|| Horacio x Viktor ||

49 1 0
                                    


"Northern lights"

《 Inspirado en "Strong" de One Direction. 》

> One shot.

~♡~

Viktor y Horacio se miraban fijamente, las lágrimas en ambos pares de ojos se asemejaban a cascadas.

–No estoy listo para esto, te juro que lo intenté. Lo siento Vik.

El de cresta hipo apenas logró pronunciar dicha frase, su palpitante núcleo interior le recriminaba la decisión, pero su juicio hacía que sus brazos rodeaban su propio cuerpo, tratando de aliviar el dolor que le ocasionaba rechazar a quien fue el amor para su vida.

Viktor al verlo tan vulnerable quería abrazarlo, protegerlo con sus brazos y sentir su respiración en su pecho, pero la decisión estaba tomada y si lo seguían alargando sus almas quedarían destrozadas.

–Lo sé, pero respetemos nuestra decisión Horacio. No podemos seguir así, nos estamos haciendo daño y es lo último que quiero hacer.

El menor agachó su cabeza e intentó inútilmente limpiar el agua que producían sus luceros.

–Gracias Viktor.

Aquellas palabras rompieron al contrario y finalmente se lanzó a abrazar a su amado, susurrando miles de "te amo"

Horacio lo acompañó en su dolor. El suplicio ahogante de sus corazones, los cuales luchaban contra la marea para intentar salvarlos de un abismo con escasa luz.

Tristemente aquella pareja terminó, no de la mejor manera, muchas preguntas quedaron sin respuesta, las metas se convirtieron en sueños, sus manos separadas buscaban su acompañante, pero a la deriva seguían avanzando, ligeros tal viento en una noche fría.

El libro de su historia se hallaba sin páginas escritas, con separadores realmente fuertes, que impedían la continuidad, palabras sin ilustrar el amor tan puro que en un mal momento llegó.

Ya no eran de un navío, eran dueños de dos barcos en diferentes mares, con diferentes destinos y tripulaciones.

–¡Gustabo! ¿Ya tienes listo todo para el viaje? No quiero que nos retardarnos por nada del mundo y si seguimos a tu ritmo seguramente...

El nombrado lo dejó de escuchar y con pereza se levantó de su silla realmente cómoda a seguir empacando porque su amigo era muy ansioso.

Finalmente cumplirían un sueño del pelirrojo el cual era ver las auroras boreales iluminando el cielo nocturno.

–Me harás arrepentirme de darte este regalo.

Gustabo claramente estaba bromeando, pero Horacio se asustó y casi se pone a llorar ahí mismo, el rubio no pudo evitar reírse por la reacción desesperada, así que lo acunó en sus brazos y le explicó que no haría aquello.

–Nunca haría algo para hacerte daño. Si tu sonríes yo lo haré, Horacio.

El nombrado solo aspiró el olor familiar de su hermano para controlarse y con un manotazo lo alejó advirtiendo que no le hacían ninguna gracia esas situaciones.

–Ya, vamos que si el vuelo se nos va no será mi culpa.

–¡¿Cómo que no Gustabo joputa?!

Entre risas provenientes de ambos salieron de su amado departamento, siguiendo el camino tan esperado al aeropuerto, allí con todo en regla, el de cresta no podía ocultar su emoción por lo que traía las miradas de las personas que se iban o esperaban en el lugar.

Canciones que cuentan historias || Horacio Pérez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora