la bulla se podía escuchar cada vez más fuerte conforme llegaba el alumnado, uno pensaría que al estar en último año, y ya teniendo todos sus dieciocho años para arriba, los estudiantes serían más maduros y no harían tanto alboroto, pero no era así, al contrario, gritaban o hablaban hasta por los codos con un tono muy alto, como si gritar fuera la única manera de comunicarse.
y ahora eran la principal razón del malhumor de nuestro pequeño protagonista, que se hallaba dormitando sobre sus brazos apoyados en la mesa, o eso intentaba pero solo conseguía dolor de cabeza. aunque tampoco es tan fácil dormir si tus amigos te están hablando sin parar.
— uy, alguien se desveló anoche. ¿apuestas?– habló el mayor de los tres.
— apuesto el almuerzo a que fue por jugar genshin impact.
— yo a qué fue por ver porno.
— jake, estamos hablando de jungwon, no puede ni ver escenas de besos en películas.
— no, no puede ver escenas de besos heteros.
— no importa, está chiquito, el no ve esas cosas.
— no es tan inocente como crees.
— no lo difames así.
— ya que está durmiendo robale el celular y fíjate su historial, mí predicción es: tom holland sin camisa.
— no, no, jungwon es más de los señores, como benedict cumberbatch o keanu reeves.
sunoo apenas terminó de hablar cuando el muchacho que antes se encontraba durmiendo ahora había soltado un gran quejido terminando por lanzarles una mala mirada a sus dos amigos.
— ugh, dejen de apostar sobre mí y lo que hago, de todas maneras, ambos deben comprarme el almuerzo.– se enderezó en su silla y los miró divertido a ambos.– y para su información, me gusta más james mcavoy.
— bien, pero dinos porqué estás tan cansado.
jungwon pasó su mirada de sunoo a jake para luego reír. — ¿de verdad quieren saber?– al ver qué ambos asentían prosiguió;– bien... ayer hablé toda la noche con mí novio.
esperó unos segundos y por fin oyó las carcajadas que esperaba, sabía que no le iban a creer. nunca les había contado de jay, no porque lo ocultara, todo lo contrario, solo que sus amigos eran muy tontos como para darse cuenta y él tampoco se los dijo directamente.
varías situaciones habían hecho imposible que sus amigos y jay se conocieran, era muy raro y hasta el día de hoy jungwon no entiende como pasó, pero pasó. cuando jay se fue, yang decidió que tal vez podría esperar a que volviera para que se pudiera conocer mejor con el par.
pero ahora le dolía la cabeza y solo quería que sus adorados amigos cerraran la boca.
— ¿tu novio?- la risa que salió de la boca de sim lo impidió el habla.– tu no tienes novio.
— si tengo.
— imposible, jungwon, yo lo sabría.
a todo esto los mayores seguían mirándose y compartiendo risas.
— bueno, ¡sorpresa!
— ajá, ¿y por qué no lo conocemos?– cuestionó kim.
— pues, está en estados unidos ahora.
y aunque no lo era, sonaba como un chiste. como era de esperarse otro par de carcajadas se escucharon en el salón.
— claro, y yo soy hijo de millonarios.
— oye.– se quejó el menor con un puchero, sabía que no le creerían a la primera pero ya era demasiado.
— solo di que fue el porno, wonie, es normal, no tienes que mentirnos.
— ¡no miento!
— si, si, como sea, entonces ¿estuviste hablando toda la noche con tu novio imaginario dices?
jungwon solo rodó los ojos y lo dejó pasar mientras sus amigos reían, y así fue todo el resto del día, ambos se lo recordaban cada dos segundos con algún chiste y él o puchereaba o los ignoraba.
¡su novio es real!