Mural ;; Kazutora Hanemiya

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𝗡𝗢𝗧𝗘

Al día siguiente después de mi cumpleaños en la escuela me dió una nota que decía que fuera a la azotea, al llegar ahí me recibió con una sorpresa, fue un día especial y lo volvería a repetir.

Era una tarde soleada en una escuela y la clase de matemáticas se estaba desarrollando en esos momentos mientras que un pequeño kazutora escuchaba la clase con desinterés, en un momento sintió la punta de un dedo tocar su espalda, el volteó levemente su cabeza mirando hacia atrás para saber  que es lo que quería su amiga, entonces la contraria le dió una pequeña notita para que después el chico tomará el papel, el azabache con sigilo abrió la nota y empezó a leer.

"𝘋𝘦𝘴𝘱𝘶𝘦́𝘴 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘤𝘭𝘢𝘴𝘦 𝘷𝘦 𝘢 𝘭𝘢 𝘢𝘻𝘰𝘵𝘦𝘢, 𝘵𝘦𝘯𝘨𝘰 𝘢𝘭𝘨𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘵𝘪."

La clase terminó y la pequeña azabache salió rápidamente del salón con algo  entre sus manos, una acción que al pequeño hanemiya le extrañó pero más importante el tenía una pregunta, ¿que era lo que tenía en las manos su amiga?, no lo sabría si no iba a la azotea, entonces él se paró y procedió a ir al lugar antes mencionado.

Sus ojos miel inspeccionaban el lugar en busca de su amiga, lo cuál en un pequeño lapso de tiempo consiguió, vió la figura de la azabache y vió algo que lo dejó asombrado.

- Hola...  -saludó mientras se acercaba a la contraria viendo el alimento que tenía en sus manos.

- Hola hane...  -saludó la pequeña de forma tímida mientras veía hacia abajo.

Bueno, no hace falta la imaginación para saber cuál es el postre que traía la pequeña azabache, efectivamente era un pastel, un pastel del sabor favorito de kazutora. El pequeño hanemiya veía a la azabache y el pastel, era una acción la cuál ninguno de sus "amigos" había hecho por él, le resultó lindo el que hiciera eso y más encima por él, no sabía exactamente como sentirse, el solo se acercó tímidamente más a la femenina, la cuál se sentó en el suelo, acción que kazutora también hizó, la niña procedió a hablar.

- Feliz cumpleaños kazutora, lamento mucho que no haya sido ayer pero recién ahí se me ocurrió que darte como regalo. -dijó para levantar su cabeza para ver a hanemiya con los ojos cerrados con una pequeña sonrisa.

- Ehh... Está bien, de hecho me parece muy lindo tu regalo. -contestó a su amiga con una sonrisa genuina con un leve rubor en sus mejillas.

Después los dos niños empezaron a comer y desgustar el pastel mientras conversaban con la niña contando que  tuvo ayuda de su madre en hacer el pastel y de cómo su hermano varias veces intentó probarlo, reían, hablaban, contaban anécdotas y además hanemiya contó lo ocurrido del día de ayer en su cumpleaños mientras que la azabache estaba alegre al escuchar que le dió una paliza a junpeke pero impactada al escuchar que quemó un auto con su nuevo amigo, estaba feliz por su amigo al saber que tenía una nueva amistad pero se aseguraría de que fuera la indicada.

Una tarde soleada en la azotea comiendo su pastel favorito con la compañía de su mejor amiga era lo mejor para kazutora, sin duda fue un día muy especial para él.