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Capítulo 8

N/A: Advertencia de contenido para problemas de alimentación aquí.

~o0o~

El Dr. Perthborn pasa más tiempo de lo habitual hurgando en el abdomen de Wei Ying, escuchando con su estetoscopio, una mirada cómica de concentración en su rostro. Gracioso. Sí. Así es todo esto. Si Wei Ying se enfoca en el humor, la hilaridad de sus cejas pobladas del Dr. Perthborn frunciendose, como en las comedias, mientras juega con el estetoscopio, entonces no se asustará. Como mucho. Quizás. Finalmente, el Dr. Perthborn se inclina hacia atrás y cubre el abdomen de Wei Ying con la bata de hospital.

—¿Sin dolor en absoluto? —él pide.

Wei Ying parpadea dos veces.

—Necesito que seas honesto, Wei Ying—dice el Dr. Perthborn.

¿Qué carajo? El bastardo no le había creído a Wei Ying cuando se quejó del tubo de alimentación, y ahora no le cree a Wei Ying sobre cómo no siente dolor. Sí, tiene algo de gas y ardor de estómago o lo que sea que pueda describirse como "dolor" en el sentido más estricto del significado técnico, pero no es nada comparado con el tubo. No hay forma de que Wei Ying se queje de algunos eructos cuando la alternativa es ese puto tubo. Hace un gesto hacia la tablet.

El Dr. Perthborn lo ayuda a sentarse nuevamente y espera a que la pantalla funcione.

     || Tengo gas, supongo

     || Pero está bien

     || Estoy bien

—¿Algún sabor extraño en tu boca? —pregunta el Dr. Perthborn.

La comida sabe a mierda cuando sabe a algo. Wei Ying parpadea dos veces de todos modos.

—¿Alguna tos?

Dos parpadeos. Cierto, esta vez. No recuerda la última vez que tosió. No es un juego de palabras.

—Bien, bien—dice el Dr. Perthborn—. Es muy importante que me lo diga a mí o a una enfermera si comienza a toser después de las comidas.

Wei Ying parpadea una vez.

—Tienes un mayor riesgo de atragantarse y aspirar alimentos—dice el Dr. Perthborn—, lo que podría provocar neumonía y retrasar tu rehabilitación.

Wei Ying ya escuchó este sermón. Lo entiende, ¿de acuerdo? Está tan débil que podría matarse accidentalmente tratando de tragar el espeso Ensure. Sabe que tiene amnesia, pero puede sentir lo débil que está en cada momento de cada día. No es necesario señalarlo cada cinco segundos.

—Sobre tus evacuaciones intestinales—dice el Dr. Perthborn—¿Estreñimiento o diarrea?

Al menos Wei Ying todavía puede suspirar.

El Dr. Perthborn continúa exagerando sobre lo que Wei Ying necesita hacer ahora, señalando lo afortunado que es de que técnicamente no tiene incontinencia. Técnicamente. Todavía no puede ir al baño, así que tiene que llamar para pedir ayuda cada vez que siente que se acerca un número dos. ¿Dónde va a encontrar la paciencia para lidiar con esto? De alguna manera, lo hace, con una sonrisa en su rostro, sin escuchar realmente al Dr. Perthborn. No hasta que suelta una bomba.

—Ahora, sobre el Sr. Lan—dice—¿Te sientes cómodo con él aquí?

Wei Ying parpadea. Una vez, aunque no necesariamente para decir que sí. Simplemente está confundido por la pregunta. Después de un segundo, alcanza la tablet.

     || Él es mi esposo

—Sí, pero no lo recuerdas—dice el Dr. Perthborn—. Me dijiste que pensabas que era un sueño.