—Buen día Alfred— dije en cuanto entré a su tienda.
—Olivia, que gusto verte— dijo e hizo una pausa, —yo— añadió, pero su tos lo interrumpió.
—está bien señor Alfred?— pregunté acercándome para ayudarlo.
—si, si, estoy bien, solo es una ligera fiebre— contesto; Había ido para contarle de mi experiencia con el piano y a darle unas deliciosas galletas que preparo mi padre.
—son para usted— dije entregándoselas.
—wow, se ven tan deliciosas— contesto sonriendo.
Por más que trate de ocultarlo no pude hacerlo, Alfred se dio cuenta de que yo estaba triste, y es que, por alguna razón sentía que Jake me ocultaba algo, siento que no me dijo la verdad aquel día.
—bueno, quizás ese chico, si te está mintiendo-dijo Alfred.
—pero porque lo haría, eso es lo que no entiendo— conteste, Alfred levanto los hombros diciendo "no se" baje la mirada y me agarre las manos.
—bueno, ya debo irme— dije.
—Está bien, Gracias por venir— contesto Alfred.
Salí de la tienda, con mi celular en la mano, di 4 pasos y llame a Jake.
—Hola?— contestó.
—Jake, am, hola, podríamos vernos?— pregunte.
—Ah, lo siento, estoy con Stela, em, estamos cuidando a mi padre— respondió, tartamudeaba, y solo de fondo se escuchaba la voz de Stela, decía algo de mentiras y traiciones, el padre de Jake contestaba con nombres extraños.
—oh, está bien, pero, cuando podremos vernos?— pregunte.
—pues, no lo sé Olivia yo— y se corto la llamada.
—Jake, hola?— suspire, y guardé mi celular, camine hacia mi casa y comencé a escribir lo que sentía en ese momento, "ojos marrones, llenos de culpa, y pequeñas mentiras piadosas, si, me hice la tonta pero siempre supe"
—Olivia— fui interrumpida por mi padre.
—si?— pregunte.
—hija, mi jefe me llamo y, voy a tener que volver al trabajo—dijo.
—¿Que, porque?—
—hija, será, solo por unos días, pero—
—papá, eso mismo me dijiste la primera vez que te fuiste, y no estuviste por meses—
Papá estaba avergonzado y yo triste, Mamá no estaba en casa, y todo era un desastre.
—hija, yo no estaré y tal vez tú madre tampoco pero, ella me dijo que volviste a ver a Jake, podrás quedarte con el, no?— dijo, agache la cabeza, y hable.
—Papá Jake, y yo, ya, no somos amigos— dije viendo el piso.
—¿Que?— hizo una pausa, —pero, ¿como que no?— preguntó.
—ya no quiero hablar de eso papá— dije, salí de mi habitación y caminé hacia la cocina para prepararme algo de comer; Ya faltaba poco para que Jake se fuera, y tenía que darle mi carta, pero ahora sería más difícil, de alguna manera nuestra amistad había cambiando, y todo porque el padre enfermo, pensé, tal vez debería ir a visitarlo, llevarle algún obsequio, y tal vez así si confié en mi, no era una mala idea.
Mientras caminaba por el pasillo de la escuela de Artes hacia mi casillero, la señorita Jenny me vio.
—Olivia, ¿que haces aquí?— pregunto.
—oh, vine por mis cosas, nunca acabe de llevármelas— conteste, abrí mi casillero y empecé a meter todas las cosas en mi mochila.
—oh, que bien— hizo una pausa, —que bien que estás aquí, porque, tengo algo que decirte— dijo, deje la mochila en el suelo y puse atención.
—Una amiga mía que da clases de canto, me dijo que necesita a una chica para cantar en un musical que hará próximamente, y, pensé en ti-
dijo emocionada.
—cantar, yo?— dije confundida.
—si, seguro tienes una muy linda voz, te mandaré su contacto— dijo sacando su celular, me quede mirando a la nada pensando en aceptar on no.
—Pero, señorita Jenny, yo—
—se que estas nerviosa y que nunca has cantando antes, pero, seguro eres muy buena en eso, podría ser una muy buena oportunidad-dijo interrumpiéndome.
—lo pensaré— conteste, agarre mi mochila, cerré mi casillero y me fui; Claro que quería hacerlo, pero no estaba segura de si cantaba bien o no, ese era mi miedo.
¡Vamos Olivia, Vamos! estaba apunto de mandarle un mensaje a la amiga de la señorita Jenny, pero el miedo me estaba ganando, suspire lentamente, y pensé, la vida es una, y hay que vivirla, no dejes que tus miedos ocupen el lugar de tus sueños, volví a suspirar, y mande el mensaje, una vez hecho apague mi celular y espere a que contestara, no fue rápido, pero tuve una buena respuesta.
Mándame un video cantando, ¿y tocas algún instrumento? Decía su mensaje.
Si, el piano, conteste, ni si quiera sabía tocarlo bien aun pero tenía que ganar su atención.
—hija, ¿como te fue hoy?— pregunto mi madre al llegar a casa.
—bien mamá, adivina que— hice una pausa,
—voy a cantar en un musical— dije poco emocionada.
—¡Wow enserio!— respondió, —y en cuál, de quién es o como, ¡cuéntamelo todo!— añadió.
—Una amiga de la maestra Jenny, la de teatro, buscaba a una chica de mi edad para que cantara en su próximo musical, y pues, acepte, pero no se si canto bien— dije.
—hija, vamos, si ella te escogió es porque cantas bien, ¿como te escucho cantar primero-
—le mande un video— conteste a su pregunta.
—¿y que te dijo al ver el video?—
—pues, nada, solo escribió, "estas dentro"—
Mamá me hablo toda la noche sobre perseguir mis sueños, no tener miedo y esas cosas, ella tenía razón, jamás llegaría a nada si seguía con miedo, así que después de pensar mucho, también decidí decirle a Jake lo que siento, en persona.
(2 días antes de que Jake se valla)
Desayune un simple yogurt de fresa, metí a mi mochila la carta que había escrito para Jake, me puse mi mejor ropa y mis mejores zapatos.
—Ya me voy mamá— ella contesto con un "okey" y salí de la casa, me subí a mi bicicleta y me fui, decidida a decirle todo a Jake...
Mientras pedaleaba por la calle, sentía el aire en mi cara, mis piernas me empezarían a doler en cualquier momento, y tendría que parar a descansar, lo pensé una y otra vez, nuestra amistad cambiaría más de lo que ya había cambiado, ¿estaba segura de hacer esto? tantas cosas que podrían pasar, tantas cosas que Jake podría decir, tal vez me odie después de eso, y tal vez jamás nos volvamos a hablar.....
Olvide todos esos malos pensamientos que no me ayudarían en nada, no podía seguir fingiendo que no me duele verlo con Stela, suspire, baje de mi bicicleta, y toque la puerta.
