Capítulo 20: Perfectos

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POV YEIMY

Paso 1 semana desde que me enteré del embarazo, hoy tenia cita con la ginecóloga. Me acompaño Vanne, ya que Charly debía evitar lugares con demasiada gente.

-Cálmate ma, todo va estar bien con mi hermano- mi pequeña tomó mi mano, y aunque fuera una mujer adulta para mí siempre será esa niñita pequeña que conocí ya hace varios años.

Entramos tomadas de la mano, en mi cabeza tenía varios escenarios montados, y si la ginecóloga me decía cosas negativas, despeje mi mente y salude al ver a la ginecóloga.

-Good morning- salude, ella sonrió. -Hablo español, no te preocupes- dijo y yo sonreí. Vanne la saludo y ella nos invitó a sentarnos.

-Bueno, yo soy Maritza- se me hizo raro, ya que haya en Japón, todos tenían nombres muy confusos.

Creo que mi cara se lo demostró, -Mi papá es de acá pero mi mamá es de Ecuador-, asentí con vergüenza.

Empezó con preguntas sobre mi periodo menstrual, y algunas cositas más.

-Dale acuéstate allá y descubrete el vientre- lo hice y espere impaciente, Vanne se sentó a mi lado, la ilusión en sus ojos me emocionaba aún más.

El gel se sintió frío, esta sensación la había sentido hace  22 años, -Es muy bella tu hija- me dijo Maritza mirando a Vannesa, sonreí y ella volvió su mirada hacia el monitor mientras con el ecografo daba movimientos circulares.

-Mira acá esta tu bebé- sonreí como tonta al ver aquel bultito, que aunque no tenía forma, para mí era lo más perfecto. -Ma es muy lindo- susurro y yo acaricie su mejilla rápidamente.

Todo iba bien hasta que se detuvo, y me miró, -Yeimy hay algo más- me sentí muy aterrada, el miedo volvió. Quería a Charly, lo necesitaba.

Con voz dubitativa pregunté, -¿Es algo malo?-, no presto atención, siguió analizando la pantalla.

Mi angustia crecía cada que no me decía nada, y si mi bebé está mal. Tuve mucho  miedo, no quería perderlo.

-Em Yeimy....- la mire buscando una respuesta, -Dime- dije desesperada, -Relájate, no es nada malo- suspire aliviada.

-Son 2- soltó de golpe y mi reacción las hizo sonreír, -Dos?... no jodas Charly-.

-Si son dos saludables bebitos, están perfectos. Su tamaño y peso esta correcto para su tiempo de gestación- sonreí, a pesar de todo.

Me alegraba la idea de tener una familia  más grande.

Maritza me brindó unas tollitas para limpiar mi abdomen, y luego me pidió sentarme.

-Yeimy....- su tono me asustó, hice un gesto para que prosiga, -Debido a tu edad, es un poco riesgoso el embarazo doble, pero por lo que veo, tu vida sana y de ejercicio te está favoreciendo bastante- sonreí angustiada, luego nos despedimos, y fuimos a casa.

Al llegar Charly estaba en la puerta muy emocionado, al verme se arrodilló y saludo a sus hijos. -Hola mi amor- dijo, cierto que el no sabe que son 2.

-Tenemos que hablar- mencione bastante seria, el me miró con angustia,  saludo a su hija y camino conmigo hacia la habitación.

En el trayecto no dejaba de acariciar mi vientre, -Todo bien con el bebé- su voz denotaba su preocupación, asentí sin decirle nada.

-Yeimy me estas asustando- dijo al entrar a la habitación, tome sus mejillas y apegue nuestras frentes.

-Mi amor- tome sus manos y las pose en mi vientre aun plano, mientras el solo me miraba con preocupación y duda. -Son dos- le dije con la voz más dulce que pude hacer, vi como automáticamente su rostro emano una sonrisa de oreja a oreja.

Siempre has sido túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora