Muchos dicen que la mente guarda los mejores recuerdos de tu vida, y más de tu infancia.
Pero ¿Que pasaría si no tienes recuerdos algunos?
Lo único que sabes es que en este mundo, el más débil perece y el más fuerte goza.
En un mundo donde existen c...
Para la extranjera le es desesperante estar escuchando los gritos de los histéricos padres del chico, la insultan a diestra y siniestra, la Abiodun sabe pero solo se queda callada. No debe contestarle a los mayores, más si no los conoce del todo, sería como levantarle la voz a Alessandro. Hunter maulla irritado por los chillidos de los molestos humanos, con sus patitas presiona sus orejas para bloquear el sonido.
-¡No piensas decir nada, muchacha insolente!-La madre se acerca con intenciones de darle una lección.
-No debo levantar la voz a mis mayores...-Suplementa con silencio.
-¿¡Te crees muy chistosa!?-El padre la toma del brazo, su delgado brazo, y la jalonea fuertemente. Yuki, que estuvo en silencio como testigo y prefecta al igual que Zero, se pone a la defensiva pero basta con una mirada de Zero para saber que no debe meterse.
Hunter se eriza y le gruñe.
-Le voy a pedir de favor que suelte a la señorita, en este instituto no se permite tocar a nuestras señoritas.-El director Cross deja su sonrisa pero es sombría.
-¡Esto es absurdo, us-El sonido de la puerta de la oficina siendo azotada interrumpe el grito del señor escadaloso.
Un moreno, de ojos ámbar, vestido de cuero entra de una manera finura, con su cabello atado en una cola baja, dejando algunos rizos a los lados, con una sonrisa no muy contenta.
-Alessandro-San, es un gusto tenerlo por aquí.-Dice el ex cazador, por fin puede suspirar del alivio.
-Digo lo mismo,pero me hubiese gustado que fuera de otra manera y no de esta absurda escena.-Se disculpa poniendo una mano en su pecho y negando con su cabeza.
-¿Y usted es?- El molesto señor arquea una ceja con los brazos cruzados.
Sin embargo el moreno le pasa de largo, primero está su caramelito. Va hasta la degradada para tomarle los cachetes y revisar su cuerpo para verificar que no tenga alguna herida.
-¿Qué sucedió, cariño?-Le pregunta aún con sus grandes y cálidas manos, Michelle se acerca más a el calorcito que desprende el moreno.
-Fue mi culpa, le agredi porque me abrazo por los hombros...-Murmura en bajo, no por sumisión, sino, porque tiene sueño.
Alessandro asiente para cerrar los ojos. Y echar un suspiro al aire para darse la vuelta con los molestos padres de familia del muchacho.
- No se preocupe, mi niña tendrá un castigo pero que sea la última vez que su hijo toca a mi pequeña, nadie la toca sin llevarse un golpe.- Alza su mano esperando a que sea estrechada por la cabeza de la familia del chico. La mirada ámbar del moreno intimidó al señor, de su cien baja una gota de sudor frío y acepta el apretón de manos, llevándose la sorpresa de la fuerza del moracho.
-U-Uh, eso espero, o regresare para darle una lección a esa niña.- Disimuladamente acaricia su mano adolorida.
Alessandro dice algo en otro idioma que hace que la niña gato asienta y se levante de la silla, se acerca al chico que retrocede un poco. Pero se asombra cuando la de ojos ámbar toma su mano para acariciarla un poco y dejarle un dulce.
-Siento mucho haberte lastimado, no fue intencional, es un...reflejo de mi parte. También pido disculpa a ustedes por el tiempo que perdieron esperando a mi tutor. -Se disculpa en general, la madre del chico está admirando la belleza del moreno. Nunca había visto a un hombre tan hermoso y exótico como lo es el moracho.
Con unas cuantas palabras por parte del director se marchan. Al fin.
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Michelle está con la cabeza gacha, Alessandro sentado en la silla que anteriormente estaba está. Un silencio se formó de la nada, Yuki pasa saliva y Zero espera la reacción del moreno. Hunter se restriega en las piernas de la pálida tratando de darle ánimos.
Cross toma de su tacita de té, tiene una idea de como va a reaccionar su amigo.
-Perdón Alessandro te hice venir desde muy lejos hasta aquí y en mar...Se que odias el mar..- La risa escandalosa del Pedro hace caer a Yuki, Zero suspira.
-" Otro loco...genial."- piensa el albino.
-¡No estoy enojada caramelito!-Se levanta dejando ver su gran estatura. Para darle palmaditas suaves a la espalda de la pálida.-Hubiera dado muchas piedras preciosas para ver la cara de los finurris esos cuando le diste la paliza a uno de ellos.-
-¿Que?-Yuki ríe nerviosa, pronto Michelle frunce el ceño y infla sus cachetes.
-Tú...hiciste una apuesta de mí...¿O me equivoco, Pedro Alessandro López de las rosas?-Lo vez como lo ve Richard cuando hace algo malo. Un escalofrío pasa por su espalda al ver la mirada chupa almas.
Pronto comienza a jugar su cabello.-¿Yo, apostar de mi linda y tierna hermanita? No, No, No,no, como crees...-Silva para salvarse.
-¿Cuanto?-Dices con hunter en tu cabeza.
-lares...-Murmura muy bajito, y haces tu jugada, sueltas toda el aire que tienes contenido y sueltas un sollozo falso para que este te mire.
Y su corazón se detiene.
Ahí en una esquinita estás tú con lágrimas en los ojos, el labio inferior sobresaliente y los ojos de gato chillón hace que tenga cierta debilidad a ello.
Siempre ha sido así, desde niña, cuando querías algo sólo lo señalabas y hacías esas carita.
-¡Ay mi niña, lo siento aposté 200 dólares con Bae!- Te abraza alzandote y restregando su mejilla con la tuya.
Yuki pide tiempo fuera, ya no entiende nada. Pero de algo está segura, su cazador favorito (y el de Zero) está abrazando a su nueva amiga.
-Eh...disculpen que los interrumpa pero...¡Usted es chichilkuali-San!-Chilla emocionada, Alessandro deja de darte amor para bajarte y darte un dulce para que no lo mates, no te gustan los abrazos.
Infla su pecho y se autoseñala con su pulgar.-El mismo que viste en televisión pequeña yuki.-Sonrie dejando ver sus caninos blancos.
-¿Cómo sabe mi nombre?-Ladea la cabeza con duda, pero feliz de que su modelo a seguir (además del director) conozco de su existencia.
-Oh, yo venía aquí cuando aún no era un instituto, te conocí así de chiquita.-Hace una medida con sus dedos índice y pulgar.-Tambien se quién es ese chico con cara de querer matar todo lo que tenga colmillos.
Tú lo golpeas en el estómago, siempre ha Sido así de confiansudo. Logras sacarle algo de aire, te iba a reclamar pero mejor guardó silencio cuando vio sus ojos.
Yuki celebra en su interior, tal vez no lo recuerde a él de niña pero Alessandro si lo hace, y eso es un logro.
-Lo recuerdo, es un gusto verlo de nuevo chichilkuali-san.-Hace una pequeña reverencia con su cabeza.
-Oh, por favor, llámenme por mi nombre Alessandro.-Sonrie y tú ruedas los ojos, el pobre de Cross se deprime porque le robó a sus "hijos", tú te acercas a él para palmearle la cabeza suave.Como solía hacer Freugart de niños cuando te molestaban.
-No se preocupe, le gusta presumir.-Tratas de consolar al mayor. Este tiene lágrimas en sus ojos y asiente.
-Gracias Michelle-Chan, eres muy amable.-Se suena la nariz con un pañuelo que le diste.
-Miau.-Hunter se abstiene de hacer algo o "decir" algo.
-Ah, te manda esto Freugart.-Te da un regalo envuelto en un bonito papel de regalo, con gatitos en el.-En cuento supo que venía para aquí contigo, investigo el clima de aquí y te mando algo para que te abrígues bien. Según él, no quiere que te enfermes, está enamorado de ti ¿Lo sabes no?-El modo celeso del moreno se activa, tú lo ignoras para abrir el regalo. Es una hermosa bufanda que combina con la degradación de tu cabello con gatitos bordados en ella, un par de guantes y un gorrito con orejitas de gato.
Tus ojos brillan un poco, freugart sabe lo que te gusta.
