
Ese comentario me trajo devuelta a la realidad, nadie me llamaba así desde que abandone mi vida antigua, ellos siempre me decían lucifer porque era una jodida maldición que les había arruinado la vida.
-Leandro no empieces -dijo su hermana en un tono de cansancio- Él es Leandro y es un dolor de huevos como ya te disté cuenta.
-No necesito que me presentes Lucían -dijo en tono molesto
Este misterioso chico avanzó hacia mi quedando a unos centímetros de mi cuerpo dejándome paralizada por su fuerte mirada que me observaba muy lentamente de pies a cabeza.
-Hola soy Leandro y seré tu dolor de huevos si sigues apareciéndote en mi camino.
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LUCIFER [En proceso]
RomanceLucia Fernanda una joven que toda su vida a sido sencilla y simple hecho por el cual tanto se lamenta sin darse cuenta que no todo es lo que parece y que no todo es tan sencillo. En sus últimos semestres de preparatoria le llega la chispa que tanto...