LI

242 24 9
                                    

🚨CONTENIDO EXPLÍCITO🚨

EMILIO

Después de esa divertida cita con mi novio finalmente volvimos al departamento, aunque siendo nosotros, ese regreso estuvo lleno de tonterías con las que no paramos de reír durante todo el camino, la gente nos miraba raro pero no nos importó, solo éramos el y yo disfrutando de una linda noche juntos; al llegar fui a la cocina dispuesto a prepararme un té, realmente mi intensión solo era tomar mi té y luego irme a dormir, pero mi novio tenía otros planes y me di cuenta de eso cuando se acercó detrás de mi presionando mi cuerpo contra el suyo, al inicio me sorprendió, en especial porque el no se atreve a tanto, pero solo me permití disfruta de esa cercanía y más cuando sus labios rozaron la piel de mi cuello...

Joaquín: Ese pantalón te queda muy bien
Emilio: Lo sé
Joaquín: Pero te puedes ver mejor sin el
Emilio: Te da frío
Joaquín: ¿Seguro?
Emilio: Mucho, desde que salí hasta tomar mi mano te da miedo
Joaquín: Mentiroso
Emilio: Llevo tanto tiempo esperando que ya soy virgen otra vez
Joaquín: Eso podemos arreglarlo si tú quieres (besa su mejilla)
Emilio: No te atreves
Joaquín: ¿Me estás retando?
Emilio: Maybe
Joaquín: (apaga la estufa) Ven aquí

Me llevó hasta su habitación y me lanzó a la cama para luego acercarse y besarme, de un tirón desabrochó mi camisa, probablemente perdió algunos botones pero eso ahora no importaba, poco a poco se deshizo de las prendas que cubrían mi cuerpo mientras lo besaba, habia extrañado todo esto; a la primer oportunidad que tuve quité la ropa que permanecía en su cuerpo, de nuevo podía contemplar de cerca ese marcado abdomen, con dificultad quité su pantalón permitiendome una vista completa a su miembro que aún era cubierto por la tela de su boxer, había olvidado su tamaño y con solo mirarlo provocó un escalofrío en mi cuerpo e inevitablemente se escapó un gemido...

Joaquín: Y eso que aún no lo sientes
Emilio: Cállate (lo atrae a el)
Joaquín: ¿Aún quieres continuar?
Emilio: Estaría pendejo si digo que no
Joaquín: ¿Dónde está mi niño lindo que se sonrojaba durante un baile?
Emilio: Llevo mucho mas de un año en abstinencia, si no lo haces tú, lo hago yo
Joaquín: Me encanta esa dualidad en ti
Emilio: Solo hazlo
Joaquín: Tranquilo cariño, no te desesperes
Emilio: Tranquilo mis huevos, si no te callas y te apuras solo tendrás mi puño en tu cara
Joaquín: (lo besa) Solo espera un poco más, necesito prepararte

No me dió tiempo de responder cuando sentí sus dedos llenos de lubricante sobre mi entrada, ni siquiera se en que momento lo agarró o de donde lo sacó, pero eso ya no importaba, en realidad nada importaba, estaba a punto de entregarme una vez más al hombre que amo y nada me hacía más feliz. De un momento a otro dejé de sentir sus dedos, eso me molestó un poco, pero no le reclamé absolutamente nada al ver que retiraba esa última prenda de su cuerpo, se colocó un condón y puso más lubricante en mi entrada para luego presionarla su miembro, poco a poco comenzó a entrar en mi y eso en verdad dolía mucho...

Mientras me acostumbraba a su tamaño solo repartía besos en mi cara, cuello y hombros, ya que el dolor era soportable moví ligeramente mi cadera y el inició un vaivén con su cadera, en verdad extrañaba tanto esta sensación, extrañaba tenerlo así de cerca, poder sentir como mi cuerpo y el suyo se volvían uno mismo, llenarme de ese enorme placer que mi novio puede regalarme.

Poco a poco fue aumentando el ritmo de las embestidas, mi cabeza estaba nublada por el placer, había algunos gemidos de su parte y nuestros cuerpos fusionándose creaban una melodía única, en uno de sus movimientos tocó mi punto dulce lo que provocó que mi espalda se arqueara y un gemido saliera de lo más profundo de mi ser, sonrió con malicia y siguió embistiendo justo en ese punto, mi cuerpo se sentia caliente, mis manos sujetaban con fuerza la sábana bajo mi cuerpo, mis gemidos eran incontrolables y mis piernas se sentían realmente débiles, estaba completamente a su merced y el parecía feliz con eso; tomó mi miembro y comenzó a masturbarlo volviendome presa del placer recibido, ya no tenía control sobre mi, el siguió con si trabajo hasta que una ola de placer me envolvió por completo y me llevó al orgasmo.

No sabía exactamente que habia pasado pero fue la mejor sensación que he tenido en mucho tiempo, mi pecho estaba lleno de ese tibio y blanco líquido viscoso, me sentía un poco mareado y mi cuerpo estaba demasiado débil, mi novio salió de mi interior y limpió todo ese desastre, lo sé porque lo ví, pero no pude mover ni un dedo, era como si mi cuerpo no respondiera a ninguna orden enviada por mi cerebro; después de limpiar con ayuda de mi novio me acomode mejor en la cama, el se acostó a lado de mi abrazándome y cubrió nuestros cuerpos con una sábana.

Joaquín: ¿Estas bien?
Emilio: Si
Joaquín: (acaricia su mejilla) ¿Seguro?
Emilio: Si, solo estoy procesando todo...
Joaquín: Jajaja menso
Emilio: Estaba muy equivocado antes...
Joaquín: (lo interrumpe) Amor no...
Emilio: Dejame terminar
Joaquín: Adelante
Emilio: Estaba muy equivocado antes, cuando dije que Adrian era un dios del sexo, solo por ser un poco rudo conmigo, definitivamente esa estupidez solo la dije porque no te conocía
Joaquín: Jajajajaja estas loco jajajajaja
Emilio: Es en serio, osea si fue bueno, pero es que tú eres único, cuando te ví por primera vez imaginé serías bueno en la cama, pero esto es otro nivel
Joaquín: Jajajaja ya duerme cariño jajaja

Sexy boy (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora