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Una habitación gris era iluminada por la luz de la luna mientras que en la oscuridad un joven estaba despierto en su cama alrededor de las 2:03 de la mañana. Un revoltijo de pensamientos, el recuerdo de como el cuerpo de la persona cayó muerta al suelo, sentimientos de culpa pero también de odio a cierta persona la cuál culpaba por su acción que lo llevó a aquel lugar tan horrible (según el chico), su único consuelo eran los recuerdos de aquella amiga, los recordaba con tanto cariño que anhelaría poder soñarlos para poder volver a vivirlos de nuevo.



















- ¿𝘊𝘶𝘢́𝘭 𝘦𝘴 𝘵𝘶 𝘤𝘰𝘭𝘰𝘳 𝘧𝘢𝘷𝘰𝘳𝘪𝘵𝘰? -preguntó la niña de hebras negras a su compañero que se le asignó para la actividad en equipo.

- 𝘌𝘴...    -iba a responder pero una voz lo interrumpió.

- 𝘊𝘩𝘪𝘤𝘰𝘴!, 𝘯𝘰 𝘴𝘦 𝘴𝘪𝘨𝘢𝘯 𝘥𝘪𝘴𝘵𝘳𝘢𝘺𝘦𝘯𝘥𝘰 𝘰 𝘭𝘦𝘴 𝘷𝘰𝘺 𝘢 𝘣𝘢𝘫𝘢𝘳 𝘭𝘢 𝘯𝘰𝘵𝘢.   -habló la profesora hacia a ambos chicos enfadada, no era la primera ni la segunda vez que los regañaba a lo largo de la clase.


- 𝘖-𝘰𝘩𝘮, ¡𝘴𝘪!, 𝘱𝘦𝘳𝘥𝘰́𝘯 𝘮𝘢𝘦𝘴𝘵𝘳𝘢.   -respondió la femenina nerviosa al escuchar la pequeña amenaza de su maestra.

𝘠𝘰 𝘯𝘰.   -dijó en sus pensamientos el chico.


















- 𝘌𝘴𝘰𝘴 𝘯𝘰 𝘴𝘰𝘯 𝘢𝘮𝘪𝘨𝘰𝘴 𝘥𝘦 𝘷𝘦𝘳𝘥𝘢𝘥, 𝘱𝘰𝘳 𝘧𝘢𝘷𝘰𝘳, 𝘩𝘢́𝘻𝘮𝘦 𝘤𝘢𝘴𝘰...

- .... 𝘚𝘰𝘭𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘥𝘦 𝘩𝘢𝘣𝘭𝘢𝘳.























-  ¡𝘉𝘖𝘖!.     - exclamarón al unísono ambos amigos saliendo de un callejón asustando a una señora la cuál les gritaba a lo lejos mientras ellos dos solo corrían riéndose.





















- ¡𝘑𝘢𝘫𝘢𝘫𝘢!.   -rió la niña para después sonreírle a su amigo, sonrisa la cuál a él le encantó.




























- 𝘕𝘰 𝘭𝘰 𝘦𝘯𝘵𝘪𝘦𝘯𝘥𝘰, ¿𝘱𝘰𝘳𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘰 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘦𝘴 𝘥𝘦𝘤𝘪𝘳𝘮𝘦 𝘲𝘶𝘪𝘦́𝘯 𝘵𝘦 𝘨𝘰𝘭𝘱𝘦𝘰́?, 𝘱𝘶𝘦𝘥𝘦𝘴 𝘥𝘦𝘤𝘪𝘳𝘮𝘦 𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘢𝘴, 𝘥𝘦 𝘮𝘪 𝘣𝘰𝘤𝘢 𝘯𝘰 𝘴𝘢𝘭𝘥𝘳𝘢́ 𝘯𝘢𝘥𝘢, 𝘦𝘴𝘵𝘰 𝘴𝘰𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦𝘥𝘢𝘳𝘢́ 𝘦𝘯𝘵𝘳𝘦 𝘵𝘶́ 𝘺 𝘺𝘰. 𝘚𝘢𝘣𝘦𝘴.. 𝘢𝘱𝘳𝘦𝘯𝘥𝘪́ 𝘢 𝘤𝘶𝘳𝘢𝘳 𝘩𝘦𝘳𝘪𝘥𝘢𝘴 𝘱𝘰𝘳 𝘵𝘪́.   -terminó de hablar la niña para después acariciar la cabeza de su amigo con una pequeña sonrisa con los ojos cerrados, los ojos del ojimiel brillaron mirándola, sin duda para él ella era un ángel.



























- ¡𝘚𝘰𝘯 𝘨𝘦𝘯𝘪𝘢𝘭𝘦𝘴!.   -exclamó con entusiasmo y felicidad el niño al ver la jaula de los tigres.

Mural ;; Kazutora HanemiyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora