Capitulo I

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2018/02/12.

23:30 horas.

El teléfono sonaba haciendo desaparecer el silencio que reinaba en aquella habitación. Caminando con aquella calma que lo caracterizaba y silbando una canción que escucho en la radio, la poca luz que alumbraba en la sala hizo sombra a su cuerpo antes de tomar la llamada.

Sus hombros se tensaban cada segundo que pasaba, frunciendo el entrecejo, mientras su mano apretaba el phone en su oído cada vez más fuerte, soltó un suspiró apretando sus dientes hasta que le dolieron, terminó la llamada para darse la vuelta y caminar a paso rápido donde se encuentra su compañero.

-Paso nuevamente.

Dijo al llegar a la otra habitación, yendo a tomar su abrigo y accesorios.

-Es la tercera en este mes.

-Iremos a ver, en la llamada me dieron la dirección ... Vamos antes que lleguen los demás.

Los dos salieron dejando cerrado y las cámaras con la alarma encendida, trotando llegaron hacia el automóvil, saliendo a velocidad alta hacía su destino de la noche.

Cada qué pasaban los minutos, la calle se hacía más luminosa, chicos merodeando y bares en todas partes.

-¿Donde estamos?

-En el barrio nocturno.

-¿Nocturno?

-No es mucha ciencia darse cuenta, solo funciona en la noche, los bares, la gente viniendo a divertirse, tomar y quien sabe que otra mierda más.

Su compañero miraba a través de la ventana polarizada las calles, como se pasaban dinero, gente besándose con su mismo sexo y uno que otro prostíbulo con hombres y mujeres fuera de estos.

Al adentrarse más al lugar llegaron a un bar y junto a este un callejón cerrado por algunas cajas.

-Llegamos.

Bajaron juntos del auto para encaminar hacia la entrada, donde los esperaba una chica de pelo rojizo, sus ojos se connecton por unos segundos hasta que ella volvió su mirada al piso, soltó el aire que tenía retenido para hablar.

-Oficiales ...

-Blake, Oficial Damian Blake y mi compañero Elliot Wells

La chica los miro a ambos para asentir con su cabeza y mirar el piso nuevamente, quedó unos segundos en silencio antes de volver a subir la mirada.

-Yo ... síganme.

Salió del lugar para caminar hacia el callejón, sacando una caja para dejarles la entrada.

-Esta ahí, no puedo mirarlo nuevamente, es demasiado.

Decía mientras su cuerpo temblaba ante el recuerdo de aquella imagen, los oficiales entraron y con sus linternas en mano caminaron hasta el final de aquel callejón, cuando Elliot siente pisar algo.

-Mierda, está mojado aquí.

Alumbro sus pies, viendo aquel líquido en el piso, dejando manchado de un fuerte color.
Su mano fue subiendo la linterna, donde alumbraba de donde provenía aquel líquido.

-Lo encontré.

Le avisó a Blake antes de alumbrar hacia el contenedor de basura que estaba en una esquina.
Sus pies se movieron hacia el objeto para abrirlo, dejando salir un terrible olor.

Dos pares de ojos miraban hacia el interior, viendo el cuerpo inerte de un hombre, con señales de estrangulamiento.

-Es lo mismo que en los demás, ya no es coincidencia.

Elliot seguía sin decir palabra alguna, mirando aún el cuerpo sin vida, cubierto de basura a su alrededor, sus ojos negros abiertos sin rastro de ese brillo de vida.

-Elliot.

Wells parpadeó un par de veces antes de mirar a su compañero, quien lo miraba seriamente.

-¿Uh? ¿Qué paso?

Damian lo miro unos segundos más para caminar hacía la entrada del callejón.

-Llame a los demás, para que vengan por el cuerpo y tomen fotos de todo, iré hablar con la persona que lo encontró.

-Voy contigo.

Al entrar los dos al bar caminaron hacia una puerta con un cartel que ponía 'solo personal autorizado', golpearon la puerta y la misma chica de antes salió con una taza con café en mano.

-¿Podemos pasar?

-¿Es necesario?

-Mejor siéntense.

Damian quien se mantuvo en silencio en todo momento entro de último para cerrar la puerta y sentarse junto a Wells.

-¿Puedes decirnos lo qué pasó hoy?

La chica los miro a ambos para soltar un suspiró y dejar la taza en la mesa de vidrio que los separaba.

-Realmente hoy fue todo normal... bueno, hasta cierto punto, estaba trabaja...

-Queremos la historia de como lo encontraste.

Hablo Damian observando los cuadros en las paredes.

-Fue en mi hora libre de la noche antes de volver a trabajar, quise salir por un cigarrillo.

-Y fuiste al callejón, ¿no?

-Si. En ese momento no hubo nada raro, fue cuándo al caminar en vueltas llego un olor horrible, pensé que era la basura que estaba en el contenedor, no la habían venido a buscar hoy en la mañana, me acerqué a cerrarlo cuando escuché un sonido de adentro.

-¿Entonces estaba vivo cuando lo viste?

-Creo que si, cuando alumbre solo emitía ruidos pero estaba inmóvil, estaba en shock y no sabía que hacer, lo único fue entrar al bar y llamar a una ambulancia, después los llame a ustedes. Y llegaron mucho más rápido.

-Bien, vamos a tener que cerrar aquel callejón y revisar las cámaras de seguridad.

-Hay dentro del bar, afuera no ponen para ahorrar gastos de más.

Elliot iba a responder nuevamente cuando escucharon la sirena de la ambulancia.

-Una mierda...

Susurro Damian a su lado antes de levantarse y salir de aquella habitación para ir a la salida.

-Tengo que atender esto ahora, necesitaremos tu declaración en la central.- Elliot saco de su bolsillo una tarjeta donde impreso estaba su nombre y celular.- Llama a este número por cualquier cosa, puedes ir mañana para hablar, ahora vete a casa y descansa.

Terminando de hablar salió tras su compañero a paso rápido, llegando a la entrada viendo a la ambulancia entrando al callejón y la gente reuniéndose al rededor para mirar la escena.

Entre la multitud alcanzó a ver un auto negro conocido, viendo como de este bajaba su jefe con su rostro serio y con ropa de calle. Al llegar a su lado solo basto una mirada para empezar hablar.

-Es exactamente igual a los dos anteriores, ya no es coincidencia.

Caminaron hacia el interior del callejón donde estaba Damian junto a los paramédicos, al verlos les dijo unas palabras y se acercó a su jefe, quedando a su lado.

-¿Estuvieron bien las vacaciones?

-Maldición, si no fuera porque algún imbécil se las esta dando de matón, seguiría en la playa junto a mi esposa.

-Ya...A veces las cosas no salen como uno quiere.

Murmura Damian para darse la vuelta y caminar a la salida.

Sin saber ninguno de ahí las complejidades que el caso traería

No soy un monstruo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora