The Scum Villain's Demonic Blessing 《Traducción 》

Capitulo 9: Rayo

"Las cosas parecen casi tan caóticas aquí como en la corte celestial", comentó Feng Xin.

"Lo que sabrías", murmuró Mu Qing, poniendo los ojos en blanco.

Xie Lian se mordió el labio. "Por favor deje de." Se movió e instantáneamente se arrepintió. Los músculos de la pantorrilla se sentían como si hubieran sido alcanzados por un relámpago, la electricidad lo atravesó y le desgarró el músculo. Hua Cheng instantáneamente se abalanzó para presionar sus nudillos contra la pantorrilla de Xie Lian, masajeando la rabia del músculo. La otra noche, cuando le golpeó un calambre, gritó mientras dormía y Hua Cheng estaba convencido de que estaba a punto de dar a luz.

"Lo siento", murmuró Feng Xin.

"Ustedes dos realmente no tienen derecho a criticar sus decisiones", interrumpió Hua Cheng.

"¿Perdóneme?" Mu Qing lo fulminó con la mirada. "Tenemos más derechos que casi ..."

"¿Quieres que les llene la boca con medias?" llamó la voz de Luo BingHe desde el pasillo. Se sentaron afuera, evitando el pabellón donde, con suerte, Jiang Cheng podría estar hablando con su hermano. Quizás. Ya era hora. Por otra parte, Xie Lian no era de los que criticaban por tomarse demasiado tiempo.

Pobre Jin Ling. "Sí", respondió Xie Lian, sofocando una risa. Hua Cheng sonrió. "¡Es una broma!" Porque si no aclaraba a Luo Bing, probablemente lo haría. Parecía protector con todos ellos.

"Xie Lian", dijo finalmente Feng Xin. “Sé que nunca te gusta renunciar a algo. Pero, si alguien tiene derecho a hablar sobre algo como esto, por favor, escúchanos ".

"¿Quiénes somos nosotros?" murmuró Mu Qing.

Feng Xin lo ignoró. Una brisa sopló a través del muelle, llevando la dulce fragancia de loto y jazmín. “Tu hijo es mitad dios, mitad demonio. ¿Recuerdas el feto fantasma? ¿Qué tan aterrador fue eso? Y si-"

Hua Cheng casi presionó demasiado fuerte en sus pantorrillas. Xie Lian se puso rígido. "¿Qué estas diciendo?"

"No estoy diciendo nada. Solo digo que nos preparemos para todo ". Feng Xin tragó. Cruzó las manos y balanceó una de sus piernas.

"Finalmente, tiene sentido", dijo Mu Qing.

"Me niego a tenerle miedo a mi hijo", dijo Xie Lian. Hua Cheng tragó.

"Sí, eso está muy bien, pero ..."

"Mi hijo está vivo ", interrumpió Xie Lian. Su corazón latía con fuerza. “Puedo sentirlo moverse. Anoche."

"El feto fantasma habló, se rió y mató, ¿no es así?" respondió Mu Qing.

La cara de Hua Cheng se estaba poniendo cada vez más pálida.

Xie Lian se tensó. Su músculo volvió a sufrir un espasmo. “Quizás sea humano. Ambos lo fuimos, una vez ".