Just Three Days| KookV- VkookV

Capítulo 10

Taehyung

Mentiría si dijera que estoy bien. Porque absolutamente no es así.

El día de ayer fue demasiado rápido para mi gusto.

En general los días de semana se me hacen larguísimos, los segundos son minutos y los minutos son horas. El día se siente como si no tuviera límites, como si fuera una eternidad encerrada en veinticuatro horas.

Por primera vez anhelaba que los días pasen lento, que esta fecha jamás hubiese llegado.

Pero llegó.

Mierda llegó.

Desde que me levanté siento mucha ansiedad. Ayer hablé con Jiyu y pude calmarme un poco, pero ahora que estoy terminando de alistar todo, mi corazón se quiere salir de mi pecho; producto del nerviosismo que me está comenzando a asfixiar.

En realidad no entiendo por qué estoy así, yo sé que voy a poder con esto. Un campamentito de siete días no me va a ganar. Yo puedo con todo y nada ni nadie puede conmigo. Soy fuerte, voy a aguantar.

¿Sos fuerte?

Como sea, no debo pensarlo tanto, va a pasar más rápido de lo que creo.

Suspirando me miré en el espejo. Hoy mi pelo está bastante bien por suerte. Me acomodé las hebras de costado y fui a buscar la ropa que separé para el viaje en bus.

Opté por algo holgado y cómodo: un pantalón ancho negro, una sudadera gris oscura con un gráfico en naranja y unas converse. En general toda mi ropa es así; cómoda y grande. Llevo varias remeras básicas, pantalones cómodos, sudaderas de algunos colores y algún que otro par de zapatillas.

Además, guardé dos bandanas para mi pelo ya que seguramente se pondrá grasoso y sucio con los días.

Hoy a la mañana le hice un doble lavado; vaya uno a saber si podré lavarlo en algún momento en ese asqueroso camping.

"Hwan añadió una ducha en la que será mi cabaña"

Recordé las palabras de Jungkook y bufé.

Así que... ¿ahora hay duchas en ese campamento?

Qué curioso... Me hubiera encantado que existan en aquella época en la cual un pobre Tae de quince años se lavaba el pelo con un maldito balde.

"Si fueras más simpático conmigo te ofrecería con gusto mi ducha pero supongo que eso es mucho para ti"

Sacudiendo mi cabeza negué. Prefiero fritar milanesas en mi pelo grasoso que chuparle las medias a Jeon por un baño. Que disfrute de la higiene, vamos a ver quien aguantará más al final del día.

Una vez vestido, me coloqué un poco de perfume y me lavé los dientes, luego guardé el pote de pasta de dientes en mi mochila.

Dándole una última hojeada al papel que nos entregó Lee con algunas indicaciones y demás, me cerciore por vez número setenta que esté absolutamente todo.

-Pasta de dientes, cepillo, ropa cómoda, abrigo, cúter, linterna, crema, repelente, protector solar...- bufando me di vuelta para ver el shampoo. Mi adorado, caro y delicioso shampoo de frutos rojos que me deja el cabello hermoso sin mucho esfuerzo.

Lloriqueando internamente, me obligué a dejarlo atrás.

¿A quién engaño? No podré lavarme el pelo...

Continúe enumerando cosa por cosa hasta que un sonidito irrumpió en mi concentración. Saliendo de mi burbuja de organización miré mi celular. Sonreí al ver la pantalla.