Novia En Fuga. •|MYG|• ✔️

One

- ¿Que haremos ahora Yoongi? - decía la chica con lágrimas en los ojos, estaba conteniendo se frente al chico.

- Creo que está bastante claro que hay que hacer. - habla en tono frío, lo cual destrozó más el corazón de la chica.

- Podemos buscar una solución juntos. - se limpia una lágrima rebelde. - Podemos salir de esto juntos.

Lo miraba con ojos esperanzados, esperaba que el chico le dijera que todo iba a salir bien que juntos superarían los problemas que la abrazara fuertemente.

- A partir de ahora no hay más un "nosotros". - dijo sin mirarle a la cara. - Ahora por favor, si me disculpas. - hace una seña hacia la salida.

- Yoongi no. - estaba desesperada. - ¡Mirame Yoongi! - Ya era inútil retener las lágrimas. - ¡Yo te amo! ¡No puede terminar esto así! - negaba seguidamente. - Mírame. - le decía mientras tomaba el rostro entre sus manos, el forzajeo pero al final se dio por vencido. - Nos amamos, podemos seguir con esto juntos. - le dijo bajito. - No todo está perdido, mi vida sin ti estaría vacía, no tendría vida.

- No hubiera querido que pasara esto, no lo esperaba. Sabía que tus padres estaban en contra de nuestra relación pero pensaba que no tenía importancia que podíamos seguir juntos a pesar de eso. Pero con lo que me acabas de decir hace unos minutos no creo que sea lo mejor seguir juntos. - toma una respiración profunda, no quiere quebrarse frente a ella. ambos son iguales en ese aspecto. - Pertenecemos a mundos diferentes, yo vivo en un autocaravana, trabajando en una pequeña florería improvisada de dependiente, tú perteneces a esas personas ricas y llenas de poder que nunca seré, no podré darte jamás la comodidad a la que estás acostumbrada.

- Yo no necesito nada de eso. - niega con voz ahogada. - Yo solo necesito que me ames, que me despiertes todas las mañanas con un beso de buenos días, que estés todos esos días de tormentas para dormir juntos, que sigamos como cada sábado de noche de alcohol y música, que seas tú mismo conmigo.

- Lo siento pero no puedo. - niega bajando la cabeza. - Ahora espero que te retires.

La pelirrubia asiente antes de ir en dirección a la puerta, se despiden con una mirada. Y antes de que el chico cerrará la puerta ella pudo oír como decía.

- Siempre esperaré por ti.

Sin mirar atrás salió caminando por la calle, por fuera cualquier persona pensará que no pasa nada con ella, pero por dentro es un huracán de emociones, siente como cada parte de su cuerpo se quiebra en miles de pedazos hasta hacerse añicos, una sensación amarga en la boca. Nunca se había puesto a pensar que un día podría acabar las cosas así, no así de esta manera.

Lleva más de tres años saliendo con el chico pálido, tenían una relación estable salvo por sus padres los cuales eran prejuiciosos y siempre han estado en contra de la relación de estos dos ya que Yoongi no es financieramente rico ni acomodado.

Recordando todas las palabras que le habían dicho esta mañana cuando había ido al comedor a desayunar con sus padres, no se lo creía aún. ¿están dementes o que?

La chica pelirrubia había salido de su habitación ya vestida para el día, unos de los criados que tenían había ido para avisarle que ya el desayuno estaba listo y que sus padres la estaban esperando, al entrar estaban hablando pero se callaron al instante cuando ella entró eso hizo que la chica los mirara extrañada.

- Buenos días. - saludo mientras se sentaba junto a sus progenitores.

- Buenos días querida. - saludo la madre. - ¿Dormiste bien?.

- Si, dormí de maravilla. - sonríe.

La noche anterior había traído a su novio a escondidas de sus padres, habían dormido juntos en la cama de la chica y temprano en la mañana se había ido para que ni sus padres ni los empleados lo vieran por allí.