Capítulo cuatro: the perfect date
[Sin editar]
Cuando somos adolescente, muchos de nosotros buscamos la aprobación de un pequeño grupo en el cual queremos encajar. Pero la pregunta siempre a sido ¿Vale la pena cambiarse uno mismo para pertenecer a un grupo en especial? ¿Vale la pena cambiar por una tontería como la popularidad? Si lo vemos de una manera un poco menos presuntuosa veremos que todo tiene sus desventajas incluyendo la popularidad.
Mi habitación estaba desarreglada a tal punto que ni siquiera encontraba mi lápiz favorito. Había tenido una excelente idea para probarle a todos que la popularidad no era lo que pensaban, que no era tan buena como decían.
Una lista.
Una lista que presentara todas las desventajas de la perfección. Todas aquellas que hacían que yo no deseara entrar a ese mundo, pero que parece que nadie mas veía. Cuando al fin encontré mi lápiz me senté en mi escritorio frente a un gran póster de Bajo La Misma Estrella que me habían dado en la fecha del estreno. Traté de pensar cual sería mi primer punto.
Examinaría todo de pies a cabeza.
Uno.- Ser desplazado por tus propios seguidores
Al pasar los años en las sombras escolares, me he dado cuenta de muchas cosas. Entre ellas el que muchas chicas hayan pasado por eso de ser La reina de la secundaria e incluso que hayan perdido a sus verdaderos amigos por su complejo de superioridad. Pero lo peor era cuando llegaba alguna chica nueva, le seguía los pasos y luego se metía con el novio de la reina y le robaba el puesto. Así empezaban Los Juegos Del Hambre entre chicas superficiales.
Como un ejemplo de esto tenemos a Candy Richards. Una chica del oeste de Connecticut que había pasado de ser la Reina de la Zorras a ser la chica mas olvidada del colegio, incluso mas olvidada que yo. Había sido desplazada por una de su séquito, Mia Grinfrey.
Tal vez ella luego me pueda ayudar.
Anoté el primer punto y su porque. A lado del nombre, puse ''observaciones'' me tomaría unos días poder hablar con Candy y luego poder dar mi conclusión.
"RINGGGGGGGGGG RINGGGGGGGG"
Miré por la ventana que estaba a mi lado intentando ver quien era el que tocaba el timbre, pero lo único que conseguí fue un moretón en la frente y un chichón en la cabeza. Bajé las escaleras sobandome la frente. Cuando abrí la puerta me encontré con algo que nunca había pensado que pasaría.
Damian y David Brads estaban frente a mi.
-Eh, ¿Hola?-saludé un poco confundida, pues no era normal ver a dos gemelos que siquiera conoces en tu puerta.
-¿David me has traído a la casa correcta? Aquí solo esta Hannah Carter.-dijo haciendo una mueca- Espera... ¿Tu eres la hermana de Josh? No puede ser...-
-Hola Hannah-saludó David sonriendo-¿Esta tu hermano?
-Si, iré a buscarlo.-le sonreí de vuelta-Entren y esperen aquí.
Subí las escaleras casi corriendo. Toqué la puerta varias veces y un "Hamm" salío de adentro.
-¡Grandisimo idiota, te buscan!
La puerta se abrió rápidamente y de igual forma bajo las escaleras. Alcé mis hombros, entré a mi habitación y cerré la puerta tras de mi. Di pequeños saltitos hasta llegar a mi cama y lanzarme en esta. Mi celular vibro en uno de los bolsillos de mi pantalón. Ví el nombre en la pantalla.
Jane Reed
Sonreí y contesté.
-¡HANNAHHHHHH!-gritó emocionada-¡Es hoy en la noche!
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Las 14 Desventajas De Ser Perfecto. ➳ [En edición] [Pausada]
Teen FictionLa perfección suele ser algo inalcanzable para muchos de nosotros. Una cualidad que casi ninguno ha probado. El orgullo y el perfeccionismo hacen que no veamos los pequeños detalles de la vida. Aquellos que influyen profundamente en nuestra vida. Y...