"Recuerdos, recuerdos que se llevan, recuerdos felices, recuerdos de mis amigos, recuerdos de mis años como estudiante, recuerdos que poco a voy perdiendo.
Amor, amor, amor, y amor, ¿de qué nos sirve el amor?, si no podemos compartirlo, ¿de qué nos sirve ser amados?, si nunca lo supimos, ¿de qué nos sirve amar?, si no nos aman, pero aquí, ¿De qué me sirve el amor, si se lo llevaran junto a mis demás recuerdos?
De que te sirve, salvar a tantas personas, si no puedes salvarte a ti mismo, de que te sirvió la ayuda que brindaste, si no te brindaran ayuda a ti, o, peor aún, si no puedes brindarte ayuda a ti mismo.
De que te sirvió tantas lágrimas derramadas, si no puedes llorar más por ti mismo, cuando mis ojos se han secado.
Al final de todo, no hay más ciego, que aquel que no quiere ver.
¿Por qué refutar lo obvio?
¿Por qué ponerte barreras cuando puedes ser libre?
¿Por qué amar cuando no te aman?
No hay peor sordo, que aquel que no quiere escuchar.
Tus asuntos carnales fueron algo que en el libreto no se escribió, los deseos de relaciones sexuales, el hambre de comerte al mundo de un bocado, la libertad de tener lo que quieres, pero, ¿Qué hay de aquello que tuviste, pero ya no puedes tener?
Los corazones rotos, las lágrimas derramadas, las cachetadas de cortesía, parecen hasta ahora, uno de los recuerdos más felices que tuvimos, porque sin darte cuenta te enamoraste, de lo único que no puedes poseer."
- ¿James? – pregunto Lupin.
- ¿Si?
Los ojos color miel del licántropo analizaron la situación, el chico de cabello desastroso esta acostado en la cama de Sirius, echo una bolita, y abrazando un cuaderno pequeño con increíble recelo.
Suspiro
-Te esperamos abajo, Dumbledore ya va a comenzar. – anuncio y se fue dejando al otro atrás
Dejo escapar un pequeño suspiro, y miro de nuevo el diario que poseía en sus manos, los últimos recuerdos del chico al que le hizo la vida cuadritos durante su estancia escolar, fueron para él, y ¡Oh, valla sorpresa!, siempre estuvo enamorado de él, y nunca pudo decirlo, pero, ¡Oh, otra sorpresa!, el sentimiento era mutuo.
Comprendió después de un tiempo, que no era repugnancia, o algo parecido, eran celos, y no celos de Lily, celos de Severus, quien parecía más interesado en su pelirroja amiga.
Y todo se aclaró cuando ese sentimiento, se volvió a instalar en su pecho, cuando ahora SU serpiente se juntaba mucho con el estirado de Malfoy, y el hermano pequeño de Sirius.
Miro aun con más recelo el diario, y lo guardo en el bolsillo de su túnica, se paró, tomo su varita, se puso su bufanda y bajo a la sala común, si es que quedaba algo de ella.
La guerra había sido dura, y fue aún más dura, la perdida de aquellos seres queridos, aquellos seres amados que estuvieron a tu lado, que fueron compañeros de bromas, de cuarto, de secretos.
El gran comedor era uno de los pocos lugares que seguía casi intacto, pero que se volvió lúgubre, y presagio de terribles pesadillas.
Los 34 cuerpos de las víctimas de la guerra, estaban en fila, cubiertos con mantas blancas o simplemente con alguna prenda o capa de algún familiar, algunos hasta estaban descubiertos.
El discurso del Director comenzó cuando todos estaban reunidos, y los sollozos y gemidos lastimeros, cesaron un poco.
-Hoy, todos perdimos a personas importantes para nosotros – comenzó el viejo director, sin su característica voz alegre, o sus ojos brillantes, que ahora permanecían opacos. – Desde hermanos, hasta hijos, perdimos amigos, o parejas, perdimos mucho en un solo dia, la muerte es un proceso natural de la vida, un proceso inevitable por el cual todos desembocaremos algún dia – menciono – muchos niños preguntan por qué no se puede ser eterno, inmortal, pero, si los peces no mueren, tampoco podrán nacer nuevos, porque no habrá espacio en el mar.
Los sonidos de eficiencia, y comprensión eran apenas audibles, pero ahí estaban.
-El amor es la única magia, que ha demostrado sobre pasar los planos de la física, pero también pueden pasar lo planos mortales – dijo, y alzo su varita conjurando un pequeño lumus – Por aquellos amados que ya no están.
Y siguiendo su ejemplo, el cielo escuro y nocturno, se ilumino con pequeñas luces de esperanza y alivio. Nunca se sabe si hay una segunda vida, pero si la hay, sin duda, que aquellos que perdieron, los esperarían el tiempo que fuera necesario...
El dolor y el amor flotaban en el aire a partes iguales, siguiendo en el gratificante, y dulce compas de una danza, una guerra que ninguna e los dos quería perder, y siguiendo sus pasos, la esperanza se fue uniendo, la de un mejor futuro, la de una mejor vida para sus hijos.
Vio más allá al estirado de Malfoy, y a su esposa, la prima menor de Sirius.
Vio más allá al hermano de Sirius.
Vio más allá a la pelirroja que había perseguido durante siete años, por la que perdió todo y gano nada.
Vio más allá a todos llorándole a un mismo cuerpo, un cuerpo inerte, frio, un cuerpo que nunca más se volvería a levantar, como la muerte lo indica.
Vio más allá a un cadáver en todas sus letras.
Vio más allá también a la persona que más amo y odio al mismo tiempo, podía ver más allá de sus narices si se lo proponía, pero aprendió a ver más allá de la peor forma.
La forma que nunca querría volver a repetir. Pero por fin podía ver más allá, la voz de Snape aun sonaba como un eco lejano:
"No puedes ver más allá de tus narices Potter"
Pero ahora podía, podía y cuando se acercó hasta el cuerpo, susurro casi para sí mismo con amargura.
-Lo ves, si puedo ver más allá –
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Ver mas allá -Snames-
أدب الهواةAl final de todo, no hay más ciego, que aquel que no quiere ver. ¿Por qué refutar lo obvio? ¿Por qué ponerte barreras cuando puedes ser libre? ¿Por qué amar cuando no te aman? No hay peor sordo, que aquel que no quiere escuchar.