¿Te conozco?

Como la primera vez

-Eres realmente inservible- escupió la mujer mientras Vee miraba fijamente el suelo, su cuerpo estaba tenso  su mejilla dolia despues del golpe que su madre le habia dado sin explicación alguna, - se suponia que debías cuidarla, pero de nuevo vuelves a causar que ella termine en el hospital- dijo con enojo, la castaña apretó los puños soportando las ganas de gritar  siempre era a ella a quien culpaba, Ella no entendía, ¿por qué Luz era a la que cuidaba?, ¿por qué luz era la que siempre obtenía toda la atención?,Avece Ella deseaba que su hermana nunca hubiera tenido el accidente así todo volvería a ser como antes, así ella no tendría que dejar su vida para  cuidar de su gemela, sintió como las  lagrimas comenzaban a amenazar con escapar de sus ojos, apretó los dientes con fuerza, no quería llorar, no frente a su madre, sentia como su garganta ardia, -yo soy alguien- susurro sintiendo su estomago revolverse, Camila la miro sin comprender esas palabras, -!yo soy alguien!- dijo alzando la voz y manteniéndose en su lugar, la mujer frunció el seño ante tal "falta de respeto", - ¡soy parte de esta familia!, soy tu hija, yo soy...- susurro con la voz quebrada, su madre la miro inexpresiva, por primera vez en mucho tiempo aquella pequeña levanto la mirada y se atrevió a ver el par de ojos que siempre quiso que la miraran a ella - yo también soy tu hija  - toda su vida ella solo quiso una cosa quería  que su madre siquiera supiera que existía que le dijera que era importante, que le dijera que la amaba.

- lo siento- susurró viendo a su madre aun de pie, inerte ate sus palabras, Camila respiró hondo mientras se acercaba a su pequeña con ese semblante frio que se había vuelto parte de ella desde hacia unos años,  tal vez era cierto que ella pedía demasiado, pero  su hija Devia ver que nadie la salvaria en un mundo tan cruel o eso pensaba, una sonrisa chueca comenzó a  dibujarse  en el rostro de vee cuando su madre se acerco a ella, quizás por fin la abrazaría pensó sintiéndose feliz, pero no en un parpadeo esa ilusión fue aplastada su mejilla ardía mucho mas que todas las veces anteriores, una lagrima rodo por su mejilla, giro la cabeza mirando a su madre, sentía que, bueno en realidad no sabia que sentía, se llevo la mano la mejilla, -se te hace tarde para la escuela- dijo Camila con indiferencia girándose sobre sus talones y alejándose.

cuando la mujer escucho los pasos apresurados de su hija subiendo las escaleras se permitió respirar, acomodo el mechón que se habia soltado de su perfecto peinado  y mirando aquella foto que relucía sobre una vieja vitrina susurro - no eres como ella-  dijo viendo la imagen de un par de pequeñas que parecían reflejo, una sonreía mostrando un agujero donde faltaban un par de dientes y la otra mantenía la mirada agachada, -nunca lo has logrado-.

Luz había terminado de lavarse los dientes luego de desayunar, Tenía una muleta bajo su brazo izquierdo y Su mochila colgaba de sus hombros dio una ultima mirada a al espejo, paso su mano acariciando la cicatriz apenas visible que se dibujaba en su mejilla, Miró el reloj en su muñeca con ansiedad, Justo cuando dieron las 8:00 a.m el timbre de la casa sonó, la morena tomo un poco de papel y se seco las manos para después  comenzar a avanzar a paso de plomo, paso por la cocina y sala, ya no había nadie en casa, Eda había llevado a king al doctor, decía que no era nada grave que el dolor debió ser producto del kilo de chocolate que el pequeño había comido el día anterior, su madre habia salido para el trabajo y vee al ser candidata para presidenta del consejo estudiantil tenia mucho trabajo, luz se sentía sofocada  no había hablado con aquella extraña Joven desde el hospital, las últimas palabras que compartieron fueron " te veo mañana, 8 en punto en tu casa", le había dicho amity manteniendo ese tono de voz neutral al que aún no lograba acostumbrarse del todo, ella ni siquiera le había dado la oportunidad de hablar simplemente se dio la vuelta y camino hacia su auto negro.

La morena comenzaba a pensar de nuevo en qué clase de infierno sería ir con amity Bligth a la escuela, claro antes estudiaban juntas, pero el tiempo compartido era mínimo a comparación del que tendrían que verse ahora la pálida y arrogante chica que aveces no lograba soportar  la llevaría a la escuela y la acompañaría de vuelta a casa.