Capítulo 13

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Derrick extendió una mano hacia mí y me levanté con mi vestido sostenido con mis manos.

'¿Comiste algo raro?'

Con los ojos muy abiertos, lo miré fijamente mientras intentaba escoltarme.

—¿Qué estás haciendo? ¿No vas a bajar?

Volví a mis sentidos y miré a mí alrededor. Las miradas de los nobles que también acababan de llegar apuntaban en esta dirección.

—Gracias.

Me apresuré a tomar su mano y bajé del carruaje. Con mi mano sobre la suya, subimos las escaleras hasta el salón de baile.

—¡Entrando Lord Derrick Eckart y Lady Penélope Eckart de la Familia Eckart!

La puerta gigante del salón de baile se abrió tras el fuerte grito del sirviente.

—No seas imprudente.

Las frías palabras de Derrick llegaron a mis oídos.

—No has olvidado que tu tiempo de castigo acaba de terminar ayer, ¿verdad?

—...

—Si vuelves a hacer un escándalo, entonces no terminará solo con eso.

Mis sentimientos de emoción desaparecieron con sus palabras. Quería responder a sus desagradables palabras, pero me contuve.

—Está bien, tendré cuidado.

Puse mi mejor esfuerzo en poner una sonrisa mientras hablaba. Después de mi respuesta, Derrick apartó su rostro de mí.

'Tsk'.

Chasqueé la lengua en silencio cuando no estaba mirando.

La fiesta celebrada en el palacio transcurría sin problemas. En otras palabras, era muy aburrida. Justo después de que entramos, Derrick se apartó de mi lado y ahora estaba ocupado saludando a otras personas. Comparado con eso, no había nadie acercándose a hablar conmigo. Parecía que los rumores de mí haciendo un escándalo tuvieron un gran efecto.

Miré a mi alrededor para ver a las nobles damas de la edad de Penélope bailando y susurrando en grupo. Observé la escena desde un rincón donde no pasaba mucha gente.

'No soy solitaria'.

Esto definitivamente no era lavado de cerebro. De verdad. Tenía una razón clara por la que había venido aquí, y podría ser capaz de escapar de este horrible lugar si tenía éxito.

'¡Ah! ¡¿Cuándo viene ese maldito Príncipe Heredero?!'

Más personas me miraban y cotilleaban sobre mí a medida que pasaba el tiempo. Cuando pensé que había llegado al límite de observar todas esas miradas...

—Entrando Su Majestad la Emperatriz y Su Alteza el Segundo Príncipe.

Finalmente era el comienzo del evento real que sucedía en este capítulo del juego.

Todos los nobles que se reían y hablaban, se inclinaron arrodillándose en el suelo frente a la entrada. También me incliné, siguiendo lo que todos los demás estaban haciendo.

La Emperatriz y el Segundo Príncipe caminaron con poder en una postura de confianza por la alfombra roja y parecía que estaban diciendo "Somos la realeza". El cabello dorado que era el simbolismo de la realeza resplandecía bajo la luz brillante del salón de baile.

Cruzaron el salón hasta las escaleras, luego subieron. Al final estaban los asientos donde solo los miembros de la Familia Imperial tenían derecho a sentarse. Mientras observaba toda la escena, me sorprendió ver al Segundo Príncipe sentado en uno de los asientos.

La muerte es el único final para la villanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora