Nacido con la sangre del diablo (Un fanfiction de Harry Potter)

Luna llena e inesperada

(Notas del autor)

"GRITAR"
"Hablando"
'Pensamientos'
^acciones^
// efecto de sonido o flash//
*parseltongue*

ÚLTIMA VEZ

El tercer año fue diferente, ese año conoció al amigo de su padre, Remus Lupin, que resultó ser un hombre lobo, y a su padrino Sirius Black, que había escapado de Azkaban sólo para venir a buscar a Peter Pettigrew, que resultó ser la rata de Ron. Ahora estaba de vuelta en la casa de los Dursley encerrado en su habitación que los Dursley le habían cedido tan amablemente (nótese el sarcasmo gente).

AHORA

Harry estaba sentado en su cama en el antiguo segundo dormitorio de Dudley después de haber sido encerrado allí por su tío... otra vez. No había hecho nada malo, había hecho sus tareas tal y como le habían dicho, había cocinado la cena y limpiado el jardín, y acababa de terminar de limpiar los platos después de la cena cuando su tío lo agarró bruscamente por el cuello de la camiseta y lo subió por las escaleras antes de meterlo bruscamente en su habitación, antes de gritarle que los jardines estaban en un estado horrible y que él lo había estropeado todo. Antes de decirle que no recibiría ninguna comida durante quince días, antes de encerrarlo rápidamente en su habitación. Aquí es donde encontramos a nuestro joven protagonista. Miró el reloj con una especie de aturdimiento mientras el reloj avanzaba. Un chillido llegó desde la esquina de la habitación y Harry se levantó y desbloqueó la jaula de su lechuza Hedwig antes de abrir su ventana y dejarla volar desde la ventana para que tuviera su ratito de libertad. Sólo deseaba poder hacer lo mismo.

Al recordar su rostro y su mente se nublaron de ira. Le contó a Ron lo de los abusos, al pelirrojo no le importó, se lo contó a Hermione, y ella dijo que hablaría con alguien al respecto... eso nunca ocurrió, habló con el profesor Dumbledore. Así fue la conversación:

Flashback

Harry había entrado en el despacho de Dumbledore y se sentó en uno de los sillones frente al director, el anciano miró al chico y le dijo "¿un caramelo de limón?", sus ojos brillaron. Harry declinó y dijo: "señor, me preguntaba si es posible que me quede aquí durante el verano". Dumbledore se sentó con la espalda recta y dijo: "Harry, muchacho, sabes tan bien como yo que la casa de tus tíos es el lugar más seguro para ti, ya que los pabellones de sangre te protegen". Harry miró su regazo y dijo: "Señor, ellos me maltratan y descuidan, por favor, no me haga volver allí". Dumbledore sonrió suavemente. El anciano se dio la vuelta y dijo: "No sirve de nada mentir, hijo mío, seguro que no hacen nada de lo que se busca, tienes que volver allí durante el verano y no, no puedes quedarte en una de las otras casas, después de todo, no tienen la misma protección que te proporciona la casa de los Dursley. Al fin y al cabo, es por el bien de todos que te mantenemos a salvo", tras lo cual Harry fue sacado del despacho.

Fin de Flashback

Después de pensarlo un rato Harry pensó que había algo en el viejo que no le gustaba, la sonrisa que le dedicó cuando le contó lo del abuso no era nada amable si no que parecía maníaco y loco. Mientras reflexionaba, Harry se sentó en la cama y el tic-tac del reloj le devolvió la razón. Miró el reloj y se dio cuenta de que sólo le quedaban 20 segundos para su cumpleaños 20...19...18 miró con ojos apagados mientras el reloj marcaba 17...16...15...14 se levantó y se dirigió a su armario y buscó una prenda mientras el reloj marcaba 5...4 ...4....3....2 sólo tuvo tiempo de colocar el objeto que cogió en la cama cuando el reloj llegó a la medianoche, es decir, a su cumpleaños, cuando un dolor punzante le atravesó el cuerpo, lo suficientemente fuerte como para hacerle llorar pero no lo suficiente como para hacerle gritar de dolor. El dolor se intensificó al llegar a la parte baja de la espalda y a los omóplatos, hasta el punto de que se desmayó por el dolor.