ᴘꜱʏᴄʜᴏ [ʏᴀɴɢ ᴊᴜɴɢᴡᴏɴ]

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-Tú: Es un pederasta...

-Milli: Está bien Chiquilla, contrólate, solo sigue su juego, consigue el teléfono y vete, no hace falta que tengas mucho contacto con él.

-Tú: Odio que me toquen y más los señores mayores.

Jungwon [정원] pov.

Odiaba todo en el momento, ella lo estaba pasando mal y yo no podía hacer nada para sacarla de allí!

Ese sentimiento me rompía por dentro.

-Milli: Está bien, tenemos un infiltrado en el edificio que se puede hacer pasar por tu hermano en caso de algo malo, de acuerdo? Sigue con el plan.

Vimos como asintió, ahora su terror era mi enfado. Al salir vimos el hombre con un té en mano.

-Señor: Y que hace usted por aquí? Una chica tan bonita no debería de andar sola por edificios desconocidos.

Hasta la voz de ella cambió, estaba centrada en el papel, que asco por dios!

-Tú: Vine a acompañar a mi hermano cómo dije antes.

-Señor: Te gusta pasar tiempo con él?

Le hizo una señal para que se sentará junto a él y eso hizo. Cuando se sentó vi que le puso su mano encima de la mano de mi amada, las cámaras temblaban un poco, mi princesa estaba temblando. Su pulso también estaba acelerado, se escuchaba y veía por los altavoces y pantallas.

-Tú: Sí, es muy bueno conmigo.

-Señor: Me alegro.

Ella vio el teléfono del pederasta encima del sofá. Pero no se podía lanzar a cogerlo y huir, tenía que ser más cuidadosa. Ese no era un cadáver, aún, así que no podía cogerlo e irse.

Pensaba matarlo por ponerle la mano encima, lo iba a hacer, y con muchas ganas y disfrutando cada momento de sus gritos y quejas.

TN pov.

Estaba temblando de miedo, quería gritar por ayuda, odiaba su tacto, tanto que me dio ganas de vomitar.

En un momento se levantó a por algo de comer, pero yo no pensaba comer nada que me trajera ese pederasta, a saber si había algún droga para luego tratar de hacerme algo sucio digno de pederastas.

Le cambié la funda del teléfono y le puse un teléfono que me habían dado la gente que me habia cambiado de ropa.

Cuando llegó me habló.

-Señor: Toma bonita, tienes hambre?

-Tú: No gracias ya he comido, es usted muy amable.

Me reía leve para parecer más amable y me vibró el reloj, era mi señal para huir de allí.

-Tú: Disculpa, tengo que irme, mi hermano me llama.

Nos levantamos y me sobó los brazos con suavidad. En ese momento se acercó y me dio un beso en la comisura de mis labios.

-Señor: Cuando quieras puedes encontrarme aquí bonita, adiós querida~

-Tú: Adiós~

Al salir de allí solo pensaba en una cosa; vomitar.

Me estaban dando arcadas y en eso me quité las cámaras y las grabadoras. Al salir se lo di todo un miembro del equipo y salí corriendo hacia una esquina con alcantarilla para echar lo necesario.

Una vez lo eché todo respiré, me sentía sucia, manoseada, puta. El chico de mi equipo se acercó a mí una vez cuando me alejé de esa esquina y me felicitó por la misión.