Vigilantes

El Inmortal contra el Invencible

Luego de esta repentina aparición empezaba el duelo que realmente lo cambiaría todo, un duelo donde el verdadero Azael saldría a la luz liberando toda su fuerza, pero dejando consigo toda su humanidad.

El invencible empezó su ataque sin dudarlo siquiera y sin dejarle a Azael tiempo de procesar lo que estaba ocurriendo, era abrumadora la fuerza del rival y el rey no podía hacer mucho frente a este tren que estaba embistiendo con toda su fuerza por sobre el joven líder Akuma. Viéndose opacado ante tal fuerza física y capacidad de combate, el inmortal se preguntaba a sí mismo si es que realmente sería capaz de proteger a los suyos, si sería capaz de proteger a sus queridos amigos. Aún así sin pensarlo el Akuma siguió peleando dándolo todo por mantener a salvo a sus amigos, sus compañeros, su familia.

Era brutal la paliza que estaba recibiendo Azael, nadie nunca se lo hubiera esperado, ver al rey inmortal tan indefenso, perdiendo de una humillante manera, pese a haber desaparecido durante un tiempo solo para entrenar.

-Me temo que el inmortal no es tan inmortal después de todo -comentó burlón el Invencible mientras seguía con la humillación.

Azael estaba cansado y herido, apenas resistiendo, era cuestión de tiempo para que la Akuma perdiese, pero fue en ese momento, postrado de rodillas frente a su rival, esperando la inminente derrota cuando nuestro líder cerró los ojos y se preguntó a sí mismo:

-¿En qué momento limité tanto mi fuerza? ¿Seré capaz de cuidar de los míos en este estado?

El Invencible confundido ante la situación solo aprovechó para terminar rápido con esta pelea, pero Azael abrió los ojos y con una mirada perdida logra atrapar el golpe del Invencible poco antes del impacto y desde esa posición, de rodillas frente a su rival devuelve 3 patadas seguidas directo a la cabeza del Invencible, dejándolo confundido y mareado, Azael arremetió con todo su potencial desatado solo con el fin de vengarse, durante el contraataque le rompió un brazo y una pierna al Invencible. Sin pudor ni preocupación alguna siguió con la paliza hasta que el invencible colapsó por el dolor, quedando victorioso frente a la Akuma quienes lo veían extrañados porque no reconocían a su líder.

Luego de su victoria contra el Invencible, se dirigió con Vocub en brazos a donde estaban sus demás compañeros luchando y les ordenó que se retiren y que se lleven a Vocub, que él se encargaría de esto.

Los Akumas exhaustos y heridos no entendían el porqué de esta petición del líder, pero se retiraron llevándose a los heridos. Mientras que Azael con una siniestra expresión en su rostro, se plantaba frente a los rivales restantes para continuar su pelea y quedarse con la victoria para la Akuma.

Estando solo frente a sus rivales, Azael con una mirada perdida y vacía se dirigió a pelear contra estos fuertes rivales, quienes no serían nada fáciles de vencer, pero el rey estaba desatado, dejó salir toda la fuerza que tenía dentro, pero con un costo y ese costo era su humanidad y raciocinio, ahora solo buscaba herir a sus oponentes. La pelea fue una batalla ardua y exhaustiva, pero Azael salió victorioso a costa de su humanidad y se dirigió a buscar las cadenas de Duman.

Fue una tarde larga y silenciosa, nadie sabía que había sido de su líder y todos estaban en el refugio preguntando si Azael estaba bien.

-Han pasado 3 horas desde que nos fuimos, tenemos que volver por él, no debimos haberlo dejado solo peleando -comentó enojado Vocub.

-Opino lo mismo, tenemos que ir a buscarlo, ellos eran unas bestias y Azael estaba herido -añadió Jun viéndose interrumpida por una sombra que entraba al refugio.

-¿Acaso no confían en la fuerza de su líder? -preguntó Azael mientras tiraba de unas cadenas.

Azael estaba completamente sucio y traía consigo encadenado a Duman y al Invencible a modo de premio. Frente a esto los miembros de la Akuma quedaron paralizados por la situación y por la extraña actitud de su líder a quién no le parecía raro.

Esta victoria les traía un mal sabor de boca por la nueva faceta siniestra de su líder, pese a esto la Akuma celebró su victoria mientras Azael se preparaba para darles una noticia que los sacaría de lugar a todos y donde tendrían que decidir qué hacer con la Akuma.

Al día siguiente se convocó una reunión en el refugio Akuma, donde Azael daría un discurso mientras exhibía sus premios de pelea, pero al llegar Lorcan este los liberó desatando así la furia de Azael.

-¡¿Cómo que los liberaste?! -gritó enfurecido el líder.

-¡Tenía que hacerlo, ¿acaso crees que es normal tener como premio encadenadas dos personas heridas?¿Qué sucede contigo Azael?!

La discusión estaba escalando cada vez más y más, sin saber cómo calmarlos y para evitar que este conflicto separe la Akuma, el consejo trató de interferir sin éxito, pero cuando Azael y Lorcan estaban listos para pelear, la llegada de Alya apaciguó al líder

-¿Qué pasó acá? -preguntó extrañada la joven.

-Que te explique Azael, yo me retiro de acá -respondió enojado Lorcan mientras salía del lugar.

Luego de esto ya más calmado Azael y con la Akuma lista para escuchar el discurso, el joven se dirige en medio de todos sus compañeros y con tristeza se prepara para su discurso.