Todavía

Capítulo 03 Final

Y cuando la abrí, Betty abrió los ojos extremadamente aturdida, la oficina se encontraba idéntica a la última vez que estuvo allí, sin sacar ni un alfiler de su sitio.
B:__Es...es...exactamente...exactamente igual que la última vez que estuve aquí (habló con dificultad debido a la emoción que la había embargado al entrar lentamente en el lugar donde pasó la mayor parte de su vida durante un año)__Incluso el olor, siento el mismo olor...a papel, a moho mezclado con una esencia que puse...(se calló al observar que la misma esencia estaba en el mismo lugar, junto al viejo ordenador)__Claro, la esencia está aquí...¿alguien cambia?
A:__Ahora que trabajo aquí, la cambio yo, pero antes era Aura María.
B:__¿Por qué Armando? ¿Por qué no ha cambiado esta oficina? ¿Nadie la há cambiado.
A:__Nadie... yo lo prohibí... cuando yo no estaba, Aura María se encargaba de cuidarla, de mantenerla limpia de cambiar la esencia, de cambiar la vela...
B:__¿Incluso la vela?
A:__Sí, mira (mostré la vela que estaba sobre la mesa)__está apagada porque nadie se queda el fin de semana, pero normalmente la tengo encendida.
B:__¿Por qué? (Me preguntó con los ojos brillantes por las lágrimas que amenazaban con salirse)
A:__Seguí con mi vida, desde esa puerta hacia afuera, pero en esta oficina viví los mejores días de mi vida, aunque no hayan ocurrido aquí, pero esta oficina es como un símbolo del amor más puro y entregado que pasó por mi vida (sabía que me refería a ella, tanto que no se atrevía a mirarme)__y además, en la última conversación que tuvimos, me dijiste que eras feliz aquí y que te quedarías con los buenos momentos, así que quería dejar esta oficina una personificación de esos buenos momentos.
Se sentó en su vieja silla y lloró copiosamente dejándome una angustia que me apretó el pecho.
A:__Perdón Betty, perdóname... no quise hacerte sufrir, no quise hacerte recordar cosas malas.
B:__Sí, estoy recordando todo lo que viví aquí, pero las lágrimas no son de dolor.
A:__¿No? (Pregunté angustiado)
Se levantó de la silla y se dirigió al armario que tenía a su espalda y deslizando el dedo por el mueble me dijo.
B:__ He superado todo lo malo que me pasó no solo aquí en ecomoda, sino todo lo que me pasó durante mis 27 años antes de salir de Bogotá y superar no significa olvidar sino que esos recuerdos no te traigan más dolor. Mis lágrimas Armando (caminó hacia mí)__son de emoción, de sorpresa... No esperaba que mantuvieras todos estos recuerdos tan vivos.
Me levanté y me acerqué aún más a ella.
A:__Es la forma que encontré para seguir vivo. (Y luego me sorprendió con lo que me dijo)
B:_Perdóname, no quería que sufrieras.
No pude resistirme y la abracé, ella se dejó llevar por mi abrazo, pasando sus brazos por mi cintura y dejando su cabeza sobre mi pecho.
A:__Shiu, no tienes que pedir perdón por nada (hablé mientras le acariciaba la espalda y le besaba el pelo)__ No hay razón para seguir volviendo al pasado (se limitó a asentir con la cabeza, mientras me abrazaba aún más fuerte).
Permanecimos así en los brazos del otro durante unos momentos en silencio, dejando que sólo se comunicaran nuestros toques, nuestras caricias. Hasta que sin quitar su cara de mi pecho interrumpió el silencio.
B:__Armando, ¿recuerdas que cuando me pediste que estuviéramos juntos te dije que aún no estaba lista? (Al escuchar esto un escalofrío recorrió mi cuerpo haciéndome temblar)
A:__Por supuesto que lo recuerdo (me limité a decir, sin soltarla y sin dejar de acariciar su espalda)
B:__Sé que no tengo derecho a preguntarte nada (un torbellino de emociones me sobrecogió preguntándome qué pretendía con esta conversación)__después de todo quería distanciarme y este distanciamiento duró mucho tiempo, pero...(se aferró aún más a mí y se detuvo, y al sentir que le costaba terminar, la ayudé)
A:_¿Pero qué Beatriz? (Pregunté con el corazón en la mano... ella se apartó un poco para mirarme, y con sus ojos en los míos, esforzándose por no temblar de nerviosismo, continuó)
B:__Yo... yo... sólo quería decir que estoy lista... (Habló de una manera tímida que pronto me demostró que a pesar del tiempo mi tímida e inocente Betty seguía ahí... al terminar de decir lo que a mí me pareció las campanas del cielo, se volvió a pegar a mí, escondiendo su cara en mi pecho como una niña avergonzada, no pude contener mi sonrisa de satisfacción y esperanza. ...estaría diciendo que está dispuesta a construir una vida conmigo? Está preparada para por fin estar juntos... Necesitaba estar seguro, necesitaba oírlo de sus llabios).
A__ Beatriz, ¿para qué estás preparada?
B:__Ai Armando (murmuró sin querer mirarme)
A:__Por favor, dime, necesito entender. (Agarrando su cabeza y haciendo que me mire)
B:__Sé que no tengo derecho a preguntarte nada, (empezó a hablar de forma nerviosa y desenfrenada) porque cuando me pediste que estuviéramos juntos no quise...estaba muy dolida y había muchas inseguridades...tenía miedo de no poder mantener una relación sana...(estaba vibrando con todo lo que escuchaba, sí...quería estar conmigo...intenté interferir en su discurso)....
A:__ Betty...(pero no me oía y seguía hablando)
B:___También sé que ha pasado mucho tiempo y que has rehecho tu vida... así que lo entenderé....
No la dejé terminar, al ver que no se callaba en un impulso la besé, al principio sólo pegué mis labios en los suyos con la intención de hacerla callar, pero ese simple roce me hizo estremecer, sentí en sus labios una sonrisa y sutilmente la atraje más hacia mí haciendo que nuestras bocas se abrieran, todo mi cuerpo traía vibraciones inexplicables, aquellas deliciosas sensaciones de mariposas em el estómago que nos hace sentir más vivo que nunca. Envolví su pelo entre mis dedos y profundicé más el beso, nuestras lenguas se disputaban el dominio de nuestras bocas, y estas luchaban tenuemente mordiéndose en los labios. Mis manos enredadas en su cintura la acercaban a mí, mientras las suyas recorrían mi cuello y de vez en cuando rozaban sus dedos por mi pelo con la misma intención que la mía, unirnos aún más, como si eso fuera posible ya que estábamos tan atados que parecíamos ser uno solo.
La necesidad de respirar nos hizo separarnos, y de forma disimulada volví a la conversación de antes...
A:__Doctora (hablando con mucha dificultad debido a la agitada respiración)__ lo siento, pero necesitaba interrumpirte (asintió y mirando directamente a mi boca me volvió a besar apasionadamente y obviamente me perdí en su boca, casi olvidando por dónde iba)
A:__Doctora (de nuevo con la respiración agitada) __Siento interrumpir algo tan maravilloso, pero me decías que no tenías derecho a pedirme nada...(se apartó temiendo lo que iba a decir, sin embargo volví a tirar de ella y la dejé pegada a mí)__Quiero escuchar a Betty (mirándola a los ojos, mientras dibujo su cara con la punta de los dedos)__¿Qué me pedirías?
B:__Para que te quedes conmigo...Quédate conmigo Armando...(sonreí mientras lágrimas de felicidad recorrían mi rostro).
A:__Es lo que más quiero en esta vida Beatriz (hablé despacio)__Hoy te amo mucho más que hace años, hoy te deseo mucho más de lo que nunca quise (al decir esto me incliné contra ella haciéndole sentir mi excitación que desde el roce de nuestros labios me dominaba, se estremeció, se mordió los labios inferiores y me volvió a besar)__Eres mi vida Betty (hablé con mis labios pegados a los suyos)
B:__Y tú eres la mía, yo nunca (con sus labios aún pegados a los míos, pero con los ojos abiertos mirándome a los ojos)__nunca dejé de amarte, te amo más que a nada y estoy seguro de que quiero seguir contigo...(no la dejé terminar, la envolví en otro beso alucinante, con deseos aflorados, nuestros cuerpos al fundirse aún más hablaban por sí mismos)__ámame rmando, ámame...quiero ser tuya....
Desesperado con estas palabras comencé a desvestirla, primero el abrigo que fue arrojado al suelo como objeto indispensable, pronto en una aflicción intenté deshacerme de su blusa de cuello alto que me impedía tener acceso a su cuello... ella se puso de espaldas pegando su cabello a un lado y mostrándome el camino...
B:__tienes que descomprimirlo amor....
Rápidamente empecé a bajar la cremallera de ese accesorio que me molestaba porque obstaculizaba el acceso a su piel, y mientras se mostraba con mis dedos y labios fui saboreando esa suavidad haciéndola vibrar con mi tacto, cuando la cremallera llegó al final cerca de sus caderas, giré su frente y me di cuenta de que no llevaba sujetador, sus pechos tan hermosos y torneados estaban frente a mí y me invitaban a disfrutar de ellos .... hechizado por su belleza empecé a besarla con delicadeza primero en la boca, para luego bajar por su cuello y su regazo, y cuando mis ojos estaban a milímetros de esta parte tan femenina de su cuerpo, volví mi mirada hacia la de ella, y luego con la punta de mi lengua hice dibujos sobre la areola y luego sobre el pezón, mientras que con la otra mano lo sostuve posesivamente, los gemidos que imprimía en ese momento me excitaban aún más haciendo que chupara uno a uno sus pechos como si fuera la necesidad más urgente de mi vida, mi cuerpo ardía de deseo y aún intentando controlarme bajé lentamente por su abdomen poniéndome de rodillas frente a ella. Y allí, en esa posición, levanté la cabeza para volver a mirarla a los ojos.

B: Termina de desvestirme amor (me pidió con una mirada suplicante de deseo).
Y obviamente obedecí, le quité las botas y luego le desabroché el pantalón que se pegaba a su cuerpo y acentuaba aún más sus curvas, era tan hermosa, tan sensual, que parecía un espejismo.
La miré vestida sólo con una pequeña pieza íntima y la adoré, arrodillado allí ante un monumento de mujer, mi mujer, la mujer de mi vida, y siguiendo los impulsos de mi cuerpo la volví a besar o más bien la devoré con locura.
B:__espera (oí su voz ronca por la emoción)__Todavía estás vestido y eso me pone en desventaje.
R:__Tienes razón mi vida, ¿me ayudas? (Ella sonrió y repitió ese gesto que me vuelve loco, se mordió el labio inferior y entre besos y caricias en un instante me dejó con un solo bóxer y cuando sentí su mano tocando mi erección encima de esa pequeña tela, no pude contenerme, la tomé en mis brazos y la acosté sobre nuestras ropas que formaban una "cama" en el piso de esa pequeña oficina, sin dejar de besarla con mis manos me deslicé por todo su cuerpo, Llegué a sus caderas y tiré lentamente de su ropa interior, ahora estaba completamente desnuda y era el espectáculo más hermoso que mis ojos podían ver, mis planes eran saborear cada parte de su intimidad, y hasta lo intenté, pasé mi lengua por toda su longitud haciendo que se estremeciera y entre gemidos pronunciara mi nombre, fue suficiente para que perdiera el control, mi excitación y mi deseo por ella ya me estaba causando dolor y con una voz entrecortada le supliqué.
A:__Mi vida no puedo más...
Y levantó un poco su cuerpo para sostener mi cabeza y con un ligero beso en mis labios dijo
B:__Estoy lista para ti...
No fue necesario que terminara su discurso, en un instante la penetré, haciéndola gritar...
A: ¿Te he hecho daño, amor? (Me preocupé)
B: No...
Habló tan bajo que casi no la oí, porque estábamos embriagados por una corriente de éxtasis que nos dominaba sin que nos hubiéramos movido, durante unos segundos estuve dentro de ella sintiendo los escalofríos en nuestras pieles provocados por tan intensa conexión, nuestras miradas no se apartaron ni un segundo la una de la otra, a través de ellos podíamos entender lo que el otro quería y así los dos al mismo tiempo empezamos a movernos lentamente y la energía que salía de su cuerpo y entraba en el mío me hacía aumentar cada vez más mis movimientos y así todo ese ambiente estaba dominado por nuestros gemidos y susurros en un intento de declararacion y en una pérdida total de mi control aceleré mis movimientos lo más rápido que pude y vi como ella se contorsionaba dominada por el ápice que ambos alcanzamos. Sin fuerzas por la intensidad del momento derrame mi amor en ella y con una placentera sonrisa me acogió entre sus brazos y así permanecimos unos instantes disfrutando el uno del otro.
A:__Amor (balbuceé mientras la acariciaba)__suena muy cursi si digo que soy el hombre más feliz del mundo.
B:__Entonces somos dos cursis mi vida, porque yo también soy la mujer más feliz del mundo.
A:__Te amo tanto mi Betty...
B:__Yo también lo amo Dr. Mendonza
Nuestros labios volvieron a tocarse, ahora más como un juego que como un beso, ella dibujó burlonamente con su lengua el contorno de mis labios y cuando intenté besarla lo esquivó con una sonrisa divina. Mi cuerpo ya respondía a este juego completamente excitado y cuando por fin involucré mi boca con la suya oímos sonar un teléfono...
A:__Esta vez no es mío doctora (hice referencia a todas las veces que ella y yo fuimos interrumpidos por el timbre de mi teléfono)
B:__Es mío...tengo que contestar que puede ser mi hija....
A:__Sólo por eso te dejo ir (le di un rápido beso y se levantó para contestar el insistente teléfono móvil)
En ese momento, cuando la vi levantarse completamente desnuda sin ninguna vergüenza, totalmente segura de sí misma, pude entender el bien que le hizo la vida. Sabía que me la estaba comiendo con los ojos, sentía mi mirada recorriendo cada milímetro de su cuerpo, y eso no le molestaba, al contrario, se deleitaba con mi mirada y eso me volvía loco, mi Betty me tenía totalmente rendido, sea con su forma tímida como me había mostrado anteriormente o ahora con esta sensualidad que desbordaba por sus poros. Enloquecido por esa visión y acordándome de mis primeros planes la abracé mientras seguía hablando por teléfono, y no era com su hija sino com  Dom Hermes, la conduje e hice que se acostara de nuevo en nuestro nido de amor, ella al volverse hacia mí y previendo lo que pretendía hacer hizo uma señal de negativo com los dedos, solo sonreí y con sutileza abrí sus piernas y deslicé suavemente mi lengua primero por sus muslos para pronto llegar a su intimidad, al principio la bese como besaba sus labios lenta y cuidadosamente, luego deposité pequeños mordiscos, haciendo que se moviera y tratara de librarse de mí para terminar la conversación con su padre. ...me divertía ver cómo se ponía la mano en la boca intentando ahogar sus gemidos y se inventaba excusas para responder a las preguntas de Don Hermes...
B:_Mi respiración es agitada porque estaba paseando a papá...
Nuevamente puso su mano sobre sus labios y alejó un poco el teléfono, porque aún con esa barrera sus gemidos salían obstinadamente... Había profundizado mis acciones, la lamí lenta y profundamente ella arqueó sus caderas diciéndome que quería más y con la poca calma que aún le quedaba se deshizo de esa incómoda llamada, para luego soltar un grito que me hizo estremecer...
B:__Te voy a matar Armando (hablaba amenazante, pero completamente entregada al momento)
Y me encantó verla retorcerse y gemir, pronunciando mi nombre... No pude aguantar más, entré en ella ....
A:__Máteme me vida...(Sonrió y en un giro de 180 grados se puso sobre mí)
Sentí que en ese momento alcanzaría el cielo, la visión de Betty sobre mí, levantando la cabeza y echando el pelo hacia atrás era la perfección en forma de mujer, ella se contrajo y se movió como en una danza extremadamente sensual, yo sólo gemí y levanté mis caderas contra ella, era mi turno de casi sin aire pronunciar su nombre, yo estaba extasiado, delirando y ella tenía plena conciencia de lo que hacía, y en un alucinante vaivén contrayéndose sobre mi miembro una vez más juntos llegamos al más elocuente orgasmo que hasta entonces no habíamos experimentado. Cansada, se dejó caer sobre mí, la acomodé en mi pecho tratando de calmar mi respiración y fue entonces cuando escuché lo que nunca pensé que escucharía de sus labios y tuve la certeza de que hay algo superior que nos cuida y nos protege y que no hay tormenta que un día no llegue a su fin.
B:__Armando, ¿quieres casarte conmigo?
No pude contestar, estaba totalmente tomado por la emoción, mis lágrimas resbalaban por mi cara y sacudían mi pecho haciendo que ella levantara la cabeza y me mirara...
B:__¿Esas lágrimas significan un sí? (Me preguntó con los ojos empañados)
A:__Me casaré contigo en el momento y hora que quieras mi vida...gracias Betty (la llené de besos) gracias por llenarme de luz...quiero pasar el resto de mis días a tu lado...te amo.
B:__Yo también te amo (besos)
Pocos días después Betty necesitaba volver a Alemania, para empacar sus cosas, vender la casa, el coche y otras posesiones que tenía, obviamente me fui con ella y aprovechamos para anticipar nuestra luna de miel en un corto viaje por Europa. La empresa para la que trabajaba no quería perderla, así que la trasladaron a una sucursal en Bogotá.
Yo quería que volviera a trabajar conmigo en ecomoda, pero ella prefirió no mezclar las cosas y yo la respeté.
Meses después viajamos a Cartagena para celebrar nuestra boda en la playa, un viejo sueño de mi Betty.
Nuestros hijos caminaron juntos por un maravilloso pasillo rodeados de flores hasta el altar producido en la playa, había tanta unidad entre ellos que parecían hermanos de sangre.
Betty y yo estábamos seguros de que habíamos nacido el uno para el otro y estábamos dispuestos a compartir una vida basada en el amor, el respeto y la confianza.
Fin.