Con el pasar del tiempo me sentí muy solitario, me estaba acostumbrando al estar con alguien a mi lado, me di cuenta que los celos al final terminan deshaciendo una relación entre personas, en mi mente me preguntaba. ¿Por qué?, que haz echo, ¿porque terminaste esfumando esa hermosa amistad que tenías con esa chica?, ¿Valió la pena reclamarle por ello?, ¿La querías o no?, no fuiste suficiente valiente como para decirle mucho antes lo que sentías por ella.
Pasaron muchos días, pasaron muchas noches y yo aquí esperando que por fin contestara el celular. Eso me tenía atado y muy pensativo, tanto que no me dejaba hacer mis deberes como debía. Hable de la situación con mi vecina, intentando buscar una solución, buscar unos consejos que me ayudaran a recuperar nuestra amistad. Tome algunos, otros los deseche, pero la mayoría sentía que no me podían ayudar.
Un día consigo una amiga que vivía cerca de la casa, la salude, hable un rato con ella y también le pregunte como podía resolver este pequeño percance que me estaba atormentando. Ella me agarro las manos y me dijo:
-Edward, te conozco, eres un chico muy bueno, creo que la mejor solución es acércate a donde vive y pedirle perdón, lo más sincero posible.
Desmotivado le respondí:
-¿y si no quiere verme?, ¿Qué hago?, probablemente al verme se devuelva o me cierre la puerta... son muchas cosas que no quiero que me pasen.
Ella me contesta:
-Allí está el problema de tu tormento, El orgullo Edward... el orgullo es el que te está matando poco a poco, si dejas el orgullo es muy probable que te vaya bien. Ve y habla con ella, aparte también creo que tienes miedo de que te rechace ¿Verdad?.
Le respondí:
Si... tienes razón me da miedo a ser rechazado e humillado, no se trata de orgullo. Es miedo el que tengo.
Ella se levanta y me dice:
-Bueno... la solución es fácil, habla con ella y aclara todo. Otra cosa... deja los celos eso probablemente no te va dejar ser feliz con esa mujer. Ya me tengo que ir nos vemos...
Me despido de ella y me quedo sentado pensando lo que me dijo -¿Sera?, ¿Tendrá Razón?, ¿simplemente la solución está en hablar directamente con ella?, si es así entonces tengo que ir a donde se hospeda y hablar con ella.
Pasaron dos días desde que Rose me dio ese consejo, estuve pensando durante horas que podría decirle mi Evelin, estaba decidido que ella me gustaba, el problema es que tenía ataques de celos estúpidos. Agarre el teléfono y pensé en marcarle, pero... me dije:
-Este medio no me va ayudar a resolver este problema.
Deje el teléfono, me acomode, agarre el dinero que había ganado y me fui a donde estaba, primero pase por el trabajo, diciéndole a mi jefe que me diera ese día libre para resolver un asunto. Hummm gracias a Dios el me comprendía y me ayudaba demasiado, es un señor bastante agradable. De camino, me acorde de una película de romance, donde el protagonista después de haber tenido un quiebre con su novia, le compro flores se arrodillo y le pidió perdón, pensaba hacer lo mismo.
Me baje del transporte, camine como 1 cuadra y media hasta la floristería más cercana, compre un ramo de rosas (algo caras pero no me importaba), caminando hacia el hotel, vi una tienda donde vendían exquisiteces, me detuve y pase a comprar unos chocolates, la vendedora muy maja, me miro y me dijo:
-Qué bello... se ve que la quieres mucho, si quieres te hago una rebaja ya que te vez muy enamorado.
No es que tenía cara de estar enamorado, lo que pasa es que ese día habían rebajas jajaja.
Al llegar a la puerta del hotel, me puse a pensar lo que iba decir, cuando de repente ella salió justo en ese momento, los nervios me atacaron, la azúcar se me bajo, el corazón me bombeaba más rápido que vehículo de fórmula 1, en ese momento me dio de todo. Ella me miro y me dijo:
-Edward... –Nerviosa–. ¿Qué haces aquí? Y con ese ramo y ese regalo.
-¡EVELIN! ¡NO AGUANTO MAS! ¡LO SIENTO! –Asustado–.
-Edward... baja la voz, no hace falta que grites.
Me sentí muy apenado y le conteste:
-¡Oh!, disculpa... no fue mi intensión.
Me arrodille y le dije:
-Evelin, discúlpame, no debí haberte reclamado nada... no debí haber actuado así, pero tengo que decirte algo que debí decirte hace mucho –nervioso–. Evelin, estoy profundamente enamorado de ti, después de un tiempo de habernos conocido, sentía en mi... algo muy diferente a como era yo, es la primera vez que me enamoro de alguien... es la primera vez que veo a una chica ser tan simpática y adorable conmigo, me cambiaste el pensar sobre el amor. Yo antes decía que el amor no existía, decía que eso era para idiotas, pero ahora quiero decirte, que si el amor es de idiotas, quiero ser el idiota más grande de este universo junto a ti, me gustaría llegar a viejos junto a ti, me gustaría formar una familia junto a ti... quiero hacer todo lo que esta vida depare junto a ti.
Al terminar todo eso, me di cuenta que estaba a punto que se reía y le pregunte:
-Evelin, ¿Por qué te ríes de mí? Acaso...
Cuando estuve a punto de terminar me contesta:
-Edward, a mí también me gustas, solo que estaba esperando que me lo dijeras.
En ese momento la felicidad que daba por perdida la recupere, no supe cómo actuar y me levante casi llorando... y la abrace. Ella también me abrazo y sin pensarlo me beso.
Me dio mucha pena, ya que el beso no me lo esperaba de su parte y más pena me dio, fue cuando al terminar el beso vi que había mucha gente que estaba caminando silbando y aplaudiendo sobre el momento, otros estaban filmando y señalando con su mano que le gustaba. Ese momento se sentía de película. Cuando termina con un final feliz.
Ese día caminamos casi todo el centro, nos miramos, dijimos lo que ambos sentíamos y nos hicimos novios. Era la primera que tenía y fue la única que tuve toda mi vida.

ESTÁS LEYENDO
Hasta El Fin [Dolor por Amor]
Mystery / ThrillerRelata la historia que vivió un hombre americano en suelo extranjero para volver a reencontrarse con su familia, Pero su familia no sera lo único que se encontrara.