Extra

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Esta escena es anterior a la del primer capítulo, ocurre durante la primera línea de tiempo.



























































































— ¿a Koebi-chan le gustan las flores? — se preguntó Floyd en voz alta, estaba en el laberinto de Heartsbyul mirando los arbustos repletos de rosas blancas— mmm~ pero todas son blancas, que aburrido, no van con Koebi-chan — decidió que lo mejor era marcharse, pues escuchó como el líder pelirrojo le gritaba a sus estudiantes por robar la tarta de cerezas que había hecho vicelíder de cabello verde, Floyd quería irse, el más bajo jamás se entraría que fue el, la llevaba en mano para compartir con la chica, era uno de los que conocía el secreto de su género— Jade dijo que a Yuu le gustaban los dulces~.

Posteriormente fue al jardín de Pomefiore, llevó unas hortensias para darle a Yuu, las arrancó rápidamente ya que no se quería topar con el cazador rubio y mucho menos con el líder de ese dormitorio, obviamente escogió las flores en mejor estado, no quería más que darle lo mejor a Yuu.

Esta era una de las pocas veces que Floyd podía sonreír con inusual sinceridad, no podía aguantar ver los ojos rosados de la chica enmarcados por los traviesos mechones castaños rizados de su melena, adoraba darle todo para que le dedicara aunque sean unos segundos de su mirada amorosa.

— ¡Ya se lo quiero decir a Koebi-chan!

Este era el día indicado, se sentía más que preparado, hasta emocionado, sin embargo, el no esperaba lo que venía.



























































































































































































































































































































—¡ Bind The Heart!

El fuego desapareció de los pulmones de la chica, respiró el aire inundado de cenizas ignorando por su llanto lleno de tos el caos que había a su alrededor, la forma corrompida de Grim soltó un alarido de dolor antes de golpear con sus afiladas garras al joven que había liberado de su control a su compañera dejándolo arrastrar varios metros hasta llegar de forma sangrante hasta ella.

— ¡Floyd! — gritó preocupado su gemelo al verlo desfallecer al igual que sus otros compañeros, ignorando el dolor punzante en todo su cuerpo llegó hasta el y lo tomó en brazos sin querer lastimar lo más de lo que ya estaba.

— camaroncito ya es libre Jade — Floyd sonrió enormemente a pesar de la cantidad de sangre que recorría el costado de su rostro— debemos...hacer...algo.

Por cada palabra fue perdiendo su fuerza al igual que varios, ya no podía hacer nada.

Lo último que podía ver era el rostro angustiado de su gemelo, debe estar pasando un mal rato por su culpa ¿no? Floyd esperaba que Jade no odiara a Yuu, que la ayudara, que comprendiera el por que el tanto la amaba como lo amaba a el.

Lamentaba no poder pedirle perdón, lamentaba ser cobarde y no decirle antes a Yuu cuanto la quería, lamentaba dejar a las dos personas que más llegó a amar.

¿Fui un mal hermano, Jade? ¿ Podría cambiar algo? Por favor...vivan por mi, ayudala, se que ella si pudiera, te ayudará a ti también.

Esos habían sido los últimos pensamientos de Floyd, antes de caer en un fin, el fin de este tiempo.

Rҽʂƈυҽ //Twisted Wonderland//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora